Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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“En Huracán soy feliz, me hacen sentir como si hubiese nacido en el bulevar”

Gustavo Pedro Echaniz cumplirá su sexto año consecutivo como DT del “Globito”, donde fue campeón dos veces. Parece haber encontrado su lugar en el mundo, y todos los días le agradece a la Virgen de San Nicolás el hecho de tener y poder disfrutar de este trabajo que ama tanto.

Fotos: Archivo-La Nueva.

Por Sergio Daniel Peyssé / speysse@lanueva.com

   Huracán es el equipo de la Liga del Sur que más tarde empezó a entrenar. ¿Cuánta ventaja dará teniendo en cuenta que el torneo Oficial arranca el 7 de marzo, dentro de una semana precisamente?

   El Globito del bulevar completó hoy 15 días de pretemporada, y su técnico, Gustavo Echaniz, sabe que en el debut estarán muy lejos del nivel y de la dinámica que él pretende para un plantel que cuenta con 8 futbolistas de experiencia, 5 refuerzos y un montón de jóvenes promesas.

   “Huracán dio el puntapié inicial para comenzar a mover cuando el dirigente que maneja el fútbol del club (Marcelo Osores) me llamó para decirme que tenía el presupuesto armado como para encarar un año de competencia. Es un directivo ordenado, que pretende que todo sea claro y que siempre da el ok cuando sabe que cuenta con el sustento económico para bancar un proyecto y un desafío”, manifestó el “Potro”.

   “Como yo había dejado de ser el entrenador en marzo de 2020, cuando se declaró la pandemia, no podía exigir ni pretender nada, aún sabiendo que los otros equipos habían iniciado su preparación, algunos en diciembre y otros en enero. El llamado de Osores me permitió involucrarme otra vez con la institución, siempre al mando del conjunto de Primera división”, narró el ex delantero nacido en San Nicolás.

   El 8 de junio, Gustavo cumplirá 6 años consecutivos como DT del cangrejo, y en el transcurso de este 2021 también llegará a los 200 encuentros dirigidos.

   “Huracán me fue a buscar en un momento complicado de mi carrera, después que me habían echado de Olimpo. Es el día de hoy que sigo valorando que Osores, más que nadie, se haya fijado en mi. Me abrieron las puertas del club de par en par y deportivamente me permiten hacer y deshacer a mi gusto, y eso en los tiempos que corren es impagable”, admitió quien con el equipo del bule fue campeón del Oficial liguista 2015 y del Federal C 2017.

   “Además, me llamaron cuando yo estaba operado (le colocaron una prótesis en la parte izquierda de la cadera) y todavía no tenía el alta médica; confiaron en mi en plena recuperación, arriesgaron, y eso no tiene precio”, deslizó juntando las manos a modo de agradecimiento.

   Frunció aún más el ceño y mientras se servía gaseosa por segunda vez, le empezó a temblar la voz, como que Huracán no es un club más en su carrera como orientador (también estuvo en Olimpo, Jorge Newbery de Comodoro Rivadavia, Sarmiento de Pigüé, Tiro, Alvear FC, La Emilia de San Nicolás y Olimpo otra vez).

   “La gente de Huracán me hizo sentir uno más de ellos, como si hubiese nacido ahí. No todo en este ambiente es dinero, al menos en este momento de mi carrera pienso de otra forma. Hoy valoro la tranquilidad, ser feliz e ir a entrenar con ganas y entusiasmo. Huracán me hace sentir todo eso, por eso no pierdo la motivación al lado de gente que demuestra día a día que te aprecia y te respeta. No hay nada más feo que ir a trabajar a disgusto, estar en un lugar por obligación y no por placer”.

   —¿Te pasó en alguna ocasión?

   —Sí, en el club Querétaro, de México. Te cuento como fue: cuando se me venció el préstamo con San Lorenzo, en la temporada 85-86, me llamó Mario Zanabria, DT de Boca, para llevarme. En ese momento, el vice del xeneize era Pablo Abbatángelo, con quien me reuní en la mismísima Bombonera.

   “Arreglamos los números, el contrato, estaba todo dado para que se dé mi llegada a Boca, pero al otro día, cuando mi representante (Alberto José Poletti) habló con los dirigentes del América (dueño de mi pase), le informaron que a préstamo solo me daban al Querétaro, que se había transformado en una especie de filial de ellos. Me quería morir, pero no me quedó otra alternativa”.

   —¿Y?

   —Fui, pero mal, enojado, sin ganas. No rendí, fui un fiasco. Ganaba fortuna para la época, pero no estaba contento; no era feliz. Pensaba que podría haber jugado en Boca y se me revolvían las tripas. Fue uno de los momentos más amargos de mi carrera futbolística. Ojo, distinto hubiese sido volver al América, el club más grande de México, pero no, tuve que ir a un equipo donde no me sentí a gusto porque estaba pinchado anímicamente y con la cabeza en otro lado.

   —Buena anécdota.

   —La traje a colación para decirte que es un gusto trabajar en Huracán, donde no es necesario renegar porque no te hacen faltar nada”.

 

De lleno en lo que viene

   —¿Ya sacaste la cuenta de cuantos días de ventaja dieron?

   —Yyy... En la primera fecha enfrentamos a San Francisco, que viene entrenando desde diciembre sin parar. No tengo dudas que físicamente estarán mejor que nosotros, aunque debemos ser inteligentes para que el cansancio o la falta de ritmo no nos hagan equivocar.

   “Tengo la tranquilidad de saber que el grupo de jugadores `grandes´ que quedó (Alonso, Palazzani, Antognoli, Navarro y Scalco) conoce mi forma de trabajar, la idea de juego y cual es el objetivo de la institución una vez que empecemos a competir. Ellos serán los encargados de guiar al resto, sobre todo a los refuerzos que llegaron, chicos jóvenes que están activos y que se encuentran bien físicamente”.

   “Después creo tener a uno de los mejores preparadores físicos de la Liga (Federico Sabadín), y en él baso toda mi confianza”.

   “Sería un mentiroso o un ridículo asegurar que en tres semanas se puede poner a punto a un equipo de fútbol. Recién en la cuarta fecha vamos a estar al cien por ciento, con la dinámica y el ritmo que pretendemos como cuerpo técnico”.

   —Bien, no hay que olvidarse que son jugadores que hace un año y medio que no compiten de manera oficial.

   —Tal cual. Los chicos de Reserva no juegan desde octubre de 2019, y los de Primera desde noviembre. Habrá que tener mucho cuidado con la ansiedad, porque a varios la inactividad les generó una adrenalina extra. Además de lo físico y lo futbolístico, es muy importante lo psicológico, y a eso le estamos apuntando.

   “Huracán tiene un plantel dispar en cuanto a las edades, sabemos que en un lapso corto de tiempo no es lo mismo poner a tono a un pibe de 20 que a un jugador hecho de 35. Los primeros cuatro partidos del fixture van a ser los más difíciles del año, pero aceptamos el desafío tal cual nos toca. Arrancamos tarde, es cierto, pero está todo dado para que trabajemos tranquilos sin que nos falte nada. Y con la idea de pelear arriba, una costumbre de este club”.

   En relación a los refuerzos para el certamen que se avecina, el Globo sumó a Lucas Der, Joaquín Parra, Nicolás Cabral, Fermín Guzmán y Nicolás Lozano.

   Aunque la sangría por las bajas causaron mayor efecto: Nicolás Díaz Bender, Valentín Otondo, Erico Walker, “Pucho” Iglesias, Germán Pichihueche, Gastón Santillán y Eric Verón.

   Además de lo estrictamente futbolístico, Echaniz está comprometido socialmente con Huracán, a tal punto que convirtió la casa de un amigo en la actual pensión del club para que puedan vivir cuatro jugadores del conjunto principal.

   “Trato de dar una mano en lo que puedo, de ayudar desinteresadamente. La casa está en Terrada 324 y Huracán la alquiló para algunos chicos que vienen desde otras ciudades. Me encargo de que no les falté nada y que lo que se rompe se arregle enseguida; como para que piensen en el fútbol y no desvíen su atención en otras cuestiones”.

   “Mi señora (Madeleine Carmel), dos por tres, les lava la ropa y yo ahora les estoy consiguiendo unas frazadas para cuando venga el invierno. Viví mucho tiempo de pensión en pensión, sé lo que es y lo que siente el jugador estando lejos de sus seres queridos”.

   —¿Qué tipo de equipo va a ser Huracán en este 2021?

   —Yyy, todavía está en formación. Si conseguimos incorporar a un 9 de jerarquía, la idea es apostar a un 3-4-3, con dos volantes por afuera, uno mixto y otro posicional. Los centrodelanteros que tenía en carpeta arreglaron con otros equipos, así que ya estoy pensando en otra alternativa.

   —¿Por ejemplo?

   —En caso de no conseguir un referente de área, algo que hoy está muy complicado, la idea es traer un delantero veloz por afuera y atacar con tres rapiditos. El 3-4-3 o el 4-3-3 me siguen seduciendo, aunque todo dependerá del esfuerzo que pueda hacer el club para acercar a un jugador que sea más de lo que tenemos y que pueda marcar diferencias.

   “Igualmente, hoy el 9 titular es Rodrigo Gallegos, un pibe del club con polenta y que va a dar que hablar”.

   —¿Qué más podés decir de él?

   —Es un chico de Loma Paraguaya, categoría 2002, que hice debutar en 2016, pero que enseguida se llevó San Lorenzo. Allá estuvo tres años en menores y regresó distinto, con otra fisonomía física y otro carácter. Es de fibras rápidas, guapo, encarador. Necesita corregir algunos aspectos de su juego, como el hecho de pivotear de espaldas al arco, pero está en edad de aprender.

   “Se mueve por todo el frente de ataque y es generoso en el retroceso, porque corre, marca y se esmera por la recuperación del balón”.

   “Por más que en estos días cerremos con algún 9, él va a ser titular en el primer partido. Se lo ganó”.

   —Le tenés mucha fe.

   —Toda la fe. Después dependerá de él. Tiene la edad justa para afianzarse en Primera, y lo bueno es que fue escalón por escalón sin quemar ninguna etapa, algo ideal para cualquier jugador con condiciones y la ilusión de poder picar a otro nivel.

   “No es común que saltes de menores a Primera, que no haya un paso previo, y eso es lo que le explico a los chicos que ya están entrenando con nosotros. Además, al llegar, siempre te tenés que ganar el lugar, no sos indispensable de un día para el otro. Por suerte Gallegos, en San Lorenzo, hizo un curso acelerado de maduración y aprendizaje y hoy está listo para demostrar que puede ser el 9 de Huracán”.

   —¿En otros puestos no van a llegar refuerzos?

   —Estamos buscando un volante central, posicional, pero está tan difícil como el 9. La idea es ser un equipo vertical y dinámico. Cuando estemos al cien por ciento va a ser complicado que nos ganen jugando al fútbol.


La vara alta

   “Todos los años arrancamos para ser campeones. Sé que vamos a dar ventajas en el primer torneo (todos contra todos), pero la mentalidad mía y del cuerpo técnico es que el 7 de marzo, cuando se ponga en marcha el campeonato, nos tenemos que meter de lleno en el objetivo principal, que es ir a pelear por el 1”, destacó Gustavo Pedro.

   “Lo primordial es mantenernos en la A, algo que seguramente conseguiremos por la enorme ventaja que le llevamos al octavo y al noveno. Después, en el segundo semestre, la idea es ir por el título, y para eso vamos a necesitar tres refuerzos de jerarquía. Es lo que pienso ahora, por eso te lo digo, pero vamos a ver como se va desarrollando la competencia”.

   —Osores, al momento de la primera charla, ¿te exigió o te pidió algo?

   —Desde que lo conozco, siempre quiere salir más arriba que el primero…(risas). En 2017, cuando le empecé a pedir jugadores, me quería matar, pero le di a entender que, más allá que es fútbol y que no siempre 2+2 es 4, si vos contás con un buen potencial, no te equivocás y no sufrís bajas por lesiones, es factible que termines llegando a buen puerto. Y ese equipo fue impresionante.

   “En 2015 fuimos campeones de la Liga con un plantel de hombres y un grupo humano sensacional, que ganaba con coraje y actitud; y en 2017 armamos, a mi parecer, un equipo con una jerarquía superior a lo que exigía la Liga del Sur. Ese equipo no desafinaba nunca, cada uno sabía lo que tenía que hacer. Además de haber sido un placer dirigirlo, daba gusto verlo jugar”.

   —Hoy, ¿están muy lejos del nivel de aquellos dos equipos?

   —El actual es diferente. Un equipo como el de 2017 va a ser difícil de volver a conformar. En ese momento no solo encontramos rápido el funcionamiento, también ayudó que cada jugador en su puesto rindió al máximo. Teníamos al mejor Jeva, Linares, Machain, Pedro Fernández, Gonzalía, por citar a los de afuera... Un equipazo en todos los sentidos.

   —¿Van a hacer de local en el bulevar?

   —Sí.

   —Como está la cancha?

   —Bastante bien. Si la tendría que calificar, 7 puntos. Ha mejorado un montón, se trabajó mucho durante la pandemia. Se sacaron los árboles de atrás del arco, renovaron los paredones y el estadio cambió su fisonomía. Ahora si parece una cancha de fútbol.

   “Otro hecho a destacar es el escenario de menores, que fue resembrado y se encuentra como nunca. Será histórico para el club que los chicos puedan crecer y desarrollarse en un piso con césped. Gracias a Dios Huracán crece en ese aspecto”.

   “En el club hay gente buena y laburadora, que mete horas de trabajo para que todo esté en orden. El hincha es pasional y apoya, y eso que el bule es un barrio humilde y con muchas necesidades”.

   “Hace poco lo dije en una nota y lo vuelvo a repetir: los políticos no caminan por allá, parece que el bule es un barrio olvidado. Es una pena, porque hay gente que vive sin las necesidades básicas cubiertas y cada vez se le complica más”.

 

Lo quiso contar, y se emocionó...

 

   “Cuando jugamos la final del Federal C en San Cayetano, un domingo a las 11 de la mañana, vimos en carne propia la realidad del hincha de Huracán, lo que realmente podía llegar a hacer por amor al club y a los colores”, contó Gustavo, antes de emocionarse y pedir perdón por no poder seguir con la anécdota que tan bien recordaba. Y con lujos de detalles...

   Después de unos minutos, arrancó otra vez...

   “Cuando íbamos para la cancha, en un cruce de rutas, a dos kilómetros del estadio, había como 10 micros con hinchas de Huracán en las banquinas. Muchos mayores, pero también nenes chiquitos, descalzos, que nos miraban con una carita que, te puedo asegurar, te generaba un montón de sensaciones”.

   “Cuando di la charla técnica, miré fijo a los jugadores y les dije: `nosotros nos podemos ir amargados, decepsionados por haber jugado horrible, pero que esa gente no se podía volver triste a White´. Había que pasar a la final sea como sea, tenían que tener en cuenta que varios de esos hinchas habían dejado de comer 3 o 4 días para juntar la plata para el viaje y la entrada. No los podíamos defraudar bajo ningún concepto”.

   “Y la verdad, el equipo respondió con creces. Los chicos jugaron con el corazón, hicieron un partidazo, y el desahogo y los festejos fueron tremendos, inolvidables...”.

 

Lo avalan


186
   Partidos. Dirigidos lleva Echaniz en Huracán, desde el Apertura 2015 hasta ahora. Ganó 89, empató 44 y perdió 53 (55,73 por ciento), entre Liga del Sur, Federal C y B.