Sociedad Sportiva
Ocupó la casona de avenida Alem y San Juan hasta 1949.
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Mario Minervino / mminervino@lanueva.com / @mrminervino1
Hace 96 años, en junio de 1925, inauguró su atractiva sede social el club Sociedad Sportiva.
La idea de contar con un club que ofreciera confort y espacio a los amantes del tenis había tenido la puntada inicial de este emprendimiento, cuando en septiembre de 1923 se reunieron varios vecinos -entre ellos estaban Florentino Ayestarán, Francisco Cervini, Norman Geddes y Modesto González Martínez- para fundar esta entidad.
En principio se pensó en mejorar las instalaciones de alguno de los clubes existentes –como el Verein Teutonia, el Bahía Blanca Lawn Tennis Club o el Círculo Lawn Tennis-, pero finalmente se impuso la idea de construir una nueva sede.
Fue así que se realizó una suscripción para adquirir un terreno de quintas de 22 mil metros cuadrados en avenida Alem y San Juan, vecino a las instalaciones del club Olimpo. Allí, el ingeniero Adalberto Pagano proyectó la sede-chalet que quedó concluida en dos años.
Se llegó de esa forma a la jornada inaugural, donde, en un clima de euforia, los 350 socios disfrutaron de las terrazas, salas para té familiar y las secciones de hombres y niños.
El acto incluyó una exhibición de tenis a cargo de players de la Capital Federal, todo amenizado por la Banda del Regimiento 5 de Infantería. “Tenemos nuestro local -dijo el presidente de la institución, Dr. Ayestarán- y dependencias para ejercitar nuestras aficiones deportivas. Es necesario, pues, empezar a vivir”.
El edificio fue sede de la Sociedad Sportiva hasta 1949, cuando fue expropiada por la provincia para ser parte de las dependencias del Instituto Tecnológico del Sur. La entidad adquirió ese mismo año la mansión que hasta hoy ocupa en calle Florida y Witcomb, construida en 1910 por el señor Apolinar Bañuelos con el nombre de La Floresta.