Precios en dólares: más escepticismo que entusiasmo

Victoria Álvarez Fortunato

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Periodista y técnica en Comunicación Digital. Desde 2022, integra el equipo de redacción de La Nueva., donde cubre eventos sociales y políticos a nivel local, regional y nacional para la edición impresa y digital.

En un país donde la economía diaria gira en torno al peso y su impredecible valor, el anuncio de que los comercios podrán exhibir los costos en dólares parece haber despertado más escepticismo que entusiasmo.

En ese sentido, el presidente de la Cámara de Comercio de Bahía Blanca, Martín Garmendia, no ocultó su postura crítica ante la medida impulsada por el gobierno nacional. "No va a cambiar absolutamente nada", sentenció sin rodeos.

"Son ideas demagógicas que no tocan al consumidor común, al que día a día sale a comprar alimentos y productos", dijo Garmendia en una entrevista con La Nueva.

Y es que, según el comerciante, esta resolución no parece ofrecer ventajas concretas para la mayoría de los argentinos. "¿Cuál sería la ventaja? No lo entiendo. Tal vez sirva para operaciones grandes, como la compra de maquinaria, pero insisto: no alcanza al común de los argentinos", reflexionó.

Para Garmendia, la razón de fondo es sencilla: "Los argentinos piensan en pesos".

Aunque los comercios opten por mostrar los valores en dólares, los consumidores seguirán haciendo los cálculos mentales en la moneda nacional. "Por más que me pongas el precio de la yerba en dólares, yo lo que voy a ver es cuántos pesos tengo en el bolsillo para comprar", ejemplificó.

Mediante la Resolución 4/2025, la Secretaría de Industria y Comercio del Ministerio de Economía de la Nación dispuso que los precios de bienes y servicios podrán exhibirse tanto en pesos argentinos como en dólares u otras monedas extranjeras. En todos los casos, los comercios estarán obligados a indicar el importe total y final que deberá abonar el consumidor.

La normativa enfatiza la importancia de que los costos se presenten de manera clara, visible y legible, siempre al alcance y a la vista de los consumidores.

Asimismo, a partir del 1 de abril de 2025, será obligatorio incluir la leyenda "Precio sin impuestos nacionales" junto con el importe neto, excluyendo IVA y otros impuestos indirectos, en un tamaño menor al del precio final.

Garmendia señaló que este tipo de medidas carece de arraigo histórico. "Si alguna vez alguien cree que esto se puede instalar como definitivo, yo diría, desde mi experiencia, que no. Como tampoco se pudo instalar el austral o el patacón", remarcó.

Asimismo, evocó épocas en las que la volatilidad del dólar marcaba el pulso del comercio. "Esto ya lo vimos hace muchos años: algunos prendían la radio para ver qué precio tenía el dólar en ese momento y se lo cobraban al consumidor", relató.

"Venimos de un 2024 muy duro y estamos en un 2025 incierto"

El dirigente sostuvo que si se disparara la divisa paralela "la cosa se complicaría". Sin embargo, remarcó que "no está en los planes del gobierno que pase".

"La paridad dólar oficial-dólar blue está cada vez más cerca, por lo que el Gobierno está apostando a que no haya ningún movimiento importante en el mercado", manifestó.

No obstante, su preocupación no se limita a esta medida específica. Según señaló, el contexto económico de 2024 ha sido "muy duro", y el horizonte para 2025 no ofrece muchas certezas.

"Las ventas de fin de año no fueron buenas, y los números que recibimos de las zonas turísticas son desalentadores", afirmó; y agregó: "Por más que estemos inflando la afluencia turística, las cifras finales no van a ser lo que esperamos".

"Son medidas de shock que no van a alcanzar al grueso de los argentinos", concluyó.

Mientras tanto, el consumidor promedio seguirá enfrentando los desafíos del día a día con una única pregunta en mente: ¿cuánto alcanzan los pesos que tengo en el bolsillo?