Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

Buena amiga, estudiante y cariñosa: así era Agustina, la chica asesinada en un robo

Agustina Solange Bustos tenía 19 años y vivía en Ingeniero White.

Foto: Facebook

   Un hermoso año compartido junto a mi familia, amigos y compañeros. Viví una etapa hermosa junto a gente que quiero mucho. Feliz Año y felicitaciones a todos mis conocidos, amigos y familia. ¡Los quiero a todos! Fueron una parte importante de mi año y de mi vida. ¡Muy feliz año para todos!

   Agustina Solange Bustos comenzó el 2018 con esa publicación en Facebook. 

   Amigos. Familia. Noviazgo. Graduación del colegio. Eso y mucho más marcaron su 2017. Y estaba preparada para un nuevo comienzo.

   A fin de año se anotó en Enfermería. En realidad quería ser veterinaria, pero para eso debía irse de Bahía, dejar a su familia.

   Se imaginó sola en una ciudad desconocida y sintió mucho miedo. Prefirió quedarse.

   Lo que no imaginó Agustina es que quedarse podía ser peor...

 

   Ayer, alrededor de las 21, Agustina salió de la casa de su mamá en Villa Parodi para volver a lo de su papá, que vive en Ingeniero White.

   Tenía 19 años. Era la mayor de tres hermanos, hija de padres separados.

   En la casa de su papá, Agustina tenía los libros que debía buscar para ir hoy a la Universidad Nacional del Sur.

   Pero nunca llegó a buscarlos. Ni siquiera pisó White.

   Fue todo muy rápido: aparecieron tres chicos de 14, 15 y 17 años, le sacaron la mochila y la atacaron con un cuchillo.

   Agustina gritó de dolor. Pidió auxilio. Y los vecinos respondieron.

   Se juntó mucha gente en aquel sector lleno de monoblocks y calles de tierra. Varios llamaron a la ambulancia y algunos quisieron reanimarla, pero la policía les dijo que no lo hagan.

   El pulso de Agustina comenzó a hacerse más lento, sus manos estaban frías y la ambulancia no llegaba.

   Lo hizo después de 45 minutos. Pero era tarde. Agustina ya no respiraba.

   "Muy feliz año para todos", se lee aún en su perfil de Facebook. Pero ya no lo será para todos. Hoy la lloran muchos. Su familia, sus amigos y una ciudad que no descansa del horror