Valentino Torres: "A mí me encanta atajar penales, es mi fuerte y trabajo para que salga bien"
El arquero de Liniers fue determinante en los 90 minutos y en la tanda desde los doce pasos, porque atajó un penal que le dio vida al chivo y lo clasificó a la final.
"Me sentí bien en todo el partido. Pasaban los minutos y pensaba en los penales, una instancia que me gusta. A mí me encanta atajar penales, es mi fuerte y trabajo para que salga bien".
Valentino Torres recogió el guante ante sus compañeros al finalizar la tanda de penales. Los abrazó a todos, porque iban llegando de a uno hasta formar un ramillete humano.
"Es una caricia de ellos, un reconocimiento. Fue una tarde perfecta, de esas que sueña todo jugador", expresó el "1" de Liniers, quien atajó un penal clave cuando la tanda en la definición con San Francisco era desfavorable.
-Había que estar muy fino, porque los pateadores tenían la mira muy calibrada.
-Pasó en el partido. Lo felicité a Nahuel (Bardella) en el gol del empate con ese tiro libre al ángulo. Y así fue en la tanda de penales, tanto de un lado como del otro. Ale Vila la clavó en el ángulo y hubo un par de remates esquinados imposibles para el arquero", apuntó.
-Elegiste bien los palos, tocaste una que casi sacás y fuiste decidido a la izquierda en el penal que atajás.
-Me mordí los labios un par de veces, jajaja. La que pega en mi mano izquierda iba muy abajo, muy cerca del cuerpo. Traté de llegar con el brazo, pero mi mano no estaba bien acomodada y por eso la pelota entró tras rebotar en el guante.
"Contra Bella Vista, en nuestra cancha, Lucas Martínez le pegó parecido y ahí sí pude desviar la pelota. Es cuestión de cálculo, de llegar firme a rechazar el balón", expuso.
-¿Y la de Álvarez López?
-Lo tenía estudiado. Hablé con Burno Falcioni por el penal que él ataja y sabía que le gusta arbrir el pie. Me jugué para el lado que podía patear y la pelota vino a ese sector.
-En la última, de Lautaro Vega, ¿llegabas si la pelota iba al arco?
-Llegaba, llegaba..., la sacaba. El remate fue a colocar, pero cuando partió la pelota se fue abriendo, pude intuir que no acertaba el arco. Por la dudas me tiré igual para asegurar.
-En el partido tuviste dos atajadas memorables, una al estilo "Dibu" Martínez.
-Uff... La postura la tengo asumida, la trabajamos con Fermín (Ponte) para arpovechar todo el segmento corporal, incluyendo las piernas. Por ahí no alcanza pese al esfuerzo, pero cuando sale te das cuenta que es un atajadón.
"La otra acción, donde quedé de frente con Vidal, veía que tardaba en definir y que miraba al piso, no levantó la cabeza. En esa acción uno tiene que plantarse porque el que ataca no ve nunca la posición del arquero. Cuando la tiró laraga dije: 'ya está, lo acompaño y dejo la vida para que la pelota pegue en algún lugar de mi cuerpo'", contó.
-¿Cómo definís tu actuación?
-Es buena. Pero también la de los otros diez compañeros que corrieron como locos, no aflojaron nunca. En un momento del partido se notaba el cansancio y había que aflojar un poco, porque San Francisco nos sometió a una presión permanente. En estos partidos los pequeños detalles cuentan.
-¿Hay final anual o se termina antes?
-Que se termine antes (risas). La tranquilidad de una final extra nos da un plus, pero estamos muy metidos en los dos partidos que quedan, que van a ser tan o más duros que el de hoy (por ayer).