La UTN y la ciudad: una matriz plena de coincidencias

Redacción de La Nueva.

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   “La proyección de Bahía Blanca a una frontera no tan lejana de seis años es respecto del fortalecimiento del sector industrial pyme. En ese sentido, el parque viene creciendo en forma sostenida”.

   El Ing. Mec. Alejandro Staffa, decano de la Facultad Bahía Blanca de la Universidad Tecnológica Nacional, imagina a nuestra ciudad consolidando su perfil de ciudad puerto, industrial y de servicios, como un centro comercial importante y, de alguna manera, integrándose a la matriz energética.

   “Esto puede concretarse con los nuevos proyectos que tienen que ver con la exportación de productos desde Vaca Muerta, o la producción de subproductos de origen petrolero, así como integrando el desafío que es la plataforma offshore en el mar Argentino, donde Bahía Blanca, acaso, pase a ocupar un rol importante”, añadió.

   “Y, como ciudad cultural-educativa con sus cuatro universidades radicadas, más el Conicet, entiendo que su perfil educativo y científico tecnológico estará reforzándose hacia esa dirección”, dijo.

   El Ing. Staffa recordó la relevancia de la UTN desde la propia fundación, en 1954, por la vinculación a la ciudad y a la región a través del sector productivo y del trabajo.

“Siempre está la misión de desarrollar la industria nacional pyme y, a la vez, posibilitar que sectores sociales provenientes del trabajo tengan acceso a la educación superior y poder transformarlos en profesionales y posgraduados”, sostuvo.

   “En este sentido, la UTN va a seguir marcando ese perfil y será parte de la transformación de la faz industrial y del sector pyme no sólo de Bahía Blanca sino de la región, contribuyendo a la generación de nuevos parques con una fuerte vinculación tecnológica con las pymes a través de sus carreras y de sus centros de investigación”, explicó.

   Respecto de la pandemia por el COVID-19, el decano contó que, como a toda la sociedad, “al principio nos frenó bastante y, luego, quizás hubo cierta inercia en el regreso, como les sucedió a muchas instituciones”.

   Pero que también aportó herramientas transformadoras.

   “Son las que nos permiten vincularnos con mayor facilidad a través de las tecnologías de la información y de las comunicaciones, con lo cual, hoy, es bastante sencillo relacionarse con diferentes distritos más allá de Bahía Blanca. Eso amplía las oportunidades”, indicó.

   Respecto del retorno de las actividades a la presencialidad, el Ing. Staffa sostuvo que era muy esperado y que ha sido muy bueno.

   “Tuvimos una transición en el segundo semestre del año pasado. Fue cuando empezamos a tomar exámenes en forma presencial, así como iniciamos algunos cursos”, dijo.

   “También se viabilizó la sección de laboratorios para la formación práctica y de los servicios tecnológicos a la industria”, agregó.

La actividad presencial ha cambiado la escenografía de las actividades en la Universidad Tecnológica Nacional.

   “La presencialidad ronda, hoy, el 85 %”, precisó.

   “Hay una porción que, aún, está con virtualidad. Contamos con aulas híbridas, una tercera parte de ellas, que nos permite tener estudiantes presentes con remotos en forma sincrónica”, argumentó.

   “Esta alternativa, a futuro, tendrá una expansión y permitirá democratizar la educación y acceder a sectores que, por razones económicas o de movilidad, no podrían acceder a estudios superiores. Esto es incipiente”, auguró el directivo.

“La demanda se orienta a algo más interdisciplinario”

   Respecto de los desafíos de la UTN, el Ing. Staffa señaló que siempre están en torno a la ampliación de la oferta académica y, particularmente ahora, en la búsqueda de perfiles más interdisciplinarios.

   “Siempre hemos tenido perfiles disciplinarios fuertes con las carreras de ingeniería, pero ahora la demanda se orienta a algo más interdisciplinario, más ciencias blandas, por decirlo de algún modo, y no tanta concentración en una especialidad, sino en profesionales que puedan insertarte en las gerencias de producción, con facilidad y en un campo más amplio”, aseguró.

   “También pensamos ampliar la oferta respecto de la presencia territorial en la región”, añadió.

   “Es decir, tenemos que estar en otras ciudades, sobre cuando se trata de brindar servicios de alta tecnología o desarrollo en parques industriales”, aseveró el decano de la UTN.