Ihitz: la charla de Mungo, el mensaje que les deja el triunfo y la alegría para la gente que la pasa mal

Mikel Iñurrategui

minurrategui@lanueva.com

Por la buena imagen que había dejado en su anterior paso por el club, por la conexión que logró con el hincha, por su nivel y porque venía de una categoría superior.

Por esas cosas y más, Nicolás Ihitz fue el refuerzo que más movilizó a la gente de Villa Mitre en el último receso antes de un nuevo Torneo Federal A.

Con esas expectativas a cuestas, ayer Nico vivió su tarde soñada en El Fortín y se reencontró de lleno con todo ese cariño que desde hace tiempo le muestra la parcialidad villamitrense.

"El cariño de la gente siempre estuvo, incluso cuando estaba lejos. Siempre me decían que vuelva, que me estaban esperando. Además de la gente, la familia, el escudo, Bahía Blanca, fueron muchas cosas que se fusionaron para que hoy esté acá para pelear por el objetivo que tenemos todos: los 25 del plantel, el cuerpo técnico, los utileros, los médicos, kinesiólogos, todos...", admite Nico.

El "Loco" fue el protagonista central de un final vibrante, donde Villa Mitre terminó venciendo a Sansinena por 3 a 2, con dos goles suyos, a los 38 y 42 minutos del complemento.

Pero la historia había comenzado torcida para la Villa que perdía 2 a 0 en 21 minutos, resultado que se estiró hasta los 58, cuando llegó el descuento de Jara.

"Tuvimos un primer tiempo de mierda. Pensé que en el entretiempo, cuando pisáramos el vestuario, Carlos (Mungo) nos iba a pegar una zarandeada (sic) bárbara. Pero no, nada que ver, la verdad que lo manejó muy bien. Demostró toda la experiencia que tiene en esto. Nos dijo que creyéremos un poquito más en nosotros, que teníamos con qué, y lo pudimos sacar adelante", contó Ihitz.

-Vos también habías tenido un arranque complicado, una pérdida que terminó en gol y habías tenido un par de chances claras que no pudiste concretar...¿estabas con bronca a nivel personal también?

-Sí. Estaba re caliente, más que nada por los goles que erré, un pase lo podemos errar. El primero era pegarle un poco más fuerte, el segundo era cabecear bien, que es uno de mis fuertes y no puedo errar ahí. Nada, la verdad que llegué al vestuario muy caliente y gracias a Dios después lo pudimos revertir.

-Cuando haces el 2-2 fuiste a buscar rápido la pelota, casi no festejaste, ¿entendías que era momento para ir por más?

-Es lo que demanda este club, esta gente. Gracias a Dios lo pudimos dar vuelta y estoy muy contento, más que nada por mis compañeros que son los que luchan día a día para obtener estos tres puntos.

-¿Primer doblete, no?

-Sí, primero jaja. Contento por eso, pero más que nada porque le pudimos dar una alegría a la gente. Estamos en un país que está medio complicado y nosotros por ahí le damos una alegría. Capaz que no es mucho, pero sirve para que la gente arranque la semana de otra manera. Y más para la gente de Villa Mitre que es muy pasional. Esperemos que estén contentos con este triunfo.

-Demostraron que perdiendo 2 a 0 tampoco hay que darlos por muertos, ¿crees que mandan un mensaje al resto de los equipos con este resultado?

-Sí, creo que son dos los mensajes. El primero es que si nosotros pelotudeamos nos van a hacer fuerza todos los equipos. Y el otro es que si somos un equipo serio, vamos a pelear grande cosas. Va a depender de nosotros. Si seguimos con esta entrega y este sacrificio podemos lograr grandes cosas.

Cuando pudo salir del tumulto y el alocado festejo, Nico besó las canilleras, se las mostró a la gente y después también se besó el escudo.

En esas canilleras lleva una frase y una imagen de su mamá, a quien le dedica todos sus goles. Ayer no fue la excepción.

"Siempre la tengo presente y me acompaña desde el cielo. Todos los goles son para ella", contó.

Cuando terminó el partido también miró al cielo y agradeció, luego se tiró al piso con lo último que le quedaba.

"Terminé acalambrado en los dos gemelos. Siempre los arranques de los torneos me cuesta eso, cuando agarro ritmo ya se me acostumbran pero los primeros partidos son bravos", reconoció.

Luego de un arranque perfecto en su cancha (2-0 ante Santamarina y 3-2 frente a Sansinena), Villa Mitre se medirá el miércoles ante Huracán de Parque Patricios, por los 32avos de final de la Copa Argentina.

"Es un partido para disfrutar pero nosotros tenemos un solo objetivo acá, la Copa es un condimento. Obviamente que la gente va a ir ilusionada y nosotros también. Esperemos ganar, jugamos amistosos y los queremos ganar, hacemos reducidos en la semana y los queremos ganar, nos terminamos peleando y después nos amigamos porque somos compañeros, pero queremos ganar todo. Esperemos hacer un gran papel el miércoles pero el objetivo nuestro es el torneo y esperamos poder darle una alegría a esta gente a fin de año", cerró Nico, goleador de la tarde ayer.