Bahía Blanca | Jueves, 18 de abril

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Forte dijo que la ganadería dejó atrás la etapa del “quizás se pueda”

Para el presidente del Instituto de Promoción de la Carne Argentina, ya no se puede hablar de herencias ni de pasado. "Ahora hay que hacer y crecer", dijo.

Guillermo D. Rueda
grueda@lanueva.com

   “Venimos del ‘no se puede’; pasamos por el ‘quizás se pueda’ y ahora es el momento del 'se puede”.

   Ulises Forte, presidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), dijo que, para el sector ganadero, se terminó la transición.

   “Ya no podemos hablar de herencias, ni de errores del pasado. Estamos en condiciones de hacer y de crecer”, agregó, para insistir en un tema clave para el país: “el mercado interno está firme y consolidado”.

   También desestimó uno de los últimos debates que se originaban en el sector. “Se acabó la discusión entre consumo y exportación. En el último año quedó claro que se puede exportar más sin resentir el mercado interno, que también creció y con precios que se mantuvieron por debajo de la inflación”, aseguró.

Ulises Forte, titular del IPCVA. / Foto: Emmanuel Briane-La Nueva.

   Este clima de negocios se ratifica en las últimas cifras respecto de las exportaciones argentinas de carne vacuna, que lograron el mayor volumen en ocho años. En este sentido, en este mes de marzo se embarcaron 40.000 toneladas, una cifra sin precedentes desde enero del año 2010. Esto representa un crecimiento interanual del 83%. El principal comprador, en volumen, de la carne nacional continúa siendo China, en tanto la Unión Europea recuperó el primer puesto en cuanto a valor.

   “Pasaron pocos años desde que China pasó de ser un mercado improbable, y lejano, hasta convertirse en el principal destino en volumen para la carne vacuna argentina. De hecho, el IPCVA participó por primera vez en una feria de ese país recién en 2005, cuando el mercado aún no estaba abierto”, agregó. 

   “Hoy, poco más de una década después, estamos viajando a la próxima Sial China de mediados de este mes de mayo acompañados por los representantes de 28 empresas exportadoras, un número que supera a eventos tradicionales para los exportadores argentinos, como la Sial de París o Anuga de Alemania”, comentó.

Bifes a la parrilla

   El dirigente de General Pico, surgido de filas de Federación Agraria Argentina, sostuvo que se montará un pabellón de casi 1.000 metros cuadrados, con espacios individuales y un gran restaurante, en el que los importadores podrán degustar los mejores bifes a la parrilla.

   “Todos quieren viajar a China porque saben, como sostienen los analistas, que es una aspiradora de carne que compra todo. Y en esa misma definición está la clave del siguiente paso que debemos encarar en la cadena de ganados y carnes de la Argentina, representada en el Instituto”, aseveró Forte.

   “Todo esto sucede porque nuestra carne no es 'carne a granel'. No es una más; del montón. Es, como comprobamos hace algunos meses mediante un estudio de mercado que llevamos a cabo en la Unión Europea, una de las más prestigiosas del mundo occidental”, afirmó.

   Las 40 mil toneladas equivalente carcasa (tec), en marzo, superaron en 24% al registro de febrero; en 15% al récord anterior de enero y nada menos que en 83% a la cifra de marzo de 2017. Hay que retroceder a enero de 2010 para encontrar un registro mensual similar y a 2009 (el año de la gran liquidación) para hallar un marzo con más volumen, según indicó el sitio Valor Carne.

   El crecimiento de poco más de 5.000 toneladas peso embarque en relación a febrero, se explica fundamentalmente por mayores colocaciones en la Unión Europea (1.500 toneladas extras); en Rusia (+ 1.500 T); en Israel (+ 700 T); en China (+ 500 T) y en Chile (+ 400 T).

   El directivo sostuvo que por cercanía, y presencia en el mercado, para los chinos la carne de calidad es la australiana.

   “Y eso es lo que les tenemos que mostrar en (la feria de) China: que nuestra carne es la mejor. Porque está muy bien ubicar, en ese mercado, cortes como el garrón, el brazuelo o el cogote, pero también podríamos exportar hacerlo con bifes o lomos destinados a una población que cada vez posee mejores recursos económicos”, indicó.

   “Otro tanto sucede con los miles de hoteles de cuatro y cinco estrellas”, aseguró.

   Forte aludió también a que, por eso, desde el IPCVA se lanzó hace algunos meses una convocatoria internacional para la realización de un estudio de mercado y plan estratégico para la carne argentina en China y en Hong Kong, tanto para la congelada como para la refrigerada, con y sin hueso, y las menudencias.

   “Como resultado de esa compulsa se presentaron diez empresas, todas con oficinas en China, de las cuales se preseleccionaron siete. Finalmente se contrató una, que ya se encuentra trabajando en el relevamiento”, contó.

   “De allí que este nuevo viaje a la Sial China, una de las ferias más esperadas por los exportadores, tendrá como condimento adicional la evaluación in situ de los primeros resultados del estudio de mercado”, añadió.

   Este informe será presentado oficialmente —durante el mes de julio— en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

   “Luego pondremos en marcha un ambicioso plan de marketing que dará inicio a este segundo gran paso para nuestra carne: la conquista de China, no con cualquier carne, sino con nuestra carne  argentina, la mejor carne de mundo, aunque todavía no lo sepan”, aseguró Ulises Forte.

Las razones de Torelli

   Jorge Torelli, de la Unión de Industrias Cárnicas de Argentina (UNICA), dijo que las exportaciones de carne vacuna continuarán en aumento.

   Con China como locomotora del negocio —aún cuando el nuevo protocolo sanitario para carne enfriada y con hueso motive un reacomodamiento interno—, las perspectivas son muy buenas para la industria argentina.

   “Hoy China nos compra lo que antes demandaba Rusia y cuando Rusia salió del negocio motivó que los chinos pagaran menos. La vuelta de Rusia a los mercados, lenta pero sostenida, seguramente mejorará el precio para nuestras exportaciones”, dijo Torelli.

Jorge Torelli, de UNICA. / Foto: Pablo Presti-La Nueva.

   En cuanto a la cuota 481, de cortes vacunos de alto valor terminados a grano que ingresan a la Unión Europea con arancel 0, Torelli comentó que los rechazos disminuyeron —en un elevado porcentaje— porque la industria fue corrigiendo algunos aspectos.

   El industrial consideró, asimismo, que se debe avanzar con las negociaciones UE-Mercosur en el capítulo de las carnes para doblegar el lobbie francés, que es muy fuerte.

   “Convengamos que estas negociaciones son un camino de ida y vuelta. Tengamos presente que los europeos también quieren colocar sus productos en el Mercosur con aranceles mínimos y, por ejemplo, en el caso de la industria automotriz, a Brasil y a la Argentina les causa escozor y no quieren desbalancear sus negocios. Creo que esto va a llevar todavía un tiempo de negociaciones”, advirtió.

   Adrián Bifaretti, jefe del Departamento de Promoción Interna del IPCVA, dijo que los estudios —que tiene a disposición el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina— demuestran que los consumidores más jóvenes no representan una amenaza para el consumo de carne, aunque sí un gran desafío.

Javier Bifaretti, del IPCVA. / Foto: Emmanuel Briane-La Nueva.

   “En poco tiempo, los millennials significarán el 75% de los compradores de carne y son mucho más ansiosos, quieren compras más veloces y productos más elaborados. Es todo un desafío para la industria frigorífica nacional”, sostuvo Bifaretti.