Juicio por el caso Dermit: los dos acusados recibieron 23 y 24 años de prisión
El juez Eduardo d´Empaire resolvió las penas de Pablo "Paisa" Martínez y Omar Bacci por el crimen del pescador.
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El juez Eduardo d´Empaire, del Tribunal en lo Criminal N° 3, resolvió hoy las penas para los dos acusados por el crimen del pescador Mauricio Dermit, ocurrido en 2019.
Pablo "Paisa" Martínez y Omar Bacci, a quienes atribuyeron el delito de privación ilegítima de la libertad agravada por muerte, habían sido declarados culpables el 1 de julio pasado por un jurado popular.
El magistrado, tras la audiencia de cesura que se realizó esta semana, decidió imponer la pena de 24 años de cárcel para Martínez y 23 años para Bacci, informó la Agencia de Noticias Judiciales.
Durante esa audiencia, el fiscal Jorge Viego había reclamado una sanción de 25 años de prisión para el primero de los imputados, mientras que pidió una pena de 24 y medio para el otro.
El abogado Sebastián Martínez, quien asesora a la familia de la víctima, acompañó la postura del Ministerio Público.
Por su parte, los defensores de los procesados, Mariano Jara y Fabiana Vannini, habían considerado que se les debía aplicar el mínimo de la pena prevista para el delito imputado (15 años).
Según la causa, entre la tarde del 3 de junio de 2019 y la madrugada del día siguiente, Martínez y Bacci —junto a Simón Alexis Ferreira y Sofía Ivanna Molina, quienes ya fueron condenados mediante la modalidad de juicio abreviado—, concertaron una cita con Dermit en el domicilio ubicado en Brasil 1501, donde lo habrían privado de la libertad de manera violenta para luego golpearlo y exigirle la entrega de dinero y otros elementos de valor.
En estas circunstancias, y como consecuencia del accionar de los imputados, se produjo la muerte de Dermit y, tras ello, los acusados buscaron combustible en la estación de servicio de Don Bosco y la avenida La Plata, colocaron el cuerpo de la víctima en el Fiat Uno de su propiedad y lo llevaron hasta Belisario Roldán al 2900, para luego incendiarlo de manera intencional para ocultar el rastro del crimen.