LA PEOR SEQUIA DESDE 1962

Redacción de La Nueva.

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 Con un acumulativo que apenas ha superado los 240 milímetros en los primeros ocho meses del año, la lluvia --gran ausente en el escenario rural de una amplia zona agroganadera del país-- está dejando en Bahía Blanca, como en sus alrededores, la impronta de un impacto altamente negativo.

 Conforme los datos estadísticos de "La Nueva Provincia", en base a los informes del Servicio Meteorológico Nacional, nuestra ciudad no soportaba un milimetraje tan escaso desde la recordada sequía de 1962. Ese año, el total fue de 150,6 milímetros para el período enero-agosto.

 Las sementeras de trigo, que presentaban un aspecto auspicioso hasta hace pocas semanas, debido a precipitaciones oportunas --aunque por lo general no abundantes-- en el otoño y comienzo del invierno, comienzan a sentir los efectos de la sequía. Ello trae aparejada una inquietud que se profundiza entre los agricultores, quienes aseguran que de no registrarse lluvias de cierta abundancia de aquí a fin de mes, la suerte de la cosecha 2008/9 correrá serios riesgos.

 Tan desalentador como en el caso del trigo es el panorama en la ganadería, porque la falta de pasturas impide la adecuada alimentación de la hacienda bovina. Muchos productores están virtualmente liquidando sus planteles ante la imposibilidad de asegurarles la necesaria provisión de alimento.

 "Es un espanto", definió ayer el consignatario Edgardo Vittori, al referirse al panorama de la ganadería regional, menos de 24 horas después del remate mensual que su firma realizó en Villa Bordeu; en este caso, con una oferta de 6.500 bovinos.

 Vittori dijo que el deterioro en el estado de la hacienda es evidente en todas las categorías, sobre todo en las vacas. De hecho, hay mortandad en muchos campos de la región.

 Esta situación obligó a extremar los recaudos para alimentar a los animales que llegaron a las instalaciones de la Sociedad Rural con destino a aquel remate. Como no podía ser de otra manera, los compradores fueron todos de lugares alejados.

 Toda la oferta se vendió en el remate de Vittori, aunque las operaciones concluyeron casi a las 20.

 En novillitos, vaquillonas y terneros, un alto porcentaje de compradores estuvo constituido por dueños de feedlot, donde se completará el engorde de los animales. Las vacas fueron adquiridas por ganaderos de Azul y Saladillo, entre otros lugares.

 "Los remitentes están desesperados", admitió Vittori, para luego mencionar que compradores de Córdoba y Santa Fe, habituales concurrentes a los remates de su firma, esta vez no vinieron porque en aquellas provincias el panorama es similar debido a la falta de lluvia.

 Cabe hacer notar, asimismo, que será sumamente difícil la reposición de hacienda por parte de los criadores de nuestra zona.

 A todo esto, agricultores de varios distritos del sudoeste bonaerense comentaron ayer que a la falta de precipitaciones se agregó la helada de la madrugada, que alcanzó registros del orden de los 10 grados bajo cero.

 "Ahora esperamos que, por lo menos, se nos compense con buenas lluvias en lo que queda de septiembre y en octubre y que, por supuesto, no se repitan las fuertes heladas de noviembre del año pasado", indicó un productor del distrito de Coronel Pringles.

 En Bahía Blanca, el último registro pluviométrico superior a los diez milímetros se anotó hace seis meses: el 2 de marzo, con 21 milímetros.

 Febrero fue el mes más generoso este año, con 92,1 milímetros.

 La helada de ayer en Bahía Blanca fue de 5,8 bajo cero a las 7,15, con una sensación térmica que superó los 12 grados bajo cero. Para septiembre, el récord es de 7,3 grados negativos, en 1988.

 El subsecretario de Asuntos Agrarios de La Pampa, Enrique Schmidt, anunció que los cinco millones de pesos que aportará la Nación a la provincia para paliar la crisis por la sequía serán destinados a la compra de alimentos para ganado o semillas.

 "Los productores han planteado que si llueve van a necesitar comprar algún tipo de semillas para realizar la próxima siembra de verdeo de verano", explicó Schmidt.

 Asimismo, señaló que los únicos departamentos que hasta el momento no se encuentran en emergencia o desastre agropecuario son el de Maracó y Chapaleufú.

 "A fin de contener el problema, estamos trabajando con los productores en las sales nitrogenadas, reforzando el ganado con alimento y también realizando experiencias de destete precoz", dijo.