Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

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Desaparecer progresivamente

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   Manejar técnicas de edición de sonido es una verdadera obra de arte. Basta con escuchar la banda de sonido de una película para entender a qué me refiero. Un programa básico de edición tiene un efecto que se llama “fade out”, traducido es desvanecer o desaparecer progresivamente

   Seguramente te estarás preguntado qué tiene que ver este efecto del programa de edición de sonido con la Psicología, ¿la verdad? ¡Mucho! ¡Muchísimo!

   Este efecto también se advierte cuando escuchás una melodía, canción y se va atenuando de a poco. Si lo sé, ya lo estás asociando con algo o alguien.

   No es lo que se conoce como como ghosthing. El ghosting puede considerarse un método para poner final a una relación de pareja, de coqueteo inicial y aunque suene terrible también de amistad. Se trata cuando de forma súbita esa persona con la que venías interactuando de-sa-pa-re-ce, es como si se la hubiera tragado la tierra o en este caso la pantalla, por eso ghosting porque desparece como un fantasma.

   Fade out o desaparecer progresivamente es diferente. Se requiere de ciertos mecanismos de actuación porque la desaparición es paulatina. Reuniones, compromisos, “no tengo datos”, cualquier excusa vale para ir despareciendo.

   Y si vos preguntás qué sucede porque notas cambios de actitudes te tildan de tóxico, ansioso, sin embargo, el tiempo dirá quién era el tóxico o intoxicado.

   Silencios eternos, mensajes sin responder o demora en las respuestas son las conductas más comunes. En un mundo de relaciones digitales esto se acentúa porque ves que la persona está línea, que hace publicaciones, pero a vos te castiga con el silencio, y digo castiga porque a estas alturas estas actitudes nunca son inconscientes.

   Ignorar, frezar, en el mundo virtual o real es lo mismo, es una forma de violencia, que además de poner en evidencia ese rasgo de personalidad demuestra inmadurez, escasos recursos psíquicos e incapacidad para poner en palabras situaciones y emociones que ameritan ser expresadas.

   Una cosa es tomarse un tiempo y que lo expresen, y aunque seguramente ese tiempo sea la antesala de un final, por lo menos la otra persona es considerada, respetada. Cuando alguien desaparece gradualmente es una forma cobarde comunicar que hay algo que le disgusta, le molesta, que hay otra relación, o que esa persona ya no le resulta y está próxima a ser descartada.

   Quienes se comunican con este estilo generalmente son egocéntricos, narcisistas y en ocasiones hasta despliegan conductas histéricas, esas dignas de ser actuadas en un escenario y con un público que aplauda. Suelen ser cobardes, generalmente evitan sentir para no sufrir, las emociones son una complicación y temen perder el control.

   El que desaparece de golpe, el fantasma, toma por sorpresa, el que lo hace progresivamente en cambio te permite ver, anticipar y hasta protegerte, también te va lastimando progresivamente.

   Es una situación dolorosa, máxime cuando actuás de buena fe o, como se dice en términos futbolísticos, sos de las personas que dejan todo en la cancha. Habrá que tomarse un tiempo para sanar esas heridas inmerecidas y preparase para escuchar el ruido que hace esa persona cuando la vida lo acomoda.