Cómo es vivir en una de las casas de madera que donará la AFA
La Nueva. dialogó con el propietario de una de las 42 viviendas que construyó la ONG Techo en nuestra ciudad tras el temporal de diciembre de 2023.
Subjefe de noticias en La Nueva, conductor de los programas "Allica y Prieta a las 12", que se emite por La Nueva Play, y "El Mundo a las 8" en FM Ciudad 94.7. Trabaja en La Nueva desde 2011 y ha realizado coberturas periodísticas de temas legislativos en el Concejo Deliberante e investigaciones a partir del portal Gobierno Abierto.
El presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia, compartió días atrás una publicación mostrando cómo serán las viviendas que donará la AFA a Bahía Blanca por cada gol de la selección argentina, tras la inundación del 7 de marzo, y se disparó una fuerte polémica y cuestionamientos de miles de usuarios de redes sociales.
Entre las críticas que se expresaron sobre las casas que construye la ONG Techo es que las mismas son de madera y "muy precarias" para lo que muchos imaginaron, luego de que el máximo organismo del fútbol del país anunció que levantaría una vivienda por cada gol.
Lo que muchos desconocen es que en Bahía, y tras el temporal de viento de diciembre de 2023, se construyeron 42 de esas viviendas en Los Patricios, un pequeño barrio que creció como asentamiento durante la pandemia entre el arroyo Napostá y el barrio 5 de Abril.
Ayer La Nueva. recorrió el lugar para preguntarle a los vecinos que recibieron esas casas si les fueron útiles o, por el contrario, no sirven para ser habitables.
“Cuando recibimos esta casa nos alegramos mucho porque nosotros habíamos perdido todo y la realidad es que cumplió con lo que esperábamos. Resistió el granizo de febrero y la inundación del 7 de marzo”, contó Francisco, uno de los beneficiarios que tras un año y medio de habitarla dio su veredicto.
"Cuando hay mucho viento se siente, no se puede negar, pero viene bien recubierta con lana de vidrio y no pasamos frío extremo ni calor en el verano. Es una casa que cumple con las funciones y nosotros con mi mujer pedimos permiso para hacer alguna reforma y mejorarla", sostuvo.
La vivienda en cuestión se convirtió en un kiosco barrial y tiene dos habitaciones, baño, un aire acondicionado instalado y enchufes para varios electrodomésticos. A comparación de las otras que se levantaron en el sector, está ubicada sobre una platea de material.
“Nos dolieron los comentarios despectivos sobre las casas porque nadie tenía la obligación de ayudarnos y, sin embargo, lo hicieron. Y ahora la AFA también. A nosotros nos sirvió para poder empezar a levantar una nueva casa de material sin quedar a la intemperie", dijo.