Un trágico accidente
Hace 50 años, en julio de 1971, se conoció en nuestra ciudad el fallecimiento de dos destacados ciudadanos, como consecuencia de un accidente de aviación ocurrido horas antes en Buenos Aires.
Veintitrés víctimas causó la caída de una nave de la compañía Transcontinental, que se desplomó a poco de despegar y terminó chocando contra un árbol. Dos de las víctimas eran nativas de Bahía Blanca. Por un lado, la joven María Magdalena Bermúdez Olaciregui, de apenas 17 años de edad e integrante de una tradicional familia local. "Nacida para ocupar en la sociedad bahiense el lugar de privilegio que su ascendencia tradicional le imponía, supo, pese a su juventud, destacar por sus propias dotes de simpática gentileza en nuestro ambiente juvenil, con valimiento de una cautivante espiritualidad que iba formando en el cultivo constante de su inteligencia", señaló este diario, al dar a conocer la penosa noticia.
María era nieta de Mario Olaciregui e hija del doctor Jorge Bermúdez Emparanza y su mujer, María Magdalena Olaciregui.
La otra víctima fue Jorge Campbell, comandante del avión, nacido y criado en nuestra ciudad. Hijo del ingeniero Jorge Campbell y de Delia Pagano, era un destacado piloto, que, incluso, había protagonizado, un año y medio antes, el rescate exitoso de una expedición perdida en la Antártida.