Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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"Animarse a repensar la posibilidad de adoptar chicos más grandes"

Carolina Recalde, presidenta del Movimiento de Ayuda a Matrimonios Adoptantes (M.A.M.A), dijo que en Bahía y la región alrededor de 600 familias esperan la llegada de un hijo.
“Los niños reales que están esperando tienen más de 6 años”, dice Recalde. Aconseja a los padres una fuerte preparación.

Cecilia Corradetti / ccorradetti@lanueva.com

El 10 de noviembre de 2007 Carolina Recalde se inscribió, junto con su esposo, en el Tribunal de Menores para adoptar a ese hijo que no podían concebir naturalmente.

Ese mismo día le hablaron del Movimiento de Ayuda a Matrimonios Adoptantes (M.A.M.A), una ONG que acompaña a parejas o personas que persiguen ese fin. No imaginó que, años más tarde, iba a convertirse en presidenta de la institución.

Primero fue "alumna sin faltas" del grupo, luego secretaria. En el medio se convirtió en mamá de María, que llegó a su vida a los 9 años.

—¿Cuántas familias quieren adoptar en Bahía y zona?

—Unas 600, entre parejas y monoparentales. Las cifras son estimaciones.

—¿Qué cambios introdujo el Código Civil de 2015?

—La diferencia de edad entre adoptante y adoptado, edad del adoptante, prohibición de la adopción directa y el tiempo para declarar el estado de adoptabilidad del niño o adolescente.

—¿Y los trámites?

—Son los mismos: inscripción, renovación bianual y evaluación de la familia en espera cada 4 años. Pero hay cambios positivos, en especial uno que impone al juez un plazo para decidir si el niño vuelve con su familia de origen o es dado en adopción.

—¿Qué le aconseja a los aspirantes a adoptar?

—Que se animen a repensar la posibilidad de ahijar chicos más grandes, con problemas leves o graves de salud. Deben pensar que los niños reales que están esperando tienen más de 6 años.

—¿Por qué existe "preferencia" por los bebés?

—El 95% de los aspirantes prefieren niños menores de 3 años. Existe una idea de que, si es chiquito, tiene poca historia o no la tiene, así como también pensar que lo podemos amoldar según nuestras ideas, formas de vida, hábitos. Se suele creer, en definitiva, que es más fácil.

—¿Es así?

—No. Son mitos, prejuicios e idealizaciones. Todos los chicos tienen historia y los adultos también. ¿Qué pasaría si los chicos preguntaran acerca de las experiencias transitadas por los que podrían ser sus padres? Tanto los pequeños como los más grandecitos, a lo mejor, sufrieron maltrato físico o psicológico. Algunos habrán estado en hogares convivenciales. Muchos no tuvieron satisfechas sus necesidades básicas. Pero todo lo experimentado es parte de su vida y cuando adoptamos a alguien lo adoptamos con su historia, fortalezas, debilidades, heridas. Para eso debemos prepararnos, dialogar, conocer.

El caso particular
La nena que cambió sus vidas

Para "Caro" y Fabián, la espera hasta que llegó María duró cinco años. Pero fue una espera activa, porque no dejaron de buscar ayuda, participar en jornadas, interiorizarse. "Nos fortalecimos con otras personas que pasaban lo mismo. Y la espera fue necesaria, porque nos pudimos preparar para recibir a nuestra hija".

Desde que eran novios sabían que era imposible que llegara un hijo biológico. Con el tiempo se convencieron de que eligieron correctamente esta forma de ser familia.

La mañana que conocieron a esa nena "ocurrente, solidaria y cariñosa", fue maravillosa. "Nunca olvidaremos su carita, la ropa que llevaba, sus palabras. La emoción desbordaba nuestros corazones. Fue un momento único e inigualable", recuerda Carolina.

"Ella quería tener mamá y papá, vivir en familia, abrazar fuerte, ahuyentar el miedo, creer en los adultos, sanar heridas. Nosotros estábamos dispuestos a darle amor y esperanza, a ayudarla a crecer con alegría y sortear los obstáculos de la vida".

Admite que no fue fácil. "Tenemos días soleados y noches de tormenta. Buscamos la forma de que todo marche bien. Lo que no fue ni es difícil es amarla, porque nos asombra todos los días. Nos enseña desde su experiencia y nos demuestra que se puede construir desde el dolor".

María hoy tiene 14 años.