Realizan allanamientos vinculados con una banda autora de entraderas

Redacción de La Nueva.

contenidos@lanueva.com

   La policía realiza allanamientos en Bahía Blanca en el marco de una investigación que en septiembre permitió desbaratar parte de una banda, presuntamente autora de entraderas y robos en Bahía Blanca, Neuquén y Río Negro.

   Según informó una fuente policial, el mes pasado los delincuentes planearon robar “3.000.000 de dólares” en El Bolsón y Lago Puelo, pero desistieron al parecer por la numerosa presencia de gendarmes en aquella zona durante la búsqueda de Santiago Maldonado.

   En Bahía se llevan a cabo 4 allanamientos en 3 casas y un terreno (en calle Granada del 1.300 al 1.600) donde los uniformados tienen orden de secuestrar armas y dinero.

Fiscal Diego Conti

   Los operativos fueron ordenados por la jueza de Garantías Nº 4 bahiense, Marisa Promé, a pedido del fiscal Diego Conti, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 11 que investiga robos cometidos con armas.

   De los allanamientos participan efectivos de la división Casos Especiales de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI), agentes de Gendarmería especializados en el uso del único georradar que hay en Argentina, bomberos del cuartel Central y peritos de Policía Científica.

   Las diligencias están a cargo de los comisarios inspectores Martín Lema y Liliana Pineda, jefes de Casos Especiales y la DDI respectivamente. También están presentes el secretario de fiscalía general, doctor Santiago Garrido, e instructores judiciales.

   A fines del mes pasado la policía detuvo en esta ciudad a Julio Carrillo, quien hace poco egresó de la cárcel de Villa Floresta beneficiado con libertad condicional; su hijo Roque Damián, que está detenido en la Unidad Penal Nº 19 de Saavedra, y Marcelo Donadío.

   Luego de que los imputados se negaran a declarar, el fiscal Conti solicitó a la magistrada Promé prisión preventiva para los tres detenidos.

Bajo tierra

   Las autoridades creen que la banda entierra sus botines y también las armas, por lo que uno de los allanamientos es en un terreno baldío.

   Para buscar dinero y armas bajo tierra, los equipos de investigación utilizan el georradar de Gendarmería.

   Este equipo es el mismo que se utilizó durante el arresto de Juan Pablo "Pata" Medina, para buscar dinero enterrado.