Suena el despertador y Fortelli sigue soñando con San Lorenzo
El naranja se metió en semifinales del torneo de Primera y ya igualó la mejor posición histórica. ¿La mejorará?
Ingresó en La Nueva Provincia en 1995. Trabaja en la sección Deportes y fue colaborador en Regionales y Locales de este mismo medio. Se especializa en básquetbol. Formó parte del staff de la revista Encestando y Zona de Básquet durante 10 años. Tuvo experiencia en el programa Radial Contrabásquet, en Radio La Red.
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San Lorenzo 1961, 1971, 1972 y... 2023. El equipo de calle 12 de Octubre ya igualó su mejor posición histórica, el cuarto puesto en Primera, con la posibilidad de seguir trepando y grabando a fuego el nombre de estos jugadores que, a base de resultados, hace tiempo se ganaron la consideración, el respeto y admiración en el básquetbol local.
"Estamos muy contentos y más ahora con este dato, que no tenía, de poder lograr la mejor campaña de la historia del club", admitió Luciano Fortelli.
Sin figuras de renombre, supieron conformar un equipo, fortalecido aún más por los lazos de amistad en su mayoría. Y eso se expresa en la cancha. Se hacen mejores unos a otros, disfrutan que al compañero le vaya bien. Saben que es mejor para todos. Así funcionan, así los adoctrinó el entrenador Claudio Queti a través del tiempo.
"Hace tiempo que los más viejitos venimos con las ganas de llegar a una final. Claudio siempre nos decía que sería un sueño y objetivo cumplido llegar a una semifinal. Los chicos que se han acoplado sienten la camiseta como nosotros y se generó un grupo muy bueno", destacó el base.
Anoche, una vez más esto se vio en la cancha, reflejándose en la victoria ante Bahiense del Norte, por 87 a 77, que les permitió cerrar la serie 3-1.
Fueron dos equipos de planteos similares, intensos y esta vez, con Sanlo teniendo ventaja por las ausencias de Pedro Santiago (de viaje en Estados Unidos) y Sebastián Luengo (fractura en la mano izquierda).
"Sacábamos una diferencia, la limaban muy rápido y otra vez a remar. Después, con jugadas de ataque rápido o triples nos distanciábamos. Todo el segundo tiempo fue así, pero pudimos mantener la calma. Creo que Seba (Branciforte) tuvo un partidazo y nos dio una mano muy grande tanto en defensa como en ataque", resaltó Lucho.
Justamente Branciforte aportó 5-6 en triples y Fortelli, 5 de 8, en un global de 12-21.
"Fue una serie durísima, con un rival que tiene experiencia y jóvenes que juegan muy bien", elogió Fortelli, que terminó con 21 puntos, 11 asistencias y 6 rebotes.
Leo La Bella desde la conducción y entrega atrás, Jorge García empujando adentro, el pibe Augusto Lamonega jugando con mucha intensidad y personalidad (11 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias), más las apariciones de Luciano Polak, mantuvieron con vida al local, que se recuperó de un -17 en el tercer cuarto.
Claro que el naranja tuvo la variedad de recursos que lo trajo hasta acá, con Fortelli, Branciforte, Franco Ferrari, Joaquín Coria y anoche, en menor medida, Alejo Agulló y Esteban Benedetti, aunque son de los que suman.
"Todos debemos defender, porque en ataque tenemos gol en todas las manos. Fue una característica durante todo el torneo. Siempre aparece alguien", dijo Fortelli.
La vida cotidiana, más allá de la alegría deportiva, continúa para este "obrero".
"Hasta las dos de la mañana no me duermo, je. Y me levanto a las cinco (trabaja en una empresa de caudales)", recordó.
No obstante, el sacrificio vale la pena.
"En principio no estaba en los planes llegar hasta acá. Después el torneo nos dio algunos parámetros para hacernos creer que podíamos. Hay que disfrutar estos días de descanso y a pensar en la semi, no sé en quién, los posibles rivales (Estudiantes o Liniers) son muy buenos equipos, ante los que ganamos y perdimos durante el año", analizó.
Suena el despertador y Lucho se levanta. Es muy temprano todavía. No entiende qué pasa. Cree que está soñando despierto, pero el real: San Lorenzo es semifinalista.