"Mi carta de presentación es que soy docente, no que estuve en Las Leonas o en siete Juegos Olímpicos"
Gabriel Minadeo, exentrenador del seleccionado femenino de hockey y jugador de Los Leones, formó parte de la clínica "Dx3" organizada por Bianca Donati y su familia en el club Pacífico.
Formó parte de siete Juegos Olímpicos y, en ese proceso, también pudo ver de cerca la transformación de uno de los seleccionado más emblemáticos de la historia del deporte nacional.
Aunque algo injusto o incompleto, ese es un gran resumen de lo que representa para el hockey de Argentina el nombre de Gabriel Minadeo, quien visitó nuestra ciudad para formar parte de la segunda edición de la clínica "Dx3" que organiza Bianca Donati y su familia.
El exjugador de Banco Provincia, disputó tres Juegos con Leones (Seúl 1988, Barcelona 1992 y Atlanta 1996), fue asistente de Sergio Vigil en otros dos (Sídney 2000 y Atenas 2004) y entrenador en jefe en otros dos (Beijing 2008 y Londres 2012).
"Fueron días muy lindos en Bahía, con gente amiga. No es que uno viene a trabajar, sino que viene a disfrutar del momento, de los chicos, de los amigos y es un placer estar acá", reconoció Minadeo dialogando con La Nueva. en la cancha de Pacífico, donde alrededor de cien chicas y chicos disfrutaron del evento del que también formó parte -entre otros- el campeón olímpico Juan Manuel Vivaldi y la última Leona bahiense, Candela Esandi.
-¿Qué te gusta dejar cuando participás de estas cosas?
-Herramientas para que ellas se puedan desarrollar en lo que es el hockey moderno hoy. Lo que siempre les digo es que la base de todo esto es el entrenamiento. Obviamente que ellas también se vayan perfeccionando, no quedarse solamente con lo del club, sino también a veces solos, llegar antes al club o quedarse un ratito más. Y, después, que disfruten del deporte, es lo más lindo que tiene el hockey. Esto es amateur y hay que disfrutar del equipo y los momentos vividos.
-¿Disfrutá de esa parte de la docencia?
-Me encanta la parte formativa, la disfruto mucho. Soy profe de educación física y cada vez que puedo meterme con las divisiones inferiores lo hago, eso es lo más lindo, porque es donde uno empieza a ver el disfrute de los chicos y todo el proceso que van viviendo y cuando uno lo ve en Primera es muy, muy gratificante.
-¿Seguís viendo en las mas chicas esa pasión?
-Cuesta un poquito más. Hoy los chicos tienen un montón de cosas para hacer y eso los dispersa un montón, pero cuando están en el entrenamiento se entregan al cien por ciento. Eso está bueno: cuando uno le pide un plus antes lo teníamos y ahora cuesta un poquito más, pero eso va con cada uno. Hay chicos más apasionados o que sueñan más con ser Leonas o Leones y esos siempre están más predispuestos.
-¿Eso es algo que es fácil de notar?
-Se nota enseguida y lo ves al chico en el entrenamiento o en lo que hacen antes y después, en cómo se quedan a ver a la Primera o están un sábado o domingo todo el día en el club.
-Muchos de ustedes, que estuvieron en lugares de privilegios, creo que siguen haciendo estas cosas para seguir sembrando la semilla del hockey por el país, ¿es un poco eso?
-Uno tuvo la suerte de llegar. A mí me apasionaba jugar, después por otras cosas de la vida se fue dando lo del entrenador y esto lo absorbí de mis entrenadores, lo de enseñar. Uno igual no se va dando cuenta lo que pudo haber construido en todos estos años como entrenador, por eso sigo en este rol, entrenando con chiquitos y no me creo más que nadie por haber estado en un lugar de privilegio.
-¿Pero lo ves así, como parte del legado que intentan dejar en busca del crecimiento de la disciplina?
-Sí, y que todos los que pasaron por los Seleccionados que vuelquen toda sus ganas, su pasión, su experiencia de cómo llegaron porque hoy el hockey está en un lugar de privilegio y esto llevó años en construirlo. Creo que en este proceso estamos todos involucrados.
Hace apenas unos días se cumplieron 25 años del nacimiento de un emblema para el deporte nacional: el surgimiento de Las Leonas, un hito que cambió para siempre la historia del seleccionado argentino y creo una mística que se transmite en el tiempo.
Primero como asistente de Cachito Vigil y luego como entrenador principal, Minadeo fue testigo privilegiado del bautismo y los primeros pasos de ese mote que se fue llenando de significado de a poco.
-¿Qué tanto te marcó ser parte de los Seleccionados?
-Te abre puertas, pero hoy mi carta de presentación más importante es que soy docente, no que fui entrenador de Las Leonas o que estuve en siete Juegos Olímpicos, sino que soy docente y que tuve la posibilidad de estudiar. Eso fue lo que más me dejó para el momento de enseñar también.
-¿Qué significó para vos ver ese proceso de tan cerca y siendo parte?
-Fue muy, muy importante; fue un disfrute total. Me tocó entrar cuando era el Seleccionado femenino y me tocó salir cuando eran Las Leonas. Eso fue totalmente un shock muy grande, al día de hoy tampoco me doy cuenta lo que pude haber construido con Sergio Vigil. O mismo cuando me tocó reemplazar a Cachito, fui el asistente del seleccionado de hockey y después, el entrenador de Las Leonas. Eso tiene un peso, que tiene disfrute y también tiene momentos amargos, en los que hay que dar listas, pero es parte del rol que tiene un entrenador de Selección.
-Acá esta Bianca, a quién dirigiste en su primer partido en Las Leonas, o Candela, que debutó hace unos días en la Selección. ¿Qué significa jugar en Las Leonas o ser parte de un Seleccionado si lo tuvieras que explicar?
-Llegar a ese lugar es un privilegio enorme, es un orgullo, muchas chicas sueñan con ser Leonas. Y lo que tiene hoy es que se magnificó, creo que es uno de los deportes femeninos más reconocidos, que tuvo grande jugadoras que trascendieron y llegaron a ser las mejores del mundo. Tenerlas en Argentina es un privilegio, si fueran futbolistas no habría dimensión. Y tenerlas acá, que las chicas las puedan ver, las puedan tocar, las puedan escuchar, eso está muy bueno.
-¿Qué tan importante es para el futuro de Las Leonas este tipo de evento y que las vean de cerca?
-Creo que esto es muy importante, porque Las Leonas que hoy están, empezaron con esto: en clubes, con clínicas, sacándose fotos con chicas que eran Leonas. Este es el inicio, creo que el sueño de muchas ellas es llegar a ese lugar. Hoy es más difícil porque el hockey se magnificado mucho, se juega por todos lados, cada vez se ponen más canchas de agua y ha crecido mucho en el interior. Lo bueno es que también creció la capacitación de entrenadores, que son los que le dan herramientas a los chicos para que puedan crecer.
Bianca Donati: "Mi objetivo es que Bahía crezca"
Bianca Donati realizó un pequeño balance de la segunda clínica impulsado por ella y sus hermanos Florencia y Luciano, luego de jornadas llenas de distintas actividades que incluso algunas iban más allá de lo estrictamente deportivo.
"Fueron tres días de mucho crecimiento, estamos felices por lo que sucedió. Sobre todo por los sentimientos de los chiquitos, por su energía, lo que transmiten y sus devoluciones. Estoy orgullosa de todos los que trabajaron en la clínica", reconoció Bianca.
"Creo que pudimos darle a cada uno de los que participaron de la clínica cosas para mejorar y seguir entrenando, me voy feliz de lo que logramos y ya proyectando lo que viene. Cada clínica hace que piense qué hay para mejorar, qué podemos hacer o agregar", agregó.
Además de su activa participación, la de Lucho y Flor, del evento también formaron parte Juan Manuel Vivaldi (arquero campeón olímpico), los citados Gabriel Minadeo y Candela Esandi, Gregorio Genes (kinesiólogo, neurociencia deportiva y actualmente parte del staff de Los Leoncitos), Josefina Calió (kinesióloga y jugadora de Universitario) y Aimé Apezzatto (nutricionista y jugadora de Pacífico).
Así como también Alejandro Spath (pareja de Bianca y jugador del UD Taburiente de España) y jugadoras destacadas del ámbito local como Sofía Macchia (Universitario) y Pilar García Martínez (El Nacional), entre otros.
"Estoy feliz de que entrenadores de la ciudad se hayan acercado a compartir con gente capacitada y que lo lleven a sus clubes. Mi objetivo es que Bahía crezca y sé que cada nena o nene que viene a la clínica van a llevar eso a sus clubes y eso hace crecer al hockey de la ciudad", remarcó Bian, quien actualmente juega en el UD Taburiente.
"Estamos felices y orgullosos de lo que estamos proyectando con mis hermanos en cuanto a las clínicas y lo que brindamos para Bahía. Solo tengo palabras de agradecimiento para todos los que participaron de estos días", cerró la exjugadora de Las Leonas, Atlético Monte Hermoso, River y Pacífico.