Goyo Peralta
Hace 49 años, en mayo de 1967, se presentó en el Salón de los Deportes (Soler 444) el ex campeón de los pesos pesados, Gregorio “Goyo” Peralta, en su retorno oficial al boxeo.
El púgil había dejado el ring en septiembre de 1965 cuando, con el Luna Park como jamás se lo volvió a ver (25.236 entradas vendidas), Oscar “Ringo” Bonavena lo derrotó por puntos en pelea a doce rounds, despojándolo del título de campeón nacional que Peralta ostentaba desde 1962.
Con 30 años de edad, esa derrota le significó un duro revés, sumado al del año anterior, cuando perdió ante el estadunidense Willie Pastrano, en pelea por el título del mundo. Por eso decidió tomarse un tiempo, para recomponer cuerpo y espíritu.
La presentación en nuestra ciudad significó su retorno, dirigido por Héctor Nesci y con la colaboración de su hermano, Abenamar. El rival fue el entrerriano Carlos Pérez, boxeador sin demasiados pergaminos que buscaba protagonismo. Peralta subió con 84,900 kilos, un peso que le resultó problemático por ser demasiado liviano para los completos. Los bahienses poblaron las gradas y hasta disfrutaron de la pelea preliminar, donde Carlos María Giménez, “invicto y promesa local”, derrotó por abandono a Raúl Olea.
Cuando subió Peralta, una ovación dio cuenta de su popularidad. Néstor Radivoy y Luis Pedro Ponte llevaron a través de LU2 y su espacio “Noche de puños” las alternativas de un combate que fue netamente favorable al ex campeón, quien en tres asaltos provocó el abandono de Páez, confirmando así un feliz regreso.
Peralta boxeó hasta sus 38 años, llegando, en 1971, a enfrentar al mismísimo campeón mundial George Foreman. Dejó un récord de 111 peleas, con 93 ganadas, 9 empates y otras tantas derrotas. Murió en 2001, en Rosario, a los 66 años.