Persecución desde la financiera: actúan la justicia provincial y la federal
Se investigan, por un lado, la desobediencia y la resistencia a la autoridad de los 4 ocupantes de los vehículos y, por otro, el origen de los millones de pesos.
Una vez concluida la cinematográfica persecución que se inició en una casa de cambios céntrica, la Policía dio intervención a la fiscalía provincial en turno.
Es que las 4 personas que escaparon de la orden policial, a bordo de un Volkswagen Vento y un Renault Fluence, fueron imputados en principio de desobediencia y resistencia a la autoridad.
Sin embargo, desde la fiscalía provincial ordenaron que se notificara de la situación a la justicia federal, para establecer el origen del dinero en efectivo (unos 100 millones de pesos y 100 mil dólares), ante la posible existencia de algún delito de tipo federal.
En consecuencia, la Policía se comunicó con el doctor Ivo Krasnopol, secretario penal del Juzgado Federal Nº 1, quien derivó la comunicación, por razones de turno, al Juzgado Federal Nº 2, a cargo de la jueza María Gabriela Marrón.
La jueza Marrón, en principio, ordenó el conteo detallado del efectivo y luego su secuestro, así como el de los teléfonos celulares de los ocupantes de los vehículos.
Una vez interceptados los vehículos en la ruta 51, algunas autoridades policiales intentaron tomar contacto con directivos de Pullman para conocer otros detalles, pero fueron recibidos por el abogado de la firma, Roberto Gargiulo quien, según los uniformados, no les dio acceso a la información.