Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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El autódromo quiere transformarse en eje de desarrollo del deporte bahiense

"Un sitio en el que el deporte se una con lo educacional y genere valores para la vida”, señaló Adrián Saschrgorodsky, presidente de la sociedad que concesiona el espacio

Fotos: Pablo Presti-La Nueva.

Pablo Andrés Alvarez / palvarez@lanueva.com

   No sólo un trazado automovilístico. El objetivo es que el autódromo internacional Ezequiel Crisol trascienda fronteras y se convierta en un eje de desarrollo del deporte bahiense en general.

   “Un lugar en el que las familias puedan venir a desarrollar actividades en simultáneo. Un sitio en el que el deporte se una con lo educacional y genere valores para la vida”, señaló Adrián Saschrgorodsky, presidente de la sociedad que concesiona el espacio y que ve que los trabajos en el trazado están muy adelantados.

   “Estamos en la recta final. Pese a los contratiempos, es una obra que no se detuvo en ningún momento. Obviamente que nos hubiera gustado que todo fuera más rápido, pero quizás podríamos haber incurrido en errores que a la larga traerían problemas”.

   Y añadió: “Estamos convencidos que para la ciudad en general, los deportistas y los amantes del automovilismo es una obra trascendente, que marcará un antes y un después histórico. Era una picardía que una ciudad con la importancia de Bahía Blanca no tuviera un autódromo. Esa fue la premisa que nos motorizó, pese a que sabíamos todo el descreimiento que había en este tema. Sin embargo, pudimos unir muchas voluntades y encarar esta obra faraónica con mucha responsabilidad y seriedad”.

   Este proyecto, cabe recordar, no sólo contempla la reinauguración del circuito principal y sus obras complementarias.

   “Está pensado como un predio multipróposito, que tenga vida y movimiento todos los días y no sólo cuando haya carreras automovilísticas. Queremos que aquí dentro puedan realizarse muchas otras actividades deportivas, que propicien el acercamiento de la gente en forma diaria”.

   En ese sentido, ya se finalizó el kartódromo (incluso se está por iniciar una ampliación); la pista de  motocross (ya albergó carreras a nivel nacional) y tiene un avance del 80 por ciento el óvalo que contendrá al speedway (estiman que a partir del sábado próximo pueda ser utilizado para pruebas).

   “Buscamos que el predio tenga pertenencia social. Queremos que los chicos se vinculen con las actividades que aquí se brinden. Pretendemos que sea un espacio mucho más abarcativo que las meras competencias automovilísticas, que obviamente serán el eje, pero no serán un todo”.

   --¿Cómo los afectó el momento económico del país?

   --Además de generar un importante incremento de lo presupuestado inicialmente, teniendo en cuenta que iniciamos la obra con un dólar por debajo de los 20 pesos, también interfirió en los tiempos, porque se generaron demoras imprevistas, por ejemplo en la entrega de insumos.

   Adrián Saschrgorodsky reconoció que, al triplicarse los costos, surgieron momentos de incertidumbre en el grupo que encabeza este proyecto.

   “Sin embargo, todos apostaron por seguir adelante, en momentos que, quizás, era más fácil rescindir los compromisos asumidos. Eso demuestra lo que dijimos el primer día, que era un proyecto serio y planificado como una obra segura, que se empezaba y se terminaba. En el medio hubo circunstancias ajenas a nosotros que la demoraron un poco, pero lo importante fue que nunca se detuvo”.

   --¿Cómo manejan la ansiedad de los amantes del automovilismo?

   --Primero hay que comprender la dimensión de la tarea. No sólo fue compactar y asfaltar, sino que hubo que empezar de cero en muchos sentidos. Y los primeros trabajos fueron para obras de infraestructura que son muy necesarias, pero que no tienen impacto visual.

   “Nadie más que nosotros queremos terminarla, pero no queremos contagiarnos de esa ansiedad. Podríamos haber acelerado algunos procesos, pero queremos que ésta sea una obra de calidad, perdurable por 30 años o más. También hay que tener en cuenta que el proyecto de obras continuará aún después de la reinauguración del trazado principal. Este es un desarrollo secuencial”.

   --¿Cuánto tiempo falta para terminar el circuito principal?

   --En 60 días, como máximo, tiene que estar listo y habilitado. Ese es el plazo que manejamos. Siempre fuimos prudentes y creemos que ya no pueden existir contratiempos.

   “La obra va en camino distinto, aunque paralelo, a la ansiedad y necesidad deportiva, porque tampoco podemos manejar los calendarios de las competencias nacionales. Pero sí podemos asegurar que a partir de noviembre, el autódromo ya estará listo para ser usado. Nosotros nunca dijimos, en tal fecha viene el TN, sino que fueron especulaciones de los propios dirigentes deportivos. A nosotros nos interesa terminar la obra; una vez que esté eso, analizaremos qué categorías pueden venir a utilizarla de acuerdo al cronograma que maneje cada una”.

   Además del Turismo Carretera, el circuito estará en condiciones de que compitan todas las demás categorías nacionales, como ser Turismo Nacional (TN), TC 2000, Súper TC 2000 y TRV6, por citar algunas.

   “Nos falta terminar la pavimentación, que ya está en curso, y lo que tiene que ver con la estética del lugar y elementos de seguridad en pista. Son los tres ítems en los que estamos trabajando actualmente”.

   --A groso modo, ¿cuánto se invirtió hasta el momento?

   --Es una obra de alrededor de 20 millones de pesos. Más del triple de lo presupuestado inicialmente. Hay que valorar el trabajo y el compromiso de todos los que tomaron parte de este proyecto, porque realmente hubo un convencimiento total en llevarlo a cabo, aún en muchos momentos con viento en contra.   

   Todo ello será complementado por distintas propuestas comerciales.

   “Se viene trabajando a la par. En lo referente a ofertas gastronómicas, se desarrolló en la planta baja del patio de boxes una cantina nueva y en el primer piso se edificó un salón multiuso con capacidad para alrededor de 150 personas”.

   Y añadió: “en el proyecto se contemplan un par de piletas para utilizar en el verano, otro sector destinado para andar en bicicleta y hacer running y también realizar canchas de fútbol y básquetbol. La idea es que la gente pueda utilizar el predio como recreación, más allá  de lo estrictamente automovilístico”.