Hallaron en un pozo a un niño buscado
Un niño de 3 años fue encontrado ayer a la tarde semicolgado y con la cabeza hacia abajo dentro de un pozo, en una abandonada obra en construcción en el barrio Mara, más de cuatro horas después que familiares y vecinos iniciaran su desesperada búsqueda, fundamentalmente cerca de su casa situada a unos 400 metros del lugar del hallazgo.
Principal protagonista de la conmocionante historia fue Nathan Oviedo, domiciliado en un departamento del complejo habitacional Alternativa Bahiense, en Sixto Laspiur al 2700, quien fue hallado en un terreno situado en Güiraldes y Malvinas.
Según trascendió, poco después de las 11 la policía tomó conocimiento de la desaparición del chico y luego que los investigadores se entrevistaron con otro niño, de 9 años, fueron hasta la obra donde encontraron a Nathan, “llorando, con la parte superior del cuerpo dentro del pozo, la cabeza cubierta por un buzo y una pierna enganchada, que le impidió retroceder para salir del encierro”, dijo un vocero policial.
Agregó que el pozo mide unos 80 centímetros de profundidad y alrededor de 40 de diámetro, y para llegar a él hay que sortear pastizales de un metro de altura, circunstancia que lo mantiene oculto a la mirada de cualquier peatón que pase por la calle, ya que la vereda es intransitable.
Una vez rescatado, Nathan fue traslado al Hospital Municipal, donde quedó internado en Pediatría.
“Por suerte está bien el gordo”, expresó Andrea Oviedo (28), frente a la puerta de la habitación donde estaba el pequeño.
La mujer aseguró que Nathan “estaba jugando con un nene que vive en otro barrio y andaba en bicicleta. Este nene vive en Biggio al 1200 y cuando se fue, mi hijo lo acompañó”.
Para entonces eran las 11 y “yo estaba por irme al centro y el nene quedaba con mi hermano”, dijo Andrea, para agregar que al no encontrarlo, comenzó la búsqueda “con los vecinos, que lo buscaron por todos lados”.
Agregó la mujer que luego efectivos policiales se dirigieron hasta “la casa del chico que estaba con mi nene y hablaron con la madre. De ahí, la policía fue a hablar con el chico que estaba en la Escuela 78, de Viamonte (y Di Sarli) y el nene dijo dónde estaba (Nathan), definiendo al lugar como una casa despintada, con ladrillos. Es que él era el último que lo había visto”.
Al decir de Andrea, el chico habría expresado que “supuestamente un hombre lo había metido ahí” a Nathan, luego de llevarlo hasta el lugar “diciéndole que lo traería a casa”.
Y en ese sentido mencionó que “un hombre en una Kangoo roja” se llevó al pequeño, pero ningún vehículo de esas características fue registrado por las cámaras de seguridad instaladas en el sector, descartando casi de plano los investigadores la posibilidad de un intento de secuestro.
Además, esa hipótesis perdió credibilidad ante el relato de la mamá de Nathan, quien le preguntó a su hijo cómo había llegado hasta la obra, que sería propiedad del padre del otro chico, “y él me dijo que el nene lo metió ahí”.
En un móvil policial Andrea acompañó a los uniformados que ingresaron en la obra “pero no me dejaron bajar. Y cuando lo vi, lloraba, pero cuando llegamos acá, (por el Hospital Municipal) se tranquilizó”.
En la comisaría Segunda se instruyen actuaciones por "averiguación de presunta comisión de delito de acción pública".