Las "Valientes" de Pueyrredón juegan su propio partido, día a día, en busca de un resultado: el concientizar
La iniciativa surgió con la idea de incluir pacientes en recuperación oncológica. Hoy el grupo hace baile y como equipo participa en el Maxi Femenino.
Ingresó en La Nueva Provincia en 1995. Trabaja en la sección Deportes y fue colaborador en Regionales y Locales de este mismo medio. Se especializa en básquetbol. Formó parte del staff de la revista Encestando y Zona de Básquet durante 10 años. Tuvo experiencia en el programa Radial Contrabásquet, en Radio La Red.
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Terminó la práctica y Laura cargó energías, esas que le transmiten sus valientes y que le permiten por un rato abstraerse de lo que tiene asumido, aunque en pocos momentos olvidado: la recuperación del cáncer de mama.
El sol, a media tarde, acaricia en la hermosa tarde primaveral sobre la canchita exterior de Pueyrredón, uno de los espacios destinados a las clases de baile y entrenamientos de este particular equipo de básquetbol Femenino que lleva el nombre Valientes.
Afrontando la realidad y buscando alternativas para sobrellevar de la mejor manera lo que significó un diagnóstico inesperado, Laura se propuso conformar un equipo exclusivamente con pacientes oncológicas y que terminó en un número mayor al esperado, incluyendo a todas las que se sumaran en este desafío, más allá de tener o no la enfermedad.
“La idea original era hacer actividad física, y empezamos con media hora de baile. Después le sumamos media hora de básquet. Y finalmente quedó una hora de baile, dos veces por semana, y tres veces básquet”, cuenta Laura Giacomodonato, profesora de educación física.
Su objetivo con esta iniciativa, próxima a cumplir tres años, pasaba por buscar una manera de concientizar y visualizar la importancia de los controles preventivos.
“Se fueron sumando amigas. Lo que buscábamos era tener nuestro espacio, concientizar. Tenemos un lema que dice ‘si sos valiente hacete los controles’. Pretendemos generar conciencia y que las mujeres se hagan los controles, enfrentarse a ese momento es una manera de ser valiente, porque una noticia no deseada significa un golpe, pero hacerse los controles tempranamente te puede salvar la vida”, enfatiza Laura.
La propuesta fue captando mujeres que sin imaginarlo encontraron su espacio, como Guillermina Ghisoli.
“Yo vine como mamá del club desde el primer día. Veía el básquet hace años siempre desde afuera (es la esposa de David Pineda) y estaba en el club porque mi hijo mayor jugaba acá en Pueyrredón. Pero nunca había picado una pelota, ni tirado al aro. Empezamos a venir, a distraernos y a jugar entre nosotras. El grupo fue creciendo y se fue combinando todo: la buena onda, todas mujeres mayores de 30 años, con chicos, y que ellos pudieran venir”, resaltó.
Guillermina admite que el ejemplo que pregona a diario Laura, entre otras, sumó al momento de decidirse.
“Si ella puede, como otras chicas que han pasado por un proceso de una enfermedad, uno se pregunta ¿por qué no puedo a los 40 años empezar a practicar un deporte? Así que jugamos, aprendemos, la pasamos bien...”, destaca.
“El deporte es la excusa para liberar la cabeza, porque Lau a veces nos dice ‘no puedo estar a la par de ustedes’, pero nos distraemos, nos juntamos, comemos... Todas hemos tenido problemas, en mayor o menor medida, pero venir te genera el compromiso de salir”, agrega Guillermina.
En definitiva, este ida y vuelta recarga de positivismo a todas las Valientes.
“Todo suma, lo que es actividad física, la contención, el grupo, el compañerismo, el compromiso de venir a entrenar, el decir ‘yo puedo, por mí, por mis hijos, por mi familia’ y para demostrar a mis valientes que sí se puede. A nosotros esto nos sirve muchísimo. Yo estoy más que orgullosa de mí, del profe y de mis compañeras y amigas”, afirma Laura.
A medida que el grupo se fue ampliando y cuando ya no alcanzaba con la ayuda en la enseñanza de lo básico por parte de alguno con buena voluntad que estuviera ocasionalmente en la cancha, las chicas salieron a la búsqueda de un entrenador, y así sumaron a David Pineda.
“En principio dudé, porque no es fácil ser entrenador de 20 mujeres, y llegamos a ser 30”, confiesa David, uno de los referentes como jugador en los últimos 20 años del básquetbol local.
“Cada una tiene su vida hecha y su carácter. Después fueron decayendo por la misma enfermedad, algunas pudieron seguir únicamente con baile. Aunque esto fue demandando más días y más horas, todo por mérito de ellas. Yo sólo trato de ordenar las piezas y ellas juegan”, aclara.
El desafío de competir abrió otra ventana, acaso, impensada cuando comenzó este desafío.
“Al principio no todas sabían dónde nos metíamos, pero cada una le fue tomando el gustito a los torneos, a eso de jugar con árbitros, con un tablero, donde había un ganador y un perdedor... Yo soy ex jugadora y había dejado por una lesión. Soy mamá del club y mi marido es entrenador del club. Cuando Lau me convocó, evalué todo, inclusive el que los chicos pudieran estar acá, en el club, también contenidos”, contó Paula Speerli.
Actualmente están cumpliendo la segunda temporada en el Maxi Femenino de la Asociación Bahiense.
“En la primera experiencia jugamos por la copa Plata y este año nos propusimos seguir aprendiendo, divirtiéndonos y, también, queriendo ganar. Y logramos quedar en la copa Oro”, cuenta, Paula, con orgullo.
“Yo estoy luchando contra todo esto –acota Laura-, pero quiero que mis chicas ganen. Estás acá y te olvidás de todo. Llego de trabajar, cansada, vengo arrastrándome y acá trato de darlo todo”.
Por encima de lo estrictamente deportivo, las Valientes aprovechan cada partido para concientizar respecto de los controles.
“Siempre que jugamos amistosos entregamos lazos rosas, folletos y hablamos. Al principio les explicábamos a las rivales de qué se trataba”, contó Laura.
Octubre se denomina el mes de la lucha contra el cáncer de mama, la principal causa de muerte en la mujer, aunque, según estudios, más del 85 % de los tumores se detecta con la realización de una mamografía anual y el 95 % de los casos que se detectan a tiempo pueden curarse.
Anualmente se diagnostican alrededor de 19.000 casos en la Argentina, según informes de la Sociedad Argentina de Mastología, entidad que calcula que una de cada ocho mujeres que hayan alcanzado los 80 años habrá desarrollado la enfermedad en algún momento de su vida.
“Yo a veces vengo con mis dolencias y no digo nada. Las quimio me curaron por un lado y también me dejaron secuelas... Me hicieron una mastectomía, con vaciamiento de pecho y axila, entonces, con el brazo izquierdo no puedo lanzar, por eso hago lo que puedo. Pero mi objetivo es demostrarles a ellas que sí se puede, entonces, tengo que venir, aunque algunos días me cueste más que otros”, confiesa Laura, con mucha entereza.
Su testimonio es un verdadero ejemplo. Laura fue fundadora de este equipo que día a día se pone la camiseta, ante todo, con el objetivo de concientizar, y que de esta manera cada mujer gane su propio partido, por eso: “Si sos valiente hacete los controles”.
Los nombres
El grupo que actualmente integra las Valientes lo conforman Laura Giacomodonato, Viviana Trovato, María Belén Larsen, Lucía Di Nardo, Paula Speerli, Carla Ramírez, Julieta Díaz, María de los Ángeles Spinaci, Guillermina Ghisoli, Lorena Savoli, Leticia Getino, Vanina Martha, Rosana Vidal, Carolina Mancilla, María de los Ángeles San Juan, Mariela Ferster, Melisa Mancilla y Juliana Holgado.
El equipo que participa en el Maxi Femenino lleva el nombre Pueyrredón.
“Lo elegí porque Pueyrredón fue quien me abrió las puertas para poder desarrollar una actividad", destacó Laura.