violento asalto a mano armada en una vivienda
MONTE HERMOSO (De nuestra agencia) -- Una familia residente en esta ciudad resultó damnificada por un violento asalto a mano armada en el que le sustrajeron la suma de veintidós mil pesos, quedando la impresión de que los malhechores buscaban una suma mucho más alta.
El atraco se perpetró minutos antes de las 19.30 del jueves --pero recién salió a la luz ayer--, en la vivienda ubicada en Chascomús 541, propiedad de la familia García, que antiguamente fuera propietaria de un hotel en Monte Hermoso.
Según testimonios recogidos de los damnificados, un desconocido se anunció en la vivienda golpeando sus manos y preguntando si en el lugar se dedicaban a la venta de prendas de vestir.
Ante la insistencia, Alberto Omar García (70), quien se hallaba en el lugar junto a su mujer Laura, salió para atenderlo y esa circunstancia fue aprovechada por el malviviente para reducirlo y obligarlo a ingresar inmediatamente en la casa.
"Le pregunté `jefe, qué anda buscando', y me respondió `me dijeron que vendían ropa'. Pero al verlo, a pesar de que no estaba mal vestido, me di cuenta de sus intenciones. Entonces empecé a gritar con la esperanza de que mi vecino y mi mujer escucharan", dijo ayer Alberto García a "La Nueva Provincia".
El damnificado agregó que el malviviente lo redujo mediante violencia, le tapó la boca, y cuando logró dominarlo totalmente, le dio aviso a otro sujeto para que se acercara al inmueble.
García reconoció que en un momento estuvo a punto de tomar el arma que portaba el malviviente, pero no logró concretar ese propósito.
Buscaban U$S 150.000.
El damnificado explicó que en ese momento su mujer observó ingresar al segundo sujeto y le preguntó "gordito, ¿qué necesitás?", a lo que éste respondió `esto es un asalto, sentate ahí; vengo a buscar los 150.000 dólares que tenés acá".
Ante ello, la mujer le dijo que no tenían esa cantidad de dinero y que, como a las a las 19.30 tenía turno con el dentista, un vecino la iba a pasar a buscar.
"Si llega a venir, ese muere en la casa", fue la respuesta del delincuente al escuchar esa aseveración.
Según especulaciones hechas por el propio García, al momento de considerar por qué la familia fue "elegida" para este atraco, la relacionó con la venta del ex hotel Maga, que era de su propiedad y es lindero a su actual vivienda, pero resulta que la transacción con representantes de un sindicato, fue realizada hace aproximadamente tres años.
De todos modos, la mujer les entregó a los malhechores el comprobante de un plazo fijo por un monto en dólares, inferior al que exigían y que les pareció insuficiente.
"Cuando vieron ese papel se volvieron locos, pero le dimos la única plata que teníamos, que eran unos veintidós mil pesos para cambiar el auto", expresó Laura.
Culatazos.
En su plan de amedrentar al matrimonio, dentro de la vivienda, Alberto García fue golpeado en la región costal, mediante la utilización de la culata del revólver, a la vez que lo tiraron al piso y apretaron su cabeza, para evitar que los mirara.
Producto de esa acción, García, quien tenía colocados sus anteojos, comenzó a perder sangre por la nariz.
"Después que Laura les dio la plata, mientras el otro malviviente se quedaba conmigo, siguieron revolviendo los cajones en búsqueda de más dinero, sin encontrar nada", añadió García.
Una vez obtenido el botín, los malvivientes ataron a la pareja, dejándola encerrada en el baño y se fueron sin llevar otros artículos de valor de los que había en el hogar.
Los damnificados aseguraron que el traumático episodio se desarrolló muy rápidamente y dijeron que los desconocidos no tenían alrededor de 30 años de edad.
A pesar de la inmediata respuesta brindada por la policía, que acudió a la emergencia y dispuso un operativo cerrojo, al cierre de esta edición no se había logrado dar con el paradero de los autores del hecho.
Algo más que una sensación...
La situación que actualmente padece la ciudad balnearia en cuanto a la inseguridad, ya había provocado la indignación de sus comerciantes, que incluso se reunieron con autoridades civiles y policial, luego que el pasado sábado 2 de junio, autores ignorados se alzaron con un botín que superó los doscientos mil pesos en mercaderías.
En esa oportunidad, la delincuencia golpeó al comercio de telefonía Mundo Móvil, situado en la peatonal Dufaur, a pocos metros de Faro Recalada, que pertenece a Andrea Cariac, hija de un matrimonio dueño de la parrilla Luisito, que el 19 de enero de 2009 había recibido el primer cachetazo de la inseguridad, cuando les robaron aproximadamente noventa mil pesos, luego de ser privados de la libertad durante varios minutos.
"Este no es un robo aislado --había afirmado Adriana Borelli, madre de la dueña del negocio de telefonía y junto a su marido, Luis Cariac, propietaria de la parrilla asaltada anteriormente--; acá pasan todos los días. La semana pasada hubo más de cuatro robos, uno de ellos a mano armada. Entran en las casas impunemente y se llevan todo".
Pocos días antes del saqueo en el local de telefonía, un hombre que divide su residencia entre Bahía Blanca y Monte Hermoso, había asegurado que "ya me robaron más de veinte veces", en la casa que posee en el balneario.
Humberto Imán, en declaraciones publicadas el 23 de mayo último, sostuvo que "todas las semanas me roban algo, ya sea electrodomésticos, accesorios de la casa, alhajas o lo que sea".