"Soy hincha de Pacífico desde que tengo uso de razón"

Redacción de La Nueva.

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 En asamblea general, ayer en Pacífico eligieron a Federico Susbielles como presidente de la institución a la cual, el esposo de la misionera Daniela Kornel y padre de Luisina (7 años), lo llevó su abuelo materno.

 --¿Cómo surgió la idea?

 --Sentimentalmente estoy ligado al club desde muy chico. Aunque no tuve una participación por cercanía a El Nacional, donde hice toda la carrera basquetbolística. Pero desde que tengo uso de razón iba a la cancha de fútbol con mi abuelo. Siempre tuve un apego muy grande a Pacífico y, por suerte, pude jugar dos temporadas en la Liga Nacional, que son de los recuerdos más lindos que guardo. Desde que volví a Bahía estuve buscando tiempo libre para dedicarme al club, porque creo que hace falta que la gente se arrime a trabajar. No podemos desconocer que tiene 108 años de historia y la idea es recuperarlo y ponerlo nuevamente de pie.

 --¿A qué le van a apuntar?

 --Primero, no tenemos que dejar de reconocer la función social que tienen las instituciones deportivas. En ese sentido la idea es acentuar el rol que cumple el club en cuanto a contener un montón de chicos y familias. Y en el aspecto deportivo, le vamos a apuntar, de manera especial, a la estructura formativa. No nos sirve de nada buscar un ascenso en básquetbol o fútbol si no creamos una estructura organizativa en divisiones menores, para que la base de la pirámide este realmente fuerte.

 --¿La idea de esta iniciativa puede significar el paso previo a otra postulación electoral?

 --Uno es la misma persona. De todos modos, nuestro objetivo es que el club se ponga de pie, tener una buena gestión en lo deportivo, además de dejarlo saneado y en crecimiento de acá a cinco o seis años. El capital que vamos a cuidar es la institución, la cual tenemos que reposicionar dentro del mercado deportivo de Bahía Blanca.

 --¿Hay que tener espíritu de líder para estar al frente de estos proyectos?

 --Creo que sí. Hay que tener vocación de servicio, porque uno dona su tiempo para que un montón de gente se vea beneficiada con el servicio que, en este caso, puede dar un club. Es algo que hago con gusto y realmente lo disfruto. En Pacífico me encontré con un montón de gente que realmente quiere trabajar por el club y es lo que me motiva.

 --¿Las características que tenías como jugador coinciden con el espíritu de la gente de este club?

 --Creo que el perfil del club y el mío están bastante ligados: personas de perfil bajo, humildes y laburantes. Nuestra historia como club está cargada de personas anónimas que dieron, cada una en su momento, amor y tiempo al club. La idea es recuperar esa gente y ponerla a trabajar. Considero que el club volverá a ocupar el sitio que tiene que tener. En Bahía es un grande. Estamos muy esperanzados en poder encauzarlo y crear una estructura y organización para crecer a largo plazo.

 El proyecto de Pacífico todavía está verde. El tiempo lo podrá hacer madurar.

¿Y El Nacional?

 --¿Por qué no intentaste algún desafío de este tipo en El Nacional?

 --Quizás El Nacional tiene resuelta su vida dirigencial o deportiva. Por otro lado, mi corazón está en este club, soy hincha de Pacífico desde que tengo uso de razón, por lo tanto, siempre seguí de cerca, fundamentalmente, las campañas de fútbol, que es la actividad a la que estaba ligado.

"No" a Rodolfo Lopes

 --¿Te hubiera gustado trabajar con el intendente?

 --Nunca lo evalué. La gente que nos votó en Bahía Blanca lo hizo para que seamos una acción distinta. Fuimos minoría, pero esos casi 9.000 bahienses están esperando que seamos una elección a futuro en Bahía o, al menos, que mantengamos una independencia de criterio.

Grabado a fuego

 --¿Qué tenés más grabado de Pacífico, los recuerdos de la infancia con tu abuelo o la participación en la Liga?

 --La etapa de chico fue fuerte y la recuerdo mucho. El hecho de haber ido a la cancha con mi abuelo hace que tenga grabado a fuego hasta las instalaciones mismas. Y haber podido jugar me hizo sentir en carne propia lo que significa representar al club, además de comprobar la cantidad de gente que Pacífico mueve cuando está compitiendo con posibilidades.

Fernando Rodríguez