El Manchester United y su nuevo y colorido estadio
Tendrá la particularidad de estar cubierto por una gran sombrilla que se extenderá hacia el parque circundante, generando un espacio adicional.
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Es periodista, ingeniero civil y docente de la Universidad Nacional del Sud en materias relacionadas con el Patrimonio arquitectónico y el planeamiento urbano. Ha publicado notas en revistas Vivienda, Todo es Historia, Obras & Protagonistas y Summa +. Participa en varios micros radiales referidos a la historia de Bahía Blanca. En dos ocasiones recibió primera mención por parte de ADEPA en el rubro Cultura e Historia.
Considerado uno de los clubes más populares de Inglaterra, el Manchester United –fundado en 1878—renovará el distrito donde se ubica su actual estadio, para lo cual contrató al prestigioso estudio que dirige el arquitecto Norman Foster.
La intervención conforma un plan maestro para el distrito Old Trafford, cuyo eje central será el nuevo estadio, el cual se convertirá en el más grande del Reino Unido. El estadio se construirá en un terreno cercano al actual, sede del Manchester United desde 1910, el cual es probable que sea demolido.
La firma presentó las primeras imágenes del proyecto y de los espacios circundantes destinados a parques, desarrollos de uso mixto, cine y una estación de trenes.
El modelo tradicional de estadio de "fortaleza y estacionamiento" está siendo reemplazado por diseños más integrados y multifuncionales. Estos proyectos buscan transformarlos en destinos para todo el año, ampliando su función más allá del deporte para servir como centros comunitarios y puntos de referencia.
El estadio presenta una estructura abierta, con una distintiva cubierta permeable y ligera. Visible desde la distancia, está diseñada para albergar al público e intensificar la experiencia futbolística.
Según Foster, el nuevo estadio será un espacio abierto, protegido por una sombrilla que aprovecha la energía solar y el agua de lluvia. Esta "sombrilla" es una cubierta en forma de tienda de campaña sostenida por tres mástiles, los cuales evocan simbólicamente el tridente del club. La cubierta está diseñada acústicamente para llevar el ruido de la multitud más allá del estadio.
El estadio está planificado como elemento central del distrito, con su cubierta protegiendo una gran plaza pública diseñada para ofrecer experiencias interactivas para los aficionados y visitantes.
Una ventaja de la obra es la reducción del tiempo de construcción, gracias a una estrategia de prefabricación. Se construirá con 160 componentes prefabricados, transportados a través del Canal Marítimo de Manchester. Se planea reconstruir la estación de Old Trafford, creando una ruta directa y peatonal al estadio dentro del distrito urbano con un fuerte componente deportivo.