Juntos por el Cambio repudió "la violencia ejercida por manifestantes y funcionarios kirchneristas"
A través de un comunicado, la coalición opositora consideró que "el kirchnerismo necesita la violencia porque no puede aceptar el correcto funcionamiento de las instituciones republicanas".
-
- copiado al portapapeles
-
- copiado al portapapeles
La Mesa Nacional de Juntos Por el Cambio repudió "la violencia ejercida por manifestantes y funcionarios kirchneristas" esta tarde en el domicilio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el barrio porteño de Recoleta.
"El kirchnerismo necesita la violencia porque no puede aceptar el correcto funcionamiento de las instituciones republicanas", consideró la coalición opositora sobre los incidentes desatados luego de que los militantes derribaran las vallas que el Gobierno porteño había dispuesto para impedir el acceso a la esquina de Uruguay y Juncal, donde reside la expresidenta.
A través de un comunicado titulado "Los argentinos necesitamos paz social", los dirigentes de la oposición respaldaron a Horacio Rodríguez Larreta en la "acción preventiva" frente a la casa de Cristina Kirchner.
"Las intenciones de la Vicepresidenta, de querer encuadrar todo en su teoría conspirativa y en la búsqueda de cualquier excusa para alterar la paz social y politizar la causa judicial que atraviesa, terminan incitando violencia irresponsablemente", apuntaron a una semana de que el fiscal de la causa conocida como Vialidad, Diego Luciani, pidiera 12 años de prisión y la inhabilitación para ejercer cargos públicos de por vida.
Por último, destacaron el accionar de la policía de la Ciudad de Buenos Aires "por haberse apostado en el lugar para cuidar a todos los argentinos" y se solidarizaron con los efectivos que resultaron heridos.
La decisión de la administración porteña de poner vallas en las inmediaciones de la casa de Cristina Kirchner, luego de las denuncias de los vecinos tras cinco días de un acampe de militantes, disparó una nueva pelea entre el kirchnerismo y la gestión de Rodríguez Larreta, que derivó en una marcha a Recoleta impulsada por La Cámpora.
"Están simulando una detención domiciliaria", dijeron. Luego llegó la declaración de la propia Cristina Kirchner que apuntó contra el jefe de Gobierno porteño. "Amanecí con la esquina de mi casa literalmente sitiada", sostuvo.
Ante la presencia de las fuerzas de seguridad y el intento de los manifestantes de quitar las vallas, se produjeron serios incidentes. (Clarín y La Nueva.)