De Kicillof a Larreta: “Dame una mano…”

Redacción de La Nueva.

contenidos@lanueva.com

   El dialogo vía Whatsapp ocurrió un rato antes de la reunión que ayer por la tarde mantuvieron los ministros de Salud de la Nación, la Provincia y la Ciudad. “Te pido un gesto, dame una mano”, le escribió el gobernador Axel Kicillof al jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. “Como hemos hecho hasta ahora todo lo vamos a coordinar”, fue más o menos textual la respuesta del alcalde según fuentes a ambos lados de la Avenida General Paz que estuvieron al tanto de ese cruce.

   Kicillof le estaba pidiendo a Larreta que entienda la posición de la provincia, y de hecho de los millones de bonaerenses que la están pasando mal con una cuarentena todavía rígida, frente al espectáculo de miles de “runners” que invadieron en lunes de la semana pasada los paseos de Palermo y otras plazas de la Ciudad.

   El que puso después blanco sobre negro ese pedido de Kicillof al intendente porteño fue el ministro de Salud, Ginés González García, al término de la reunión que mantuvo con sus colegas de Provincia, Daniel Gollán, y de la Ciudad, Fernán Quiroz.

   Allí, como se sabe, se dio el primer paso para coordinar acciones entre las tres jurisdicciones mediante la creación de una “Sala de Situación del AMBA” para trabajar los números y estadísticas sobre los contagios y muertes por la pandemia de coronavirus y no de manera separada como venía ocurriendo hasta ahora.

   “El problema no son los runners, pero evidentemente no es una buena escena”, dijo Ginés.

   Rodríguez Larreta pareció después poner entre signos de interrogación su respuesta al pedido de colaboración “amistosa” que le formuló el gobernador, cuando dijo por la noche y tras la reunión interministerial que la Ciudad y la Provincia pueden “coordinar” acciones. Pero eso no quiere decir, remarcó, que luego adopten “las mismas decisiones” habida cuenta de la distinta realidad que se registra ahora en ambos distritos. Es decir mayor cantidad de contagios en la provincia y en especial en el conurbano bonaerense que los que se registran en el distrito porteño.

   Aquel pedido de Kicillof fue el fin de una larga lista de mensajes y chats que se cruzaron entre funcionarios provinciales, pero también en sus contactos con sus pares de la Ciudad. Y no fue, remarcan las fuentes, el primero de ese tenor que se intercambiaban en las últimas horas el gobernador y el alcalde.

   ”¿Qué le decimos a los bonaerenses a los que les pedimos mayor dureza a la hora de cuidarse, si ven en la tela miles de personas corriendo por los bosques de Palermo?”, fue uno de los comentarios que encendió la mecha de un posible conflicto, en boca de un colaborador cercano del viceministro de Salud de la provincia, Nicolás Kreplak. El propio viceministro había dado un paso en esa dirección, mientras crecía el fastidio de Kicillof por el espectáculo, cuando dijo con todas las letras que la avalancha de “runners” del primer día dio “una imagen de incoherencia”.

   Tras la reunión de los ministros de Salud en la Casa Rosada las cosas parecieron volver a su cauce, pero quedó en el ambiente aquella molestia del gobernador y su posterior pedido al intendente para que de algún modo coopere para alivianar los enojos por esa “mala imagen”.

   El subsecretario de Transporte de la provincia, Alejo Supply, buscó esta mañana bajarle el tono al fondo de la disputa que se había generado, y que llevó a algunos exaltados a culpar directamente a los permisos para correr en Palermo y otras plazas porteñas por el aumento de contagios en el conurbano bonaerense. “La gente de la ciudad tiene otras prioridades que la de la provincia, pero no estamos en contra de los runners”, afirmó.

   Esta mañana, Rodríguez Larreta ofreció una conferencia de prensa y si bien no pareció responder directamente a aquel ruego de Kicillof, dejó la impresión de que no descarta que si se reafirma el aumento de contagios las aperturas en la Ciudad, como la de los polémicos “runners”, puedan modificarse. “Si la situación se complica volvemos para atrás”, reconoció.