Sofía Maccari: "Monte es parte del subcampeonato mundial de Las Leoncitas"

Mikel Iñurrategui

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(Nota ampliada de la publicada en la edición impresa...)

Monte Hermoso fue el punto de encuentro para la Concentración Regional Selectiva de la Región Bonaerense, dirigida a jugadoras Sub 21 en busca de nuevos talentos para nutrir al Seleccionado Argentino Juvenil.

La misma estuvo a cargo de la ex-Leona Sofía Maccari y se desarrolló en la cancha de agua del Complejo Municipal en dos días de actividades.

La doble medalista olímpica (Londres 2012 y Tokio 2022) es la asistente del entrenador Juan Martín López, con quien vienen de ser subcampeones mundiales con Las Leoncitas en Chile 2023, y quienes llevan adelante este proyecto de recorrer el país para conocer jugadoras y la actualidad del hockey nacional en distintas coordenadas.

"Unificamos a las jugadoras por región, cosa de poder ver más. Hay que afinar el ojo porque son muchas jugadoras y tenés tres estímulos. De ahí tenés que llevar una devolución para después plasmar lo que vimos y, también, transmitirle a los entrenadores qué cosas creemos que tiene que trabajar cada región", explicó Sofi brevemente, en diálogo con La Nueva. mientras se retiraba del balneario.

"Fue una idea del Gato (Juan Martín López) -continuó-, la de nosotros empezar a viajar y no que las jugadoras tengan que ir a Buenos Aires mandadas por su propia Asociación. Me parece que está bueno, para que ellas no tengan que moverse tanto, estén más cómodas y menos nerviosas que si tienen que ir a Buenos Aires. Es algo que resultó muy bien para la preparación del Mundial y que queremos seguir haciendo para que el hockey crezca en todo el país", agregó la exjugadora de San Fernando y actual entrenadora de la primera de Sociedad Alemana de Gimnasia.

-¿Qué pudiste ver en estos días en Monte, qué te llevas?

-Me voy muy contenta. El año pasado vinimos bastante para la preparación del Mundial (NdR: jugaron dos amistosos ante Las Leonas), es un lugar al que le estamos muy agradecidos porque siempre nos recibieron y nos hicieron un lugar para una preparación tan importante. Monte es parte de ese subcampeonato mundial que tuvimos. Nos encanta venir, tienen una cancha de primer nivel, es espectacular para entrenar, tenemos todas las comodidades. Y el nivel de las jugadoras que vimos acá es muy alto, va creciendo año a año. No es que venís y ves una o dos jugadoras, hay un abanico importante, con distintas características, virtudes y falencias, pero la verdad que el ritmo de entrenamiento y el nivel fue muy bueno. Lo importante es que la región está creciendo un montón y que ya hace años tiene jugadoras de Selección. Eso es muy importante, para que estimule a las más chicas a seguir creciendo.

-¿Considerás que se achicó esa brecha entre el interior y el Torneo Metropolitano?

-Sí, creo que se achicó. Para el Mundial tenemos mitad de equipo del interior y eso no pasó nunca. Cuando arrancamos el proceso sabíamos que había jugadoras por todo el país y las íbamos a ir buscar. Eso fue una idea del Gato y nos dio un plus. Antes era algo impensado y hoy son jugadoras importantísimas para nosotros. Me parece que hay que seguir por ese camino.

-El subcampeonato en Chile me imagino que es un lindo envión...

-Creemos mucho en el trabajo que hay que hacer para tener equipos competitivos. No queremos solo ir a participar, Argentina tiene que estar siempre en los primeros planos. Queremos achicar la brecha con Países Bajos, que realmente son las número uno. Antes del Mundial fuimos el único equipo sin competencia previa, eso era una incógnita y fue una sorpresa muy grata. Nosotros sabíamos que íbamos a trabajar sin excusas, agachamos la cabeza y trabajamos. Creamos un gran grupo humano, que también creemos que es importante, y que fluyó muy bien.

En aquella competencia disputada en Santiago, Las Leoncitas cayeron por penales en la final ante la máxima potencia mundial: Países Bajos.

Aquel equipo nacional contaba con la arquera bahiense Yazmín Pallottini y la montehermoseña María Emilia Larsen, quien viajó como reserva.

"Estuvimos a dos minutos de ser campeonas del mundo. Salimos a jugarle de igual a igual a un equipo que todos les tienen pánico. Nos faltaron detalles que son los detalles internacionales, que se van aprendiendo con el crecimiento. Para nosotros fue super positivo. Nuestro trabajo es, en definitiva, darle a Las Leoncitas las máximas herramientas posibles para que lleguen a Las Leonas y no sientan tanto el cambio", reconoció Maccari.

-Imagino que más allá de lo deportivo, también intentan transmitir lo que significa representar al país...

-Lo que le queremos inculcar a Las Leoncitas es el respeto hacia la camiseta y el respeto hacia los lugares a donde vamos. En cada gira que hicimos, la gente nos recalcaba la educación de las chicas. Eso fue lo más importante del proceso, más allá de que después querés ganar porque esta Selección te lo requiere.

"Las nuestras" en la mirada de Sofi

Sofía vivió muy de cerca el proceso Junior de dos jugadoras de la Asociación Bahiense de Hockey como Pallottini y Larsen y también el crecimiento de Valentina Costa Biondi, ya que compartieron sus días en San Fernando y, luego, fueron subcampeonas olímpicas con Las Leonas, en Tokio.

"Meri y Yaz, las dos fueron muy protagonistas y para nosotras resultaron jugadoras muy importantes en el Mundial. Yaz peleó hasta el último momento el lugar con Mechi (Mercedes Artola) pero también tuvo un papel importante en esa dupla de arqueras, que se apoyaban mucho...".

-De hecho hay una imagen de ellas antes de una definición por shoot-out que se volvió viral...

-Exactamente… algo de "te toca a vos, voy a estar con vos a muerte...".

-¿Y el rol de Mari, quien fue parte del equipo pero no le tocó sumar minutos en su segundo Mundial juvenil?

-A Meri le tengo un cariño muy especial, no puedo ser objetiva con ella. Es una de las jugadoras con la que más cariño tuve durante todo el proceso, desde el primer día. Es una persona tan tan tan especial, tan buena, tan bien predispuesta. Para ella fue un proceso muy duro, porque al principio no viajó con nosotros y sin embargo ella bajó la cabeza, entrenó y se propuso poder estar. Eso es algo que valoramos muchísimo de ella, porque otras jugadoras dicen 'bueno no me llevan, listo...'. Ella, sin embargo, supo que tenía que mejorar, sabía qué quería el entrenador de ella, y lo pudo mejorar. Se fue a Buenos Aires para tener una competencia más cerca, hizo toda una movida que requieren costos económicos y emocionales. Meri para nosotros fue importantísima y es tan subcampeona como Raposo (capitana y líder del equipo).

Durante estos días en Monte, Sofía y Mari se volvieron a encontrar.

"En Monte las junté a las chicas y les dije esto mismo, que la valoren y la tomen de ejemplo. Porque muchas veces hay buenas jugadoras que no son tan buenas personas y a veces al revés. Ella -destacó- tiene un combo: es buena jugadora y buena persona, la verdad que la vamos a extrañar mucho en este proceso. Es una jugadora que el cuerpo técnico la quiere muchísimo".

-¿Esas son las otras medallas que ganan ustedes como formadores?

-Sí. Después uno quiere llevarse la medalla colgada en el pecho, pero yo siempre lo digo, la persona está antes de cualquier resultado y que el deporte termina y vos te vas a quedar con lo que fuiste de persona. Eso es lo que queda, no las medallas que ganaste.

Mientras el plantel argentino celebraba el pase a la final olímpica en Tokio -asegurando medalla una vez más-, en pleno festejo Sofía llenó de elogios a Valentina Costa Biondi.

"Valu es la jugadora más fuerte de cabeza que conocí en mi vida. Siempre de abajo, mirá a dónde llegó...", decía por aquel entonces en un vivo.

-Siempre fuiste muy generosa para con Costa Biondi, otra de las nuestras...

-Es que nadie entiende lo que pasan las jugadoras del interior y yo creo que tienen ese plus de tener que irse de su casa. Las jugadoras de Buenos Aires terminan de entrenar y se van a la casa, donde las esperan sus familiares, tienen la ropa, la comida; pasan sus cumpleaños con sus familias y amigas, etc. Las del interior, no. Cuando están en Buenos Aires se pierden un montón de cosas y, muchas veces, están durmiendo solas en una habitación del CeNARD. Hay cosas que hay que tener en cuenta.

"A Valen la conozco porque lo viví de cerca en San Fernando. Cuando llegó jugaba en la Intermedia, no jugaba en Primera. Sin embargo, iba con un bolsito, me pedía bochas a mí y entrenaba córner corto sola. También empezó a ir al gimnasio sola y a trabajar en el club para hacer algo de plata. Esas son cosas que la gente no ve. Y nadie hablaba de Costa Biondi, nadie creía que iba a ser Leona y sin embargo hizo un trabajo de hormiga, callada, empezó a entrenar, a entrenar y a entrenar. Sin que nadie la vea, yo lo sé porque estaba en el club. Todo eso le terminó dando rédito: hoy está en el Seleccionado hace años y ya es una jugadora mucho más consolidada, campeona con San Fernando siendo importantísima y es muy querida en el club".

Actualmente, Valen se encuentra en plena recuperación de una lesión ligamentaria en su rodilla derecha, a menos de 150 días para una nueva cita olímpica.

"No tengo dudas de que va a salir adelante porque ya lo hizo en otro momento. Son un montón de cosas de Valu que te enseñan mucho y que yo valoro también. Tiene todo mi apoyo, lo sabe y se lo dije. El club la ama, ahí tiene todo y nos tiene a todos para intentar llegar a París. Sé que va a ser lo posible hasta último momento", subrayó Maccari.

Las medallas: la robada y la que le quita el sueño

Al regreso de los Juegos Olímpicos de Tokio, a Sofía le robaron de su auto la medalla de plata conseguida días atrás con Las Leonas.

Esta situación indignante la puso en el centro de la escena y la opinión durante unos días.

Casi un año después, la organización le envió una réplica.

-¿Qué te dejó todo eso que te tocó atravesar?

-La gente me criticó mucho por tener la medalla en el auto. Pero cuando una gana una medalla olímpica, no la gana sola. Atrás hay muchísima gente que te acompaña en un proceso olímpico, porque es muy duro, pasás por tantos estados anímicos que no te podés ni imaginar. Entonces, no la ganás sola: la gana el club, tu familia, los médicos que te ayudaron. En este caso yo se la estaba llevando a una acumpurista que me ayudó muchísimo, porque yo volví a Las Leonas con 37 años y no sabía si me iba a dar el cuerpo para estar en un Juego Olímpico. Y toda esa gente me permitió lograrlo. Entonces, lo mínimo que puedo hacer es compartir esa medalla con esa gente. Por eso, lo volvería a hacer, volvería a subir esa medalla al auto para llevársela a ella, para compartirla en el club y que las chicas vean y sueñen con tener una medalla olímpica, al club porque es el que te permite jugar un Juego Olímpico, a mi familia que son los que no te ven nunca y te impulsan a seguir. Lo volvería a hacer y si me vuelven a robar, mala suerte. No hay que olvidarse de toda la gente que están en tu camino, que te acompaña, incluso sin saber si vas a ganar o si quiera si vas a estar convocada. Eso fue un poco la enseñanza que me dejó eso. Además de todo el apoyo que tuve de deportistas y la Confederación, que enseguida se pusieron a disposición y, sin duda, de la gente de Japón que se puso en contacto y me envió la réplica.

-Pensando en el futuro, ¿esa medalla de oro en un Juego Olímpico es lo que te motivaba como jugadora y ahora también como entrenadora?

-Sueño con poder conseguir la medalla de oro, ojalá nos toque con el Gato, es el sueño que tenemos como cuerpo técnico. O que le toque a él con el cuerpo técnico que elija, pero sé que trabaja y que lo vive como nadie y que tiene todas las condiciones para poder lograrlo. Con el Junior estamos muy felices y no pensamos más allá, pero mi sueño siempre fue ser entrenadora o estar en un cuerpo técnico que sea campeón olímpico, nunca lo oculté. Pero eso no quiere decir que quiera estar mañana con Las Leonas, ojalá que la medalla de oro llegue antes y que después sea la segunda. Yo siempre me voy poniendo sueños y metas, me encanta soñar a largo plazo y ganar un Juego Olímpico es uno de esos.