Milei reforzó su seguridad en el exterior por la tensión entre EE.UU. e Irán
En cada desplazamiento, Casa Militar y la custodia presidencial coordinan con el país anfitrión el plan destinado a proteger la integridad del mandatario.
El conflicto bélico entre Estados Unidos e Irán ha tenido un impacto indirecto en la seguridad del presidente Javier Milei, tras la decisión del Gobierno Nacional de reforzar las medidas de protección durante sus viajes internacionales.
En cada desplazamiento al exterior, Casa Militar y la custodia presidencial coordinan con el país anfitrión el plan de seguridad destinado a proteger la integridad del mandatario, asignando efectivos para llevar a cabo los operativos correspondientes.
Según fuentes oficiales, debido al alineamiento de Argentina con Estados Unidos en medio de las tensiones con Irán, la Casa Rosada planea intensificar la coordinación en cada visita internacional para garantizar que la seguridad de los países anfitriones maximice la protección necesaria.
No obstante, el alcance de la Casa Militar en estas operaciones es limitado, ya que son los países anfitriones quienes diseñan los detalles de los operativos en función de la información recopilada por sus agencias de inteligencia.
"Casa Militar debe ser la cara visible, estar cerca del presidente para que reconozca a su gente durante los operativos, pero nadie tiene un conocimiento más cercano de la situación que las autoridades del país anfitrión", explicó una fuente con amplia experiencia en la materia.
A pesar de esta limitación, las embajadas argentinas en diversos puntos del mundo incrementarán la presencia de efectivos de seguridad, dado que el nivel de riesgo para el presidente ha aumentado de "bajo" a "medio" tras sus recientes declaraciones alineadas con Estados Unidos.
"Irán es un enemigo de Argentina", afirmó Milei en medio de la creciente tensión en Oriente Medio, que actualmente atraviesa un frágil alto al fuego impulsado por Estados Unidos.
Aunque, por el momento, no se han detectado amenazas específicas, la administración de Milei ha decidido mantener la vigilancia constante, dada la inestabilidad del contexto internacional y la naturaleza de su cargo.
Sin embargo, la intensificación de los protocolos de seguridad no se aplicará a nivel local, ya que no se consideran motivos para modificar el esquema de protección del presidente en el país. Incluso, algunos funcionarios califican de "hechos aislados" los incidentes que interrumpen la rutina presidencial.
El pasado lunes, la Brigada Antiexplosivos de la Policía Federal Argentina (PFA) debió intervenir en la Quinta de Olivos tras una amenaza de bomba realizada por una mujer. Sin embargo, la administración consideró que se trataba de un intento de "molestia" por parte de un "estúpido".
Aunque la amenaza fue recibida a través de una llamada al 911, lo que dio lugar a un operativo en la intersección de la avenida Maipú y Villate, no se produjo un desalojo de la residencia presidencial. El protocolo habitual fue activado, lo que incluyó la inspección de explosivos, la intervención del juzgado federal en turno y la revisión del perímetro externo por parte de Defensa Civil. (NA)