Sede del Veterano de Guerra de Malvinas: la obra ya alcanzó el 60 % de concreción
La reciente instalación de los ventanales retoma el impulso hacia el futuro. “Tenemos la esperanza que se inaugure el próximo 2 de abril”, dijo el Arq. Diego Promenzio, a cargo de los trabajos.
Periodista. Círculo de Periodistas Deportivos de Bahía Blanca. Fue redactor de la revista Encestando (1985-2000). Desde 1987 trabaja en el diario La Nueva Provincia (hoy La Nueva.). Pasó por las secciones Deportes, La Región y La Ciudad, donde se desempeña actualmente. Está especializado en periodismo agropecuario desde 2001. Miembro de la Asociación Bonaerense de Periodistas Agropecuarios. Responsable de las páginas webs de la Asociación de Ganaderos (AGA) y de Abopa.
“Aunque falta un tramo importante, nuestra expectativa es que se pueda inaugurar el venidero 2 de abril. La realidad es que el conflicto sucedió hace más de 43 años y los Veteranos de Guerra de Malvinas aún no tienen un lugar dónde reunirse”.
Para el Arq. Diego Promenzio, quien está a cargo de la dirección de obra de la sede del VGM, un paso importante se produjo en las últimas semanas con la instalación de los ventanales exterior e interior del lugar ubicado en La Falda y Cuyo.
“Estoy en contacto con varios VGM, pero año tras año van quedando menos y muchos ya no podrán disfrutar de la sede terminada. Es una pena, pero eso nos motiva a seguir insistiendo para conseguir el apoyo necesario para terminar”, añadió.
La obra —que se realiza con aportes privados y municipales— se inició en 2016 y se encuentra en un porcentaje de concreción de alrededor del 60 %.
Además de Promenzio, participan los Arqs. Guillermo Allerborn, Claudio Pirillo y Andrés Moroni, así como el MMO Fabián Schmerko como constructor.
“Algunos materiales ya están comprados, como los pisos, bolsas de cemento y losetas que se utilizarán en el frente. También está lo necesario para hacer el hormigón del pórtico que va en la fachada”, detalló.
“Lo más caro de una obra son las aberturas y es algo que se concretó ahora con las principales: la que da al frente y la restante de cara al patio posterior. Después faltan algunas puertas placa interiores de baños, oficinas y otras aberturas de aluminio que terminarán de cerrar la obra”, indicó.
También dijo Promenzio que aún resta la etapa de las instalaciones, como la calefacción, el aire acondicionado, el armado de la cocina y la incorporación de artefactos.
“Hay un salón de usos múltiples (SUM) de alrededor de 11x7m. Una primera oficina, que será la administración general y otras dos, una para cada centro: veteranos y suboficiales. Hay dos baños, uno de ellos para discapacitados, y una cocina”, dijo.
“También existen tres patios. Uno al frente, que también se prevé usar como expansión de reuniones o para alguna actividad al aire libre, y dos traseros que se suman a la habitabilidad del lugar”, comentó.
Las dos oficinas de las instituciones se prevén utilizar como consultorios para los profesionales que atenderán durante días hábiles, como médicos, psicólogos, psiquiatras y demás. En el lugar también existe un depósito de importantes dimensiones.
En la continuidad de los trabajos, para una segunda etapa se prevé un paso de cebra (senda peatonal) y un puente para conectar con la plaza Héroes de Malvinas.
“Estamos justo enfrente del cenotafio. La idea es que todo esté enfocado a ese lugar tan emblemático. Y la intención del puente es para tener un acceso directo, que podría hacerse con formas semejantes al acceso al crucero Belgrano, porque también se pretende homenajearlo”, agregó.
Promenzio sostuvo que el espacio de reunión estará abierto a la ciudadanía, porque se podrán organizar charlas y realizar otras actividades más allá del museo que se prevé instalar con una temática relacionada a la Guerra de Malvinas.
La historia
“Yo no soy combatiente, ni mucho menos; de hecho, soy más chico (de edad) que todos ellos. Pero en mi casa, sobre todo mi Vieja, siempre nos inculcó la causa Malvinas a mí y a mis hermanos. Hemos hecho muchas reuniones con VGM y, entre otras, recuerdo una con Oscar Ismael Poltronieri, el héroe de mayor condecoración del Ejército Argentino, así como Esteban Tries y Manuel Villegas”, dijo.
“Al principio muchos no querían hablar del tema, pero con el tiempo se fueron animando”, agregó.
“Desde chico conocía a Héctor Bollo, ya que vivía frente a mi casa. Por eso en 2016, cuando era presidente del Centro de Veteranos, me preguntó si podía colaborar; le dije que sí y que iba a hacer un grupo de trabajo. Y así llamé a los arquitectos Claudio Pirillo, Guillermo Allerborn y Andrés Moroni, todos profesores de la UNS en la carrera de Arquitectura”, recordó.
La obra, que se realiza con aportes privados y con la gestión logística desde la comuna local, se inició en 2016.
“Entre los cuatro hicimos el proyecto, ad honorem por supuesto. Y actualmente estamos con el constructor Fabián Schmerko, quien tampoco cobra honorarios y nos da una gran mano con su grupo de gente”, sostuvo.
Por otra parte, Promenzio es uno de los responsables del reconocido proyecto Sembrando Bibliotecas. Justamente, se está trabajando para instalar en la casa del VGM a partir de materiales sobre el enfrentamiento armado, así como otras particularidades relacionadas con las islas.
De qué se trata
En la memoria descriptiva se precisa que el edificio desarrolla una idea que conjuga los espacios de uso, con una gran carga simbólica aportada por quienes lo habitarán. La impronta se expande más allá de los límites del terreno —292,73m2— e invade al parque lineal de Cuyo y hace foco en el monumento a los Caídos en la Guerra de Malvinas, situado a unos 60 metros de distancia.
“Como proyectistas intentamos unificar esta dualidad entre monumento y nuevo edificio, porque para los paseantes del parque se inicia el recorrido en el monumento y concluye en el patio del edificio”, se aseguró.
También que esta experiencia vivida aporta y encuadra una nueva perspectiva, tanto visual como perceptiva, de los hechos que se conmemoran.
“Los visitantes casuales del edificio experimentarán, con el uso y la información condensada en la escultura al soldado y otros elementos utilizados en la misma Guerra de Malvinas, una renovada concepción de los hechos”, se concluyó.
La materialidad está dada por un sistema constructivo tradicional de baja complejidad, muros portantes y un techo liviano de chapa para cubrir grandes luces. Las carpinterías, en tanto, son de aluminio blanco.
El acabado exterior es revocado y pintado con un material impermeable y el sistema de climatización tendrá acondicionado para las estaciones estivales y calefacción por radiadores. Todo el edificio se ajusta a las normas internacionales de accesibilidad universal.
Los espacios definidos del lugar son los siguientes:
—Rampa de acceso, de 16m2.
—Patio de acceso mirador, de 65m2.
—Administración, de 14m2.
—Dos consultorios, de 8 m2 cada uno; una sala de espera, de 22m2; sanitarios, de 6 m2; Patio de Fogones, de 10.00m2; cocina, de 13.50m2; Salón de Usos Múltiples (SUM), de 70.00m2;
—Patio contemplativo, de 32,5m2 (con un deck de PVC como expansión visual).
—Todo el edificio está construido con una superficie total de 165m2.