Calle Alberti: atractiva arquitectura en la calle de las acacias y las anchas veredas

Mario Minervino

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Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.

La calle rinde homenaje a Manuel Maximiliano Alberti, nacido en Buenos Aires en 1763 y ordenado sacerdote a sus 23 años de edad. Protagonista de los sucesos del 25 de mayo de 1810. fue vocal del Primer gobierno patrio. Unos meses después, el 31 de enero de 1811, luego de sostener una fuerte discusión con el dean Gregorio Funes en el Cabildo, falleció de un ataque al corazón. Tenía 48 años. Fue el primer integrante de la Primera Junta en fallecer, apenas dos meses antes que Mariano Moreno.

Un espacio en armonía

“Amo la naturaleza, amo el paisaje porque es muy sincero. Nunca me engaña. Nunca bromea”. - Henry David Thoreau

En un recorrido de cinco cuadras –entre Witcomb y Rosario— que va variando en cada cuadra, Alberti mantiene una estética muy particular, donde la presencia de árboles, jardines y flores marca un paisaje por demás atractivo.

Entran en ese juego sus anchas veredas la arboleda de copas anchas antes que altas, con una separación adecuada entre ejemplares y un crecimiento acorde que genera atractivos lugares de sombra.

A esto se suma su arquitectura, que combina modelos modernos y pintorescos, mayormente retiradas las viviendas de la línea municipal, lo cual genera una interesante perspectiva y alienta el desarrollo de cuidados jardines. Es una calle que da gusto caminar, entre las que se eligen por su estética y paisajismo, las que genera espacios públicos distintos.

Aires modernos

"El verdadero lujo no se encuentra en la abundancia de elementos, sino en la simplicidad y la elegancia en su forma" Ludwig Mies van de Rohe

El llamado Movimiento Moderno en el mundo de la arquitectura suele ubicarse entre 1920 y 1960 como época de aparición y consolidación. Su propuesta de volúmenes puros, cubiertas planas, ventanas corridas y una organización propia de los nuevos tiempos marcaron un antes y un después en la historia de la arquitectura. Si bien movimientos posteriores la cuestionaron y hasta pareció condenada al olvido, hoy su estética sigue vigente, con variantes claro, a veces combinando otros estilos. Pero aquel lenguaje, esa forma de diseñar, está presente hoy en el gusto de muchos. Alberti no es un lugar donde descubrir esas formas.

La tradición y las reminiscencias

En cualquier cuadra de una ciudad lo más habitual es la convivencias de estilos, de texturas, de materiales y de formas. Son estratos del paso del tiempo que la arquitectura se encarga de reflejar. La convivencia de propuestas a veces tan distintas es positiva cuando mantienen entre ellas una armonía, una escala, una misma escenografía. En este caso aparece el típico chalét, la vivienda de techos a dos aguas con fuerte pendiente y hasta alguna llamativa combinación de una vivienda de rasgos modernos con terminaciones neocoloniales y una terminación mediterránea que lleva a otros paisajes.

El Santo más querido y dos esquinas con estatuas

"¡Oh glorioso San Cayetano! Aclamado por todas las Naciones; Padre de Providencia, porque con portentosos milagros socorres a cuantos te invocan con fe en sus necesidades". Oración a San Cayetano.

Cada 7 de agosto en Alberti al 500 se reúne una enorme cantidad de creyentes para rezar, pedir y agradecer a San Cayetano, el Patrono del pan y del trabajo. Allí está la parroquia que lleva su nombre, un edificio con techo a dos aguia de fuierte pendiente, una torre campanario propia del románico y un pequeño acceso que tiene líneas neoclásicas. En la esquina un pequeño jardín con una escultura que muestra a un grupo familiar.

Enfrente otro vivienda de uso religioso muestra la imagen de Jesús también en el frente, sobre un elevado pedestal.

Cayetano es considerado el Santo más seguido en nuestro país, a la hora de pedir trabajo. Nació en Vicenza, Italia, en 1480 y fue declarado santo en 1671 por el Papa Clemente X. La leyenda asegura que un campesino estaba por perder sus cultivos de trigo cuando le rezó a San Cayetano y a las pocas horas una intensa lluvia salvó la cosecha. Por eso siempre hay trigo junto a su figura.

Final

"Las calles y sus aceras, los principales lugares públicos de una ciudad, son sus órganos más vitales. ¿Qué es lo primero que nos viene a la mente al pensar en una ciudad? Sus calles. Cuando las calles de una ciudad ofrecen interés, la ciudad entera ofrece interés; cuando presentan un aspecto triste, toda la ciudad parece triste". Jane Jacobs, arquitecta

Naturaleza, flores, árboles, cielo, arquitectura, espacio. Eso y algo más se conjugan en este paseo. Una muestra clara de que no todo es lo mismo. Que un buen diseño genera espacios de calidad, que un buen arbolado arma un lugar, que los jardines son algo más que un espacio residual.