Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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Unipar, proveedor de insumos básicos fundamentales

La compañía, cuya planta está ubicada en Ingeniero White, es la mayor productora de soda cáustica y la segunda de PVC de América del Sur.

   Proveedor de insumos básicos fundamentales para la cadena productiva de la industria nacional, Unipar cumple un rol preponderante en la industria petroquímica.

   La compañía, cuya planta está ubicada en Ingeniero White, es la mayor productora de soda cáustica y la segunda de PVC de América del Sur.

   Unipar forma parte de la actividad petroquímica nacional prácticamente desde sus inicios, aunque su fundación se produjo en Brasil en la década del '60.

   “En paralelo al camino realizado por Unipar en Brasil, en nuestro país, Indupa fue una de las empresas embrionarias de esta industria argentina allá por los años 50, por lo que ambas estuvieron en los primeros pasos y marcaron el camino del desarrollo petroquímico, un pie en Brasil y el otro en Argentina”, rememoró el ingeniero Juan Racosta, director industrial de la compañía.

   Los destinos de ambas empresas se unieron en 2016, cuando Unipar adquirió la mayor parte del paquete accionario de Solvay Indupa.

   En su planta de White, Unipar produce materias primas básicas

   “Una de ellas es la Soda Cáustica, que es una materia prima fundamental para una vasta cantidad de procesos de fabricación”, contó Racosta.

   Se utiliza, entre otras, en las industrias de higiene, cosmética, papelera, alimenticia, siderúrgica, para el tratamiento de aguas y efluente, biocombustibles, en las centrales de generación de energía, etc..

   “La Soda Caustica es un químico que atraviesa transversalmente la mayoría de las industrias radicadas en el país, ya sean químicas, petroquímicas, alimenticias o energéticas”.

   En Unipar también se produce hiploclorito de sodio, más conocido como lavandina.

   “Es el producto más económico y más efectivo para desinfectar y sanitizar espacios, y en la potabilización de agua. Es irremplazable en términos de eficacia y costo los que quedó demostrado en este tiempo de pandemia”, señaló Racosta.

   El tercer producto es el PVC, que es un plástico que se utiliza en todo lo referente a conducción de agua, ya sean sanitarias o potables y en las industrias de la construcción, automotriz, textil y energética.

   “Es un polimero muy versatil, a tal punto que se utiliza incluso en los los blisters de los medicamentos y en las bolsas de uso médico para almacenaje de sangre y suero.”, comentó el director industrial.

   --¿Cómo aseguraron el abastecimiento de estos productos durante la pandemia?

   --La demanda de nuestros productos aumentó considerablemente en estos tiempos. El riguroso plan preventivo que implementamos en la fábrica orientado a que el virus no afecte a nuestros colaboradores, ha asegurado la producción y ha permitido mantener el normal abastecimiento a nuestros clientes. Prácticamente duplicamos la producción de lavandina, gracias a un comportamiento individual muy profesional y responsable de nuestro equipo de trabajo operando en el . marco de un protocolo preventivo muy riguroso.

   Algo similar sucedió con el consumo de soda cáustica.

   “El desafío era doble: producir más para abastecer al mercado interno de productos esenciales y, a su vez, robustecer la prioridad puesta en la seguridad y protección de nuestros compañeros de trabajo para minimizar los riesgos de contagio”.

   --¿Tienen más oportunidades de crecimiento?

   --Unipar es una compañía que está permanentemente en la búsqueda de nuevas oportunidades de crecimiento y de diversificación. Actualmente, en Argentina, somos una empresa que abastece al mercado local, ya que somos el único productor de PVC del país, por lo que tenemos cubierto prácticamente el 90 por ciento del mercado, pero también mantenemos un saldo de producto que es exportado hacia otros mercados del mundo. También somos el principal productor de soda cáustica y, al igual que el PVC, abastecemos el mercado local y también exportamos nuestro producto.

   Según señaló Racosta, el saldo exportable tiene como destino mayoritario a Brasil, aunque también se realizan exportaciones a Bolivia, Paraguay y otros mercados del mundo..

   Una de las características que distingue a Unipar es la relación directa con la comunidad.

   “Llevamos a cabo varios proyectos sociales. Uno que nos distingue, que se empleó en Brasil hace muchos años y que fue muy innovador para nuestra localidad, es el de “Fábrica Abierta”, que va mucho más allá que mostrar lo que hacemos”.

   Con este programa, el vecino tiene las puertas abiertas de la planta las 24 horas del día.

   “Pueden venir a visitarnos y recorrer las instalaciones sin limitaciones de tiempo ni de días. Desde que pusimos en marcha el programa, ya pasaron más de 2.500 visitantes. Ahora lo suspendimos por la pandemia, pero lo retomaremos ni bien se pueda”.

   También se realizó un llamado a organizaciones sociales para financiar distintos proyectos.

   “Es otra de las formas de relacionarnos y vincularnos en forma directa con la comunidad. Es una iniciativa nueva, en la que Unipar realiza una selección de proyectos comunitarios que tienen que ver con situaciones de vulnerabilidad social, problemas ambientales o temas educativos”.

   --Desde su experiencia, ¿cuál es el futuro de la industria petroquímica en nuestra ciudad?

   --Están casi todas las condiciones dadas para tener un desarrollo industrial destacado. Tenemos los recursos naturales, que se ven incrementados y potenciados por la reserva de gas y petróleo de Vaca Muerta. Contamos con capacidad humana para desarrollar los proyectos, porque los profesionales vinculados al área son de altísima capacidad. Y se suma el puerto de Ingeniero White, que es capaz de mover buques de gran porte en cantidad, calidad y eficiencia, vinculándonos así con el mundo.

   “Por otro lado, a nivel país, hay mucha necesidad de realización de obras de infraestructuras y detrás de cada obra aparece la necesidad de productos petroquímicos.. Por lo que tenemos los recursos, la capacidad y la demanda potencial; solamente falta unnexo intermedio que vehiculice y ejecute el desarrollo de manera sustentable”.

   “Creo que el gran “debe” de nuestro país es la infraestructura de logística para facilitar la vinculación de las regiones de nuestro país de manera más segura, económica y competitiva. Es necesario que se encaren obras de conectividad. Es sin dudas una cuenta pendiente para el desarrollo de toda la actividad productiva, no sólo industria petroquímica”, cerró Racosta.