Bahía Blanca | Jueves, 03 de julio

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“Para venir a jugar a Rosario tuve que cerrar un kiosco que tenía en Monte Hermoso”

El sacrificio que hace Tomás Espinosa persiguiendo el “sueño del pibe” detrás de la pelota se puede resumir en una frase: nació en Monte Hermoso, vive en Bahía y juega en Punta Alta.

 

Fotos: Facebook Tomás Espinosa

Nació en Monte Hermoso, vive en Bahía y juega en Punta Alta.

“Siempre pensé lo mismo: para triunfar en el fútbol hay que hacer el sacrificio, y en ese camino de crecimiento y progreso constante haber venido a Rosario es una más que interesante opción”, señala convencido Tomás Espinosa, 25 años, lateral por izquierda pese a que su pierna hábil es la derecha.

Descalificador total del frío, dice que extraña la playa y no tener todos los domingos libres para ir a ver a su Atlético querido, donde comenzó su carrera y con el que fue tres veces campeón de la Liga de Coronel Dorrego en Primera división: 2015, 2016 y 2022.

Esta es su tercera experiencia en la Liga del Sur, ya que en 2019 fue refuerzo de Villa Mitre y en 2024 de San Francisco, ambos planteles dirigidos técnicamente por Martín Carrillo.

--¿Por qué elegiste venir al tricolor puntaltense?

--Porque siempre pelea por ascender y es un club grande, de donde han salido futbolistas que después jugaron a otro nivel. Para mi es un desafío enorme.

Padre de Albano (6 años) y de novio con Nicole, este defensor que se convirtió en pieza clave en el once rosarino apuesta a tener su mejor temporada deportiva, y persiguiendo esa ambición dejó el proyecto personal que tenía en el balneario.

“Fui heladero y en los últimos dos años tuve un kiosco, que cerré después del verano para poder venir a Rosario. No tenía quien me lo atienda y no daba para abrir solo los fines de semana, así que decidí bajar la persiana temporalmente. Junté unos pesos y me estoy atreviendo a soñar dedicándome solo a jugar al fútbol”, se esperanzó, según confirman en el mundo del francés, el “nene mimado” del DT Federico Gómez Peña.

Por último, se refirió a los cánticos ("Me parece que el Rosa no quiere ganar, me parece...") de algunos simpatizantes que se hicieron sentir durante y después de la derrota (0-1) del lunes ante Tiro en el Coloso de Cemento.

"Entiendo a los hinchas, pero esas actitudes no suman. La exigencia de estar en una institución como esta es alta, no lo niego, todos quieren ascender, pero la campaña del equipo en el Promocional no es mala; estamos en busca del 1 y de pelearle a La Armonía", amplió.