"Estoy convencida de que va a salir adelante"

Redacción de La Nueva.

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 "Nunca pensé que me pudiera pasar a mí", dijo ayer Lorena Zennaro, mujer del trabajador baleado durante el asalto al corralón de materiales Lacimen S.A.

 Con rosarios colgados en el cuello y las fotos de su marido, Ricardo Pelayes y de los mellizos Gastón y Matías, de diez años, confesó que, hoy por hoy, lo único que desea es tener a su lado al padre de sus hijos.

 "Creí que la única era la mamá de 'Vicky' y Horacio (por los jóvenes asesinados María Victoria Chiaradía y Horacio Iglesia Braun) y veo que no, que a cualquiera nos puede pasar", señaló en diálogo con "La Nueva Provincia".

 Lógicamente angustiada por el momento que vive, la mujer reclamó la detención de los responsables del brutal ataque.

 "Quiero justicia, porque tengo dos hijos que en este momento están tratando de estar bien. Quiero que los agarren y la gente vea el país en el que estamos viviendo", indicó.

 Lorena explicó que diariamente pasaba a visitar a Ricardo por el comercio, aunque, por algún extraño designio del destino, no lo hizo la tarde de los hechos.

 "Me fui a la una de la tarde de mi casa, llevé a los chicos a la escuela y luego los fui a buscar. Todas las tardes pasaba por el negocio, pero Dios ha querido que ese día no pase", señaló.

 Dijo que hacía 20 años que "Ata" --como apodan a su marido-- trabajaba en el local y lo describió como una persona "sacrificada y responsable".

 "Una vez estuvo internado por una neumonía y su única preocupación era ir al trabajo y cumplir... no puedo entender tanto sacrificio para que ahora un delincuente le pague así", mencionó.

 Al respecto, afirmó no entender la razón por la cual el ladrón agredió a Ricardo.

 "Les había entregado todo y me pregunto: ¿por qué tuvo que tirar? Le podría haber disparado en una pierna si quería tirar, pero no en la cabeza", manifestó.

 "No sabemos nada y el único que lo sabe es él. Tengo fuerzas y estoy convencida de que va a salir adelante y me va a decir quién fue, si es que lo reconoció", agregó.

 Más adelante manifestó que, teniendo conocimiento de robos perpetrados en la zona, siempre le sugería a su marido que nunca se resista a las exigencias de los malvivientes si le tocaba ser blanco de un asalto.

 "Siempre le decía que si entraban a robar, les diera todo. Nunca le había tocado y siempre le decía lo mismo, porque es tu vida por lo que te piden", recordó.
También reclamó que los responsables reciban, por parte de la justicia, el castigo que se merecen.

 "Si la policía los agarra, quiero que cumplan con su condena. Tampoco quiero que estén seis años y por buena conducta salgan a la calle a hacer lo mismo. Una persona que hace esto no se cura por más que esté mucho tiempo en la cárcel. El que es asesino, va a serlo toda su vida", afirmó.

 Lorena explicó cómo la vida de su familia cambió drásticamente en cuestión de segundos.

 "No tengo palabras para decirle a mis hijos lo que pasó. Continuamente me preguntan por el padre y quieren verlo. Tengo mellizos y juegan todo el día con el papá, ahora no van a poder volver a hacerlo y ojalá lo tengan a su lado de alguna manera", señaló.

 "Le pido a todos los Santos y rezo constantemente para que me ayuden a que esto pase. Hay que esperar un milagro para que salga adelante. Somos los dos jóvenes y tenemos dos nenes muy chiquitos que lo único que necesitan es a su papá", concluyó.

No tiene reacción a estímulos

 Por otro lado, fuentes médicas del hospital Municipal informaron ayer que no se produjeron cambios en el estado de salud de Pelayes.

 "Sigue en estado comatoso y no se han producido variaciones en su estado. Permanece conectado al respirador y sin reacción a estímulos", comentó a este diario la doctora Paula Boschero, del servicio de Terapia Intensiva del centro asistencial de la comuna.

 Como se informara en anteriores ediciones, el hombre sufrió una herida severa causada por el ingreso de un proyectil en la zona frontoparietal izquierda, que finalmente quedó alojado en el témporoccipital derecho.

 Poco después del ingreso del paciente en el nosocomio de Estomba y Bravard, voceros sanitarios confirmaron que el cuadro del trabajador baleado es "irreversible" y que "no hay posibilidades de sobrevida".