Pringles: grupos de jóvenes fabrican briquetas para familias vulnerables

Redacción de La Nueva.

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Guillermo D. Rueda / grueda@lanueva

   Con la mirada puesta en la solidaridad, y en el momento más complejo para calefaccionar familias en hogares vulnerables, grupos juveniles de la ciudad de Coronel Pringles han puesto manos a obra.

   El proyecto de fabricación de briquetas es coordinado desde las áreas de Turismo y de Gestión Educativa y Juventud municipal. Se elaboran en el predio de la Dirección de Producción, en máquinas cedidas por la Escuela de Educación Secundaria Técnica Nº 1 y con la asistencia de profesores de la institución, quienes fueron los capacitadores.

   “La briqueta es un papel prensado que se utiliza para la combustión”, dijo Marianela Strazzere, coordinadora del área de Turismo.

Marianela Strazzere, de Turismo pringlense.

   “Se elabora a partir de la selección de papel reciclado, que se tritura y deposita en bidones con agua durante más de 48 horas”, comentó.

   “Luego, una máquina prensadora extrae todo el líquido. El mismo almidón del papel hace que se integre y la compactadora lo prensa para dejar a la briqueta como corresponde”, amplió.

   Strazzere celebró la concreción de este proyecto, en especial por su costado solidario.

   Ignacio Tonelli, a cargo del área de Gestión Educativa y Juventud del municipio, agregó que los grupos estaban conformados con anterioridad a la pandemia y trabajando con otros proyectos.

   “Como las actividades se suspendieron, nos reunimos la semana pasada —dijo a Prensa Municipal— con el grupo Interact, que pertenece al Rotary Club. Les comentamos las ideas que queríamos trabajar y, finalmente, comenzaron a darnos una mano en lo que nosotros llamamos, internamente, Voluntariado Joven”.

   “Los chicos y las chicas de Interact se sumaron a la realización de las briquetas que, luego son entregadas, junto con la leña que el municipio otorga desde el banco”, explicó.

   Tonelli dijo, también, que estos encuentros sirven para conocerse y que ya están programando reuniones con otros grupos de jóvenes de la ciudad para ofrecer esta ayuda y saber si desean sumarse al Voluntariado Joven.

 Ignacio Tonelli, de Gestión Educativa y Juventud comunal.

   “Este trabajo en conjunto es una manera de canalizar la energía que tiene la juventud en momentos de pandemia”, afirmó.

   Como no podría ser de otro modo, tanto las reuniones entre personas como la realización de las briquetas se realizan dentro del marco protocolar de seguridad sanitaria, como el cumpliendo del distanciamiento, el uso de tapabocas, el lavado de manos y demás.

Matzkin ponderó los ejes de la propuesta

   En Coronel Pringles, un 40 % de la población no cuenta con gas de red y la calefacción debe realizarse con tubos de gas envasado, que tienen un alto costo, o con leña.

   “De ese 40 %, la mitad se encuentra en condiciones de pobreza y de altísima vulnerabilidad, más allá de que el Estado está muy presente. Nosotros ayudamos con una parte de lo que necesitan de combustible, pero no alcanzamos a cubrir la totalidad”, manifestó Lisandro Matzkin, jefe comunal de Coronel Pringles.

   “Para cubrir esa demanda, tenemos un Banco de Leña Municipal, que se nutre de las podas del arbolado público y de las donaciones de los productores agropecuarios”, agregó.

Lisandro Matzkin, jefe comunal de Coronel Pringles.

   “Ahora sumamos la fabricación de briquetas pero decidimos, como había mucha voluntad de la gente por la pandemia, dar otro canal de participación. Y sobre todo a un sector de jóvenes, que son muy proactivos en la sociedad”, sostuvo.

   Matzkin —en diálogo con La Nueva.— ponderó esta articulación entre el Estado y el voluntariado joven.

   “Se dan varias cuestiones al mismo tiempo en la fabricación de las briquetas", comentó.

   “Una es el voluntariado, sobre todo joven. Otra es la articulación estatal con gente de la sociedad civil. También porque se llega a familias vulnerables y, finalmente, está el cuidado del medio ambiente. Esto se hace con material reciclable”, detalló.

   “También tenemos una planta de tratamiento de residuos sólidos urbanos, que funciona bien. Justamente, una parte del material para las briquetas viene de la PTRSU. Otra directamente no llega hasta ahí, sino que va a los puntos limpios de la ciudad en carácter de papel separado”, comentó.

   El intendente contó que, en una tercera vía, hay grandes usuarios que descartan el papel, como en las oficinas públicas, imprentas y comercios, que va en forma directa al centro de fabricación de briquetas.

   “En ese sentido, el vecino toma conciencia de la separación en origen. Por eso estamos por poner en marcha, en este agosto ya que se retrasó por la pandemia, el sistema de recolección diferenciada para acentuar la propuesta”, concluyó Matzkin.