Bahía Blanca | Jueves, 03 de julio

Bahía Blanca | Jueves, 03 de julio

Bahía Blanca | Jueves, 03 de julio

Planta de GNL: "Bahía no merece quedar en el medio de este manoseo”

En la CGT se conformó la Mesa de Apoyo Sindical a la construcción de la planta en nuestra ciudad. Carlos Boer habló al respecto. 

Fotos: Prensa UOCRA

Dentro de la seccional Bahía Blanca de la CGT se conformó la semana pasada la Mesa de Apoyo Sindical a la construcción de la planta de GNL en nuestra ciudad, el megaproyecto de YPF-Petronas.

"Somos parte de la discusión porque representamos a todos aquellos que se desempeñarán en el desarrollo del proyecto. Buscaremos participar de las distintas reuniones para dar nuestra opinión, plantear nuestras dudas sobre el posible cambio de lugar y dar nuestro apoyo a la construcción en Bahía Blanca", explicó Carlos Boer, titular de la UOCRA y uno de los secretarios generales que tiene la delegación local de la Confederación General del Trabajo.

Esta mesa, que ya tuvo un par de reuniones internas, está compuesta por representantes de UOCRA, Unión Empleados de la Construcción y afine (UECARA), Camioneros, Trabajadores de la Industria del Gas, derivados y afines (STIGAS) y el sindicato Unico de Fleteros (SIUNFLETRA).

“Y sumaron su participación SUPA y SOMU, en representación de la agrupación intersindical portuaria. La intención es mostrar que los trabajadores queremos que este proyecto se haga aquí, tal cual estaba planificado”, amplió Boer.

Este grupo de sindicatos pretende aportar una visión y una perspectiva dirigida específicamente al sector obrero que tiene injerencia directa en la construcción de la planta de GNL.

"Todos sabemos que Bahía Blanca cuenta con la mano de obra necesaria; la infraestructura en alojamiento para los obreros que vengan de otros lugares del país; la existencia de materiales necesarios para la construcción; el acceso rápido a puertos, terminales ferroviarias y rutas nacionales, para la salida de la producción y el ingreso de materiales y el acceso a redes de gas, energía eléctrica y agua", enumeró el titular de la UOCRA local.

“Con la planta de GNL se generarían alrededor de 10 mil puestos de trabajo. Nosotros hablamos varias veces con representantes de YPF y siempre valoraron el hecho de que Bahía Blanca tuviera personal capacitado para este tipo de obras. Y ahora, curiosamente, analizan la posibilidad de llevarse el proyecto a un lugar en el que no hay nada ni nadie, como es Punta Colorada”.

“Evidentemente la política metió la cola. Y queda claro que este cambio de rumbo se debe a querer congraciarse con las provincias de Neuquén y Río Negro por los votos que precisa el gobierno para la Ley de Bases o bien por un castigo a la provincia de Buenos Aires por ser opositora. Pero Bahía Blanca no merece quedar en el medio de ese manoseo”.

Boer resaltó que una de las cosas positivas que deja esta situación es que todo Bahía se encolumnó detrás de esta lucha y se dejaron de lado las diferencias ideológicas o políticas.

“Y así tiene que ser siempre, porque Bahía la hace grande su gente y sus instituciones. Y si todos tiramos para el mismo lado, todo va a ser más sencillo”.

En esa misma línea, con la unión de la gran mayoría de los sectores productivos de la ciudad, Boer señaló que se debe trabajar en pos de la concreción de la obra de Paso Urbano.

“Hay que aprovechar esta mancomunión que se generó ahora en la ciudad para avanzar en el análisis de posibles soluciones para ese tema y evitar que quede estancado. Lo más importante y oneroso de ese proyecto ya está hecho, que son todos los trabajos subterráneos. Y no descubro nada si digo que esa obra debe terminarse por el bien de Bahía y la región”.

“No hay que olvidar que cuanto más tiempo pasa paralizada, más se retrocede en el porcentual de finalización, porque hay cosas que se van deteriorando y habrá que volver a hacerlas. Al menos debemos lograr que se mantenga lo que ya se hizo e ir avanzando de a poco con aportes de la provincia, el municipio, el puerto y algún sector privado”.

Cabe recordar que en Bahía Blanca se frenó absolutamente toda la obra pública nacional, lo que impactó de manera directa en los trabajadores de la construcción.

“En cierto modo se pudo amortiguar ese hecho con emprendimientos privados, pero el segundo semestre será todo un desafío para nuestro sector, porque hay varios proyectos que vienen demorados por el presente económico del país”.

Boer reconoció que cada día se acerca más gente al gremio de calle Saavedra y se anota en la Bolsa de Trabajo.

“Es gente que vuelve al gremio porque se quedó sin trabajo en otro sector o bien son personas jóvenes que vienen por primera vez porque porque no encuentran otra cosa en otros lados. La falta de fuente laboral se está sintiendo muy fuerte en la ciudad”.

Y agregó: “Hasta el año pasado, la Bolsa de Trabajo prácticamente estaba vacía, porque el empleo era pleno. Hoy hay muchos anotados, a los que vamos intentando colocar en distintas obras privadas”.