Allanamientos en una causa por falsificación
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Personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local y de la dirección de Casos Especiales de la policía bonaerense allanaron ayer las instalaciones de una gestoría y una escribanía de nuestra ciudad, en la búsqueda de pruebas acerca de la falsificación de documentos de un automotor, según se informó oficialmente.
Los procedimientos se concretaron en el inmueble de Pasaje Junín 1043, donde funcionaría una oficina de gestiones de trámites del automotor, perteneciente a Claudio Alberto Nasif, y la escribanía de Sócrates 1461, del notario y abogado Daniel Néstor Pie.
Los efectivos policiales fueron acompañados por integrantes de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 11, del fiscal Emilio José Marra --instructor de la causa-- y directivos de la delegación Bahía Blanca del Colegio de Escribanos.
"En 2012, personal de la seccional Quinta realizó un procedimiento en el que le secuestró a Claudio Nasif, que es gestor, una serie de libros de actas notariales que tienen que quedar sí o sí en la escribanía", dijo a "La Nueva Provincia" un vocero de Casos Especiales, de La Plata, mientras se desarrollaba la requisa en Pasaje Junín 1043, donde se debió forzar la puerta ya que no había nadie en el lugar.
Y agregó: "A partir de ese procedimiento, el doctor Marra dio intervención a la dirección de Casos Especiales para que se profundice la investigación", por lo que se empezó "a investigar no solamente en función de los libros de actas, sino de una serie de documentación que se le secuestró a Nasif, como una tarjeta verde, título y transferencia".
Firma de una fallecida
En ese marco, los pesquisas habrían detectado una relación entre el gestor y el escribano, y hallado documentación suscripta por una persona muerta a la fecha de esos papeles.
"De esa manera se constató en varios documentos que esta persona (por Nasif) tenía una connivencia con el escribano, y que éste había certificado en 2012 la firma de una señora que había fallecido en 2006", expresó el investigador.
La presunta maniobra ilícita se habría comprobado mediante una verificación, en el Registro del Automotor 4, de nuestra ciudad, del legajo de un automóvil vendido, patente WQF 242.
"Uno de los requerimientos cuando un gestor se presenta (en el registro para hacer una trasferencia), es hacer un formulario (08) donde se ponen todos los datos. En ese legajo del auto apareció Nasif como gestor, y la transferencia se terminó de hacer en 2012", precisó la fuente policial.
Tras ser elevadas las actuaciones a la fiscalía --dijo el vocero--, la Justicia ordenó la realización de los allanamientos desarrollados en la víspera, para tratar de secuestrar documentos "que vinculen otras transferencias con personas fallecidas".
"En la gestoría --dijo-- se hallaron documentación de transferencias y actas firmadas por el escribano Pie, además de autopartes de dudosa procedencia; un auto Mercedes Benz, patente CCK 540, y una motocicleta que todavía no tienen pedido de secuestro".
"Nasif es oriundo de Capital Federal --continuó--, pero tiene domicilio en Bahía Blanca, y tiene antecedentes".
Mientras tanto, agentes de la DDI que requisaron la escribanía de la calle Sócrates, habrían incautado documentación de utilidad para la pesquisa, pero, al igual que en el caso anterior, no se concretaron aprehensiones.
El escribano Pie, consultado por un cronista de "La Nueva Provincia", declinó formular declaraciones.
El caso particular
En un comunicado de la dirección de Casos Especiales se explicó en qué consistió el caso particular que diera origen a la investigación.
Indicó que el rodado de marras fue transferido el 30 de junio de 2006 a Neldo Euclides Bacha, casado con Susana Beatriz Acevedo, quienes fueron sus titulares registrales hasta el 3 de mayo de 2012, cuando se inscribió la transferencia a nombre de Mario Lisandro Olave.
Al ser analizadas las fojas registrales --según el parte de prensa--, surgió como dato de interés que el formulario tipo 59, fue presentado por Claudio Nasif y no por el interesado.
Agregó que en el "08", que es un contrato de transferencia e inscripción de dominio, se nombraba como comprador a Olave, constando como fecha de celebración del contrato el 10 de abril de 2012.
De acuerdo con el informe oficial, como vendedor del vehículo aparece Bacha y debajo de la firma de éste, figuran los datos personales de su mujer, Susana Acevedo, con la correspondiente rúbrica consintiendo la venta del bien ganancial.
Todas las firmas --se indicó en el comunicado-- fueron certificadas ante la escribanía de Daniel Pie, quien también lo hizo respecto de rúbricas e impresiones digitales, en la parte documental que señala que "en el libro de requerimiento 114, acta 162, folio 162, Pie --notario del Registro 69 del partido de Bahía Blanca--, certificó las firmas del formulario de transferencia dominial".
Reiteró el informe policial que el escribano acreditó que los documentos fueron firmados en su presencia, el 10 de abril de 2012, y de este modo se habilitó la inscripción de la transferencia dominial, fechada el 15 de mayo de 2012, emitiéndose los nuevos título y cédula a nombre de Olave, las cuales fueron retiradas por Nasif el 18 de mayo del año pasado.
Pero la irregularidad investigada quedó al descubierto cuando el personal de Casos Especiales comprobó que Susana Acevedo había fallecido el 6 de septiembre de 2006, siendo sepultada en la necrópolis de Bahía Blanca.
"Firma de una persona fallecida"
El fiscal Emilio José Marra confirmó que a raíz de actuaciones labradas en una causa que se instruye en la UFIJ Nº 11, se pidió a la jueza de Garantías Nº 1, doctora Gilda Carmen Stemphelet, la extensión de órdenes de allanamiento de la gestoría y la escribanía.
"Todavía no sé si los allanamientos tuvieron resultados positivos o no. Hay documentos con la firma de una persona fallecida; por ese carril se lleva a cabo la investigación", expresó el funcionario.
"La investigación surgió a raíz de un procedimiento hecho ya hace unos meses --aclaró--, cuando llamativamente en la gestoría Claudio Nasif tenía documentación de automotores que tendría que estar en la escribanía y no en poder de él".
Manifestó que "por el momento no quiero brindar más datos, porque todavía ni siquiera hemos sometido a proceso a nadie, ni hay órdenes de detención. Por ahora estamos en plena etapa investigativa y tenemos que analizar la documentación".
El doctor Marra desestimó, por otra parte, una versión periodística según la cual habría personal policial involucrado en la maniobra.
"Hasta el momento no hay ningún efectivo policial implicado en la causa", concluyó el fiscal.