“Sí, le pegué al arco, necesitaba meter un gol”, dijo Diego Ramírez tras el 2-0 en el clásico
El capitán de Olimpo sobresalió con algunos pases interesantes, pero su obra de arte sucedió a los 34 minutos de la etapa complementaria, con un zapatazo de volea que se metió por detrás del cuerpo del arquero Molini. En ese preciso momento se terminó el partido.
Egresado del Instituto Superior en Ciencias de la Comunicación Social. Cronista de la sección Deportes de La Nueva. desde el 9 de octubre de 1995, especializado en fútbol. Entre 2002 y 2018 cubrió a Olimpo en Primera división. Trabaja en televisión y radio. Además, integró el equipo periodístico de "El Diario del Mundial", que se emitió en La Nueva Play.
“Agustín (Osinaga) sacó un envío largo, la rechazó un defensor de ellos (Manchafico) y, cuando la vi venir, ya sabía que no la iba a dejar picar para pegarle al arco; fue lo que quise hacer más allá de que la pelota terminó realizando una parábola larga para meterse por detrás del arquero”, contó Diego Ramírez, quien convirtió el segundo gol de Olimpo, con un teledirigido infernal, de volea, para sentenciar la historia en el clásico.
“Fue un alivio, necesitaba meter un gol”, reflexionó el capitán aurinegro, quien adelantó: “Teníamos que jugar dejando todo, sabiendo de lo que tenemos y de lo que somos; pensando así lo fuimos a buscar todo el tiempo”.
--Aunque Villa Mitre dejó una mejor impresión en la primera parte y en la media hora inicial del complemento.
--Hasta que se rompió el partido con el segundo gol, el trámite fue parejo. Cuando ellos tuvieron la pelota, nosotros defendimos bien.
“Lo de hoy ayuda muchísimo a seguir mejorando. Que el hincha se quede tranquilo porque vamos a dejar la vida dentro de la cancha para llegar al objetivo final, para que esta vez se nos de.
--¿Cuánto valor tiene quedarse con el N° 1 de la Zona?
--Mucho, es lo que queremos. Este grupo se comprometió a ir por todo, así que vamos a ir por todo.