Taurasi, en exclusiva: "Va a ser un torneo difícil, queremos competir"

Redacción de La Nueva.

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Por Mauro Giovannini / mgiovannini@lanueva.com

   "Smile!"

   Esa sola palabra, que se transformó en sugerencia, terminó de iluminar una mañana que amaneció con neblina en Bahía Blanca.

   La asistente de los Estados Unidos quería que Diana Taurasi sonría, pese al cansancio de tener que viajar de Buenos Aires hacia nuestra ciudad en colectivo, por un paro del personal aeronáutico, y recién esta mañana, de 9.30 a 11.45, pudieran entrenar por primera vez en el Dow Center y repasar sistemas.

Toda la información del torneo y la palabra del entrenador nacional

   Ella no lo dudó, su cara se transformó y el mejor equipo del mundo comenzó a sentirse a gusto en la capital nacional del básquetbol, que desde esta tarde será sede del Preclasificatorio Olímpico rumbo a Tokio 2020.

   "Está hermoso Bahía Blanca, después de pasar ayer en Buenos Aires. Hacía mucho (suspira y eleva la mirada) que no venía a la Argentina la verdad...", comenzó Taurasi su contacto con La Nueva. "Fue en 2000 -agregó- si mal no recuerdo, siendo U18 (Premundial)".

   Las entradas pueden adquirirse en www.ticketbahia.com, a un valor de $200, incluyendo los dos partidos del día.

   Aunque la organización confirmó que también se venderá en la boletería del estadio un remanente, desde las 17 de cada jornada.

   Además de USA y Las Gigantes, la selección argentina, participarán Colombia y Brasil. Y si bien habrá dos cupos en juego para el Preolímpico (febrero de 2020), las norteamericanas, vigentes campeonas del mundo, ya tienen un lugar asegurado.

   "Estar acá, por mí, para estar con estas chicas, preparándolas para los Juegos Olímpicos... es un torneo difícil y acá estamos, queremos competir", sostuvo Diana en perfecto castellano, por sus conocidas raíces: su padre es italiano y su madre, rosarina. Conocela más, acá.

   "Para mí es como una pretemporada. Hace un año que no juego. Estoy mejorando todos los días físicamente aunque sé que me falta bastante para alcanzar el nivel que quiero", admitió, ya pensando en el cuadrangular.

   Desde las redes sociales de USA Basketball anuncian el juego de hoy como "The Return", en alusión al regreso de Diana.

   "Llegamos anoche y tuvimos apenas una práctica. Y vamos a tener que jugar luego con un equipo brasilero que hace mucho que están juntas, que jugaron el Panamericano, la Americup en Puerto Rico. Va a ser difícil e interesante afrontar los partidos", añadió la perimetral de Phoenix Mercury.

   Justamente, Brasil entrenó a continuación de Estados Unidos y por unos minutos ambos planteles se cruzaron. Allí, Diana tuvo la oportunidad de saludar a Erika De Souza, otra WNBA.

   —¿Con qué mentalidad encararán el torneo sabiéndose ya clasificadas?

   —Vamos a enfrentar a tres equipos que vienen con la mentalidad a full, porque van en búsqueda de la clasificación. Nosotras tenemos que tratar de hacer lo mismo, más allá de que estamos clasificadas a Tokio. Perdimos un partido con una Universidad, antes de viajar para aquí, y este torneo nos va a servir para mejorar y para volver a ganar.

   —Después de Brasil te va a tocar enfrentar a la Argentina, ¿será especial?

   —Va a ser hermoso jugar contra Argentina, en Argentina. Conozco a las chicas bastante y he hablado mucho con ellas. Es una oportunidad bien grande para ellas también de poder competir.

   —¿Te van a poder venir a ver familiares y amigos argentinos?

   —Mi familia está en Rosario y acá en Argentina moverse, económicamente y por los problemas de los aeropuertos, no es tan fácil. Vamos a ver si pueden venir para el partido del sábado en avión, en colectivo o en tren...

   —Vos, Sue (Bird) son bien conocidas mundialmente, pero el equipo tiene otras estrellas que la gente va a venir a ver. ¿Sobre quién habrá que posar los ojos?

   —Su nombre lo dice todo: se llama Diamante. Es Diamond De Shields (NdeR: compañera de Florencia Chagas en Familia Schio de Italia). Tiene mucho talento y es buena físicamente. Este año yo creo que alcanzó ese nivel de superstar, es una de las jóvenes para venir a mirar.

   Tan amable como al principio, Dee saludó y abandonó el Dow Center por unas horas.

   A la tarde, ya con la indumentaria de juego y la pelota en sus manos, no habrá necesidad de que nadie le recuerde que debe sonreír.