En los Estados Unidos subsisten algunas leyes raras
Por Jesús del Toro / Yahoo
Es una frase común que en los Estados Unidos uno puede demandar y ser demandado por infinidad de razones, algunas de carácter delirante, siempre que se presente una autoridad o un abogado lo suficientemente creativo o abusivo como para emprender un proceso judicial, aunque éste se pase un poco, o mucho, de la raya.
Así, los Estados Unidos cuentan con cierta cantidad de leyes y normas que son, por lo menos, extrañas, o que lidian con situaciones extremas, descabelladas, anacrónicas o de plano sin sentido.
Algunas fueron producto de razones de peso a la hora de ser legisladas, pero otras pareciera que, simplemente, fueron creadas para dar quehacer a autoridades y abogados malentretenidos.
Canibalismo legal
Al parecer, Idaho es el único estado del país que tiene una ley que explícitamente prohíbe y sanciona el canibalismo, pues en general no existe en otra parte del país ninguna norma que haga ilegal que un humano devore a su prójimo, si bien obtener esa carne vía otros delitos, como lesiones, homicidio o profanación de cadáveres sí sería un crimen.
Lo cierto es que el canibalismo es extremadamente raro y sólo en Idaho, vía el apartado 18-5003 de los estatutos estatales, se prohíbe explícitamente el consumo de carne humana, aunque se excluye o atenúa el caso en que esa ingesta sea practicada como el último recurso de un individuo para poder sobrevivir.
Adulterio permitido
Es moralmente reprobable, para muchas religiones un pecado mortal y causa potencial de hondos sufrimientos y rupturas familiares, pero serle infiel al marido o a la esposa no constituye un delito en casi todo los Estados Unidos ni en la gran mayoría de las naciones occidentales (no así en ciertas regiones de Asia y África).
Pero en Michigan sí lo es. En el Código Penal de ese estado (Act 328 of 1931, 750.30) se señala que cualquier persona que cometa adulterio será culpable de una felonía, y añade que si el asunto es realizado entre una mujer casada y un hombre no casado, el hombre será sujeto al mismo castigo.
No indica qué pasa si el adulterio sucede entre un hombre casado y una mujer no casada. Sea como sea, las autoridades en Michigan rara vez persiguen ese delito.
¿Peligro rojo?
El muro de Berlín cayó, la URSS ya no existe y China es la productora Nº 1 de la mercancía del capitalismo multinacional. Pero en Oklahoma el estatuto estatal, en su sección 21-1266.1 aún insiste, como en tiempos de Joe McCarthy, la noción de que existe y opera una conspiración comunista internacional para derribar al gobierno de los Estados Unidos y, desde luego, al de Oklahoma.
Esa ley incluso alude a que esa certeza se basa en pruebas y evidencias presentadas a la legislatura, pero no especifica cuáles, ni cuándo, en su caso, fueron presentadas ni a qué época aluden. Nada se dice, por ejemplo, si las empresas que despidieron a sus empleados estadounidenses para tercerizar en fábricas chinas estarían, quizá, en algún tipo de pacto con los herederos de Mao.