Búsqueda de García Gurrea: esperan por las pericias a teléfonos y vehículos
Sin novedades del paradero del hombre, a 34 días de su desaparición, la investigación aguarda por resultados del contenido de dos celulares y rastros en dos autos revisados.
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A 34 días de su partida, y sin novedades del paradero de Gabriel Enrique García Gurrea, la fiscalía aguarda los resultados de distintas pericias relacionadas con los allanamientos que se realizaron el sábado pasado.
El análisis del contenido de dos teléfonos celulares secuestrados (a cargo de un perito de la fiscalía) y de rastros encontrados en al menos dos vehículos revisados aguarda el doctor Rodolfo de Lucía, para tratar de encaminar la causa, que por ahora está dominada por el misterio.
El hombre, de 46 años y apodado "Tibu", se fue de su casa el 20 de mayo pasado.
Luego de mantener una discusión con su pareja, tomó algunas pertenencias y se marchó. Desde ese momento nada se sabe de él.
Dejó un teléfono celular -que ya fue analizado, al igual que el de su mujer- aunque algunas fuentes policiales no descartan que contara con otra línea: un aparato más viejo, "de los de tapita".
Los allanamientos ordenados el sábado por la jueza Marisa Promé, según trascendió, se agilizaron luego de un llamado al 911, que aportó algunos datos sobre el hombre.
Las Policías de Seguridad, Científica y la DDI y el Grupo de Perros Detectores K9 de Punta Alta tomaron parte de los operativos, 4 en nuestra ciudad y uno en un campo de la zona de Chasicó, partido de Tornquist.
En el caso de nuestra ciudad, los allanamientos se hicieron en Manuel Soriano al 1500 de Grünbein, en Fournier al 700 y dos en la primera cuadra de General Paz (donde la pareja tenía domicilio), uno en un edificio y otro en una cochera.
Además del secuestro de dos celulares y la identificación de los moradores -personas que tendrían alguna vinculación con el entorno de García Gurrea- se revisaron con los canes dos vehículos.
Se trata de un Citroen C4 y de una camioneta Ford Ecosport (estaba en la cochera céntrica), que fueron sometidos a la búsqueda de rastros.
Al menos en el último vehículo se encontraron "rastros a periciar", según se dijo, aunque no se aclaró si se trataba de cabellos, huellas o manchas.
En ese rodado, además, trabajaron con los canes a partir de muestras de olor.