Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Buscan develar los misterios del lago del parque de Mayo

Se firmó otro convenio de colaboración entre el Departamento de Química y el de Geografía y Turismo de la Universidad Nacional del Sur con la Dirección de Espacios Públicos del municipio.

Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.
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Audionota: Malena Ruppel

Por Pablo Andrés Alvarez / palvarez@lanueva.com

   El lago es uno de los principales atractivos con los que cuenta el Parque de Mayo, por el que han pasado distintas generaciones de bahienses, ya sea para pasear con los carritos acuáticos, alimentar a las especies que allí habitan, presenciar un recital o simplemente para contemplar el paisaje.

   Muchos ni siquiera conocen que su denominación es “Los Patos” y mucho menos saben de las características ambientales de uno de los espacios más visitados de la ciudad.

   Precisamente en eso está trabajando un grupo interdisciplinario de alumnos y docentes de las carreras de Química y Geografía, Turismo, Oceanografía y Geología de la Universidad Nacional del Sur y la Dirección de Espacios Públicos, comandado por las docentes e investigadoras Vanesa Bohn, Ana Martínez y Paula Zapperi.

   “Los primeros trabajos que realizamos en el Lago Los Patos fueron en el marco de un proyecto de extensión subsidiado por la Universidad Nacional del Sur, cuyo objetivo fue explorar distintos aspectos del ecosistema a fin de revalorizar su presencia en la ciudad”, contó Bohn, profesora del Departamento de Geografía y Turismo (UNS) e investigadora adjunta del Conicet. 

   El lago, de origen artificial, constituye uno de los recursos acuáticos más importantes del partido de Bahía Blanca. Sin embargo, hasta el momento no existían datos para hacer un diagnóstico preciso de su condición. 

   “Primero, para valorar el lugar, debimos conocerlo con mayor profundidad. A partir de ello pudimos comprobar que el mismo es un sitio de gran interés para la sociedad bahiense, dado que allí encuentra un espacio de recreación, seguro, de ambiente familiar y que les permite el contacto con la naturaleza sin la necesidad de recorrer varios kilómetros”, amplió la doctora Ana Martínez, del Departamento de Química de la casa de altos estudios. 

   Así se inició un relevamiento de las principales características físicas y ambientales mediante mediciones in situ y un análisis cartográfico. 

   “Se trabajó en la difusión de los beneficios que el lago aporta a la sociedad, tales como la posibilidad de recreación en un entorno natural, el hábitat de especies y su valor desde el punto de vista educativo. Entre los hallazgos se destaca, también, la gran diversidad de especies arbóreas y arbustivas que se encuentran en torno al lago, lo cual contribuye a la conformación de ese paisaje particular en medio de la trama urbana”, comentó la doctora Paula Zapperi, también docente e investigadora del Departamento de Geografía y Turismo e investigadora asistente del Conicet.

   El mencionado proyecto, ya finalizado, generó nuevas inquietudes y desafíos, siendo el puntapié inicial para poner atención en el mencionado ecosistema. Por ello, se firmó otro convenio de colaboración entre el Departamento de Química, el Departamento de Geografía y Turismo de la Universidad Nacional del Sur y la Dirección de Espacios Públicos del municipio.

   “Este convenio formaliza un vínculo de trabajo para la colaboración mutua para el monitoreo ambiental del Lago”, comentó Bohn. 

   Y añadió:  “Es así como se comenzó a trabajar en un nuevo objetivo, el de llevar a cabo muestreos mensuales de distintos parámetros del agua y de la hidrología del sistema en general".

   Actualmente, el espacio es elegido para realizar diferentes actividades, como las ferias de emprendedores, las bicicletas acuáticas y presentaciones musicales. Por ello, también se apunta a la participación de la gente.

   “Ya sea con campañas de concientización, como también de ayuda en relevamientos. Es importante asesorar a la gente sobre lo que arroja al agua para darle de comer a los patos, como así también que tengan cuidado con los desechos que dejan en cercanías, porque muchas de esas cosas terminan dentro del agua y afectando el medio ambiente. Creemos que si la gente lo siente como propio y conoce los medios por los cuales puede colaborar para su preservación, el lugar tiene que crecer exponencialmente y convertirse en un sitio de mayor interés”, se señaló desde el municipio.

   Y se agregó: “La idea es posicionar al lago como un ecosistema muy valioso que existe dentro de la ciudad y que no se percibe ni valora como tal. En ese sentido, es importante preservar el espacio físico y cuidar la flora y fauna del lugar”.