Aníbal Fernández respaldó al jefe de la Policía Federal pese a las críticas del kirchnerismo
El ministro de Seguridad ratificó en su cargo al comisario general Juan Carlos Hernández. Planteó la hipótesis de una organización delictiva detrás del intento de asesinato. Reconoció que se están revisando los protocolos de custodia de la Vicepresidenta
Aníbal Fernández llegó a los Estados Unidos para profundizar las relaciones institucionales con la DEA, el FBI y Homeland Security, que puso a disposición sus laboratorios y su última tecnología para colaborar en la causa que investiga el ataque fallido a Cristina Kirchner.
El ministro de Seguridad se alojó en el Hyatt Park Central, un hotel ubicado en pleno Midtown de Manhattan.
“Yo respaldo la actuación del jefe de la Policía, Juan Carlos Hernández. No hay razón alguna para que resigne su cargo”, señaló Aníbal Fernández, pese a los cuestionamientos del kirchnerismo más rancio, incluido Máximo Kirchner.
El ministro de Seguridad reconoció que trató este asunto con el presidente y la vicepresidente y que —en ambos casos— no hubo indicación para revelar al comisario general. “Si hubiera sido al revés, piensan que aún estaría”, reflexionó con cara de poker.
Aníbal Fernández también evaluó que la investigación es profunda y que aún está en su comienzo. “Hay muchísima información que estamos procesando”, dijo. Y añadió un dato revelador: “Aún no sabemos si Sabag Montiel llevaba el arma o se la dieron antes de gatillar”.
El titular de la cartera de Seguridad centró su interés en el rol de Gabriel Carrizo, jefe de los Copitos. Le llama la atención el contenido de sus chats y el costo de los honorarios de su defensor privado. “Son abogados caros. ¿Lo paga vendiendo copitos”?, se preguntó frente a los periodistas. (Infobae)