Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Infartos: uno de cada 10 se producen en menores de 45 años

El tabaquismo y el componente hereditario son las causas principales. El cigarrillo incide doblemente en los jóvenes.

   En el Congreso Argentino de Cardiología 2021, organizado por la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), se presentaron los resultados de la investigación “Infarto agudo de miocardio con elevación del ST en pacientes jóvenes, incidencia y características clínicas”, que demostró que 1 de cada 10 infartos que se produce en Argentina es en personas menor de 45 años, y de ellos, 4 de cada 10 en mujeres, siendo el tabaquismo y el componente hereditario las causas principales.

   Adrián Charask, cardiólogo, asesor científico del Área de Investigación de la SAC y coautor de la investigación, refirió que “el tabaquismo tiene el doble de incidencia en pacientes jóvenes, comparado con aquellos que se infartan luego de los 45 años”.

   “El tabaco es un factor de riesgo muy importante: en Estados Unidos, 440.000 muertes al año están relacionadas con el cigarrillo”, destacó.

   El componente hereditario también demostró ser relevante en los pacientes jóvenes. Si bien se trata de un factor de riesgo no modificable, sí sería importante que se invite a las personas con antecedentes familiares a cuidar todavía más su salud en general y la cardiovascular en particular, dicen los especialistas.

   Yanina Castillo Costa, directora del Área de Investigación de la SAC y coautora de la investigación, afirmó que “debemos diferenciar el pronóstico a corto y a largo plazo. Si un paciente se infarta joven, seguramente lo haga porque tiene historial de tabaquismo o antecedentes heredofamiliares, como mostró el trabajo. Es poco probable que fallezca en ese primer evento, porque los jóvenes tienen menos mortalidad que la gente con más edad”.

   Y agregó: “Si el paciente deja de fumar, adquiere hábitos saludables y toma la medicación correctamente, probablemente tenga un buen pronóstico a largo plazo. Por el contrario, si sigue fumando o no realiza los cuidados necesarios, no es bueno, porque estos pacientes tienen muchas veces nuevos eventos coronarios”.

   El tabaco es una de las mayores amenazas para la salud pública, ya que produce más de 8 millones de muertes al año, de las cuales 7 millones son por consumo directo y 1,2 millones son de personas expuestas al humo del tabaco.

   Cerca del 13% de todas las muertes en mayores de 35 años en Argentina pueden atribuirse al consumo de tabaco. En nuestro país, 1 de cada 5 jóvenes de entre 13 y 15 años fuma y es más común entre las mujeres que en los varones (21,1 vs. 17,6%).

   Además, el 35,3% estuvo expuesto al humo de cigarrillo en sus hogares y un 43,7% en espacios públicos cerrados.

“Cuando miramos el pronóstico de infarto en Argentina respecto del resto del mundo, tenemos el doble de la mortalidad que los países desarrollados, con una mortalidad intrahospitalaria del 8,8 % mientras que otros países como Estados Unidos, Francia o España tienen 4 o 4,5%”, explicó Adrián Charask.

La salud cardiovascular

   En el Congreso Argentino de Cardiología 2021, organizado por la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), se presentaron los resultados de la investigación “Infarto agudo de miocardio con elevación del ST en pacientes jóvenes, incidencia y características clínicas”, que demostró que 1 de cada 10 infartos que se produce en Argentina es en personas menor de 45 años, y de ellos, 4 de cada 10 en mujeres, siendo el tabaquismo y el componente hereditario las causas principales.

   Adrián Charask, cardiólogo, asesor científico del Área de Investigación de la SAC y coautor de la investigación, refirió que “el tabaquismo tiene el doble de incidencia en pacientes jóvenes, comparado con aquellos que se infartan luego de los 45 años”.

   “El tabaco es un factor de riesgo muy importante: en Estados Unidos, 440.000 muertes al año están relacionadas con el cigarrillo”, destacó.

   El componente hereditario también demostró ser relevante en los pacientes jóvenes. Si bien se trata de un factor de riesgo no modificable, sí sería importante que se invite a las personas con antecedentes familiares a cuidar todavía más su salud en general y la cardiovascular en particular, dicen los especialistas.

   Yanina Castillo Costa, directora del Área de Investigación de la SAC y coautora de la investigación, afirmó que “debemos diferenciar el pronóstico a corto y a largo plazo. Si un paciente se infarta joven, seguramente lo haga porque tiene historial de tabaquismo o antecedentes heredofamiliares, como mostró el trabajo. Es poco probable que fallezca en ese primer evento, porque los jóvenes tienen menos mortalidad que la gente con más edad”.

   Y agregó: “Si el paciente deja de fumar, adquiere hábitos saludables y toma la medicación correctamente, probablemente tenga un buen pronóstico a largo plazo. Por el contrario, si sigue fumando o no realiza los cuidados necesarios, no es bueno, porque estos pacientes tienen muchas veces nuevos eventos coronarios”.

   El tabaco es una de las mayores amenazas para la salud pública, ya que produce más de 8 millones de muertes al año, de las cuales 7 millones son por consumo directo y 1,2 millones son de personas expuestas al humo del tabaco.

   Cerca del 13% de todas las muertes en mayores de 35 años en Argentina pueden atribuirse al consumo de tabaco. En nuestro país, 1 de cada 5 jóvenes de entre 13 y 15 años fuma y es más común entre las mujeres que en los varones (21,1 vs. 17,6%).

  Además, el 35,3% estuvo expuesto al humo de cigarrillo en sus hogares y un 43,7% en espacios públicos cerrados.

   “Cuando miramos el pronóstico de infarto en Argentina respecto del resto del mundo, tenemos el doble de la mortalidad que los países desarrollados, con una mortalidad intrahospitalaria del 8,8 % mientras que otros países como Estados Unidos, Francia o España tienen 4 o 4,5%”, explicó Adrián Charask.

La prevención es fundamental

   El especialista Claudio Majul señaló que “es pertinente recordar que lo más importante es la prevención: llevar un peso adecuado, una nutrición saludable, evitar el tabaquismo, controlar la hipertensión arterial, el colesterol y el azúcar en sangre, reducir el consumo de alcohol y realizar actividad física contribuyen a un buen estado de salud en general”.

   El infarto agudo de miocardio, junto con el ACV y la sepsis, constituyen enfermedades tiempo-dependientes. Esto implica que cuanto más tarde se consulta, mayor es el riesgo. Por ello, ante cualquier síntoma inusual, particularmente dolor de pecho, es importante llamar a urgencias o acudir a un centro médico de inmediatamente.