Berlín, Hitler, los Juegos Olímpicos y lo que podría pasar en unos años
La capital alemana presentó oficialmente su candidatura para albergar la cita olímpica en 2036, al cumplirse el centenario de los Juegos del nazismo.
Periodista. En La Nueva desde 2013. Especializado en el movimiento olímpico. Asistió a los Juegos Olímpicos de Río 2016, a los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, a los Juegos Suramericanos de la Juventud Rosario 2022, a los Juegos Suramericanos Asunción 2022, a los Juegos Panamericanos Santiago 2023 y a los Juegos Olímpicos París 2024, entre otros eventos internacionales.
El camino olímpico está en medio de París 2024 y Los Ángeles 2028. En marzo fue elegida Kirsty Coventry, quien desde el 24 de junio se convertirá en la primera mujer y la primera persona africana en comandar el Comité Olímpico Internacional. Su primer gran desafío serán los Olímpicos de la Juventud, en Dakar, el año que viene.
No obstante, desde distintos puntos del planeta elevan la vista hacia un futuro que parece lejano en el tiempo aunque, ya sabemos, todo pasa rápido, muy rápido.
En ese sentido, basta recordar que los últimos Juegos Olímpicos (absolutos, de verano; los tradicionales, bah) confirmados se llevarán a cabo en Brisbane, Australia, en 2032. Es decir, aspirantes deberán luchar por ser sede de 2036 en adelante.
Allí apunta Berlín, quien esta semana elevó formalmente el pedido para ser considerada al cumplirse cien años de aquellos Juegos tan controvertidos por estar marcados por los ideales de Adolf Hitler y el nazismo.
La ministra de Deportes, Iris Spranger, declaró públicamente que la ciudad quiere organizar los Juegos en 2036 mediante la renovación de las instalaciones deportivas existentes. También se mostró flexible a albergar el evento más adelante aún, en 2040 o 2044.
El Estadio Olímpico de Berlín, conocido como Olympiastadion, se construyó para aquellos Juegos de 1936. Hitler participó personalmente en el diseño y la construcción del mismo, con capacidad para unas cien mil personas.
“Creo que los Juegos de 2036, independientemente de dónde se celebren, también se centrarán en los Juegos Nazis de 1936. Son parte de la historia y se les prestará atención”, dijo a propósito el alcalde berlinés, Kai Wegner.
“Debo decirles que me enorgullece ser el alcalde de una ciudad que ha cambiado en los últimos 100 años; que ya no toleramos la dictadura, la exclusión ni la violencia masiva, sino que Berlín es ahora una metrópolis cosmopolita e internacional, una ciudad colorida y diversa”, señaló.
La candidatura de Berlín, denominada Berlín+, contará con el apoyo de los estados de Brandeburgo, Sajonia, Mecklemburgo-Pomerania Occidental y Schleswig-Holstein.
Alemania, entonces, deberá luchar con otros países que también manifestaron abiertamente el deseo de organizar el mayor evento deportivo y cultural, tales los casos de India, Turquía, España, Qatar o Italia, por citar algunos.
La última vez que los alemanes fueron anfitriones ocurrió en 1972, en Munich, en otros Juegos polémicos y trascendentales.
En aquella oportunidad, terroristas palestinos del grupo Septiembre Negro tomaron como rehenes a miembros del equipo olímpico israelí, acto que derivó en la muerte de once atletas israelíes, cinco terroristas y un policía.