"Estuvieron más de 2 horas y se fueron cuando dije que prendieran fuego mi casa porque no tenía plata"
La abogada Gabriela Sotomayor, que este fin de semana sufrió una entradera en su casa, habló esta mañana por LU2 y contó que los delincuentes estuvieron más de dos horas y exigían dólares.
"Se fueron cuando dije que prendieran fuego mi casa porque no tenía plata", dijo la mujer que vive en Humberto Primo al 300.
Sotomayor estaba con su pareja, Víctor Hugo Giannotti, cuando ocurrió el hecho.
"Terminamos de cenar 9 y media de la noche y dije que iba a sacar la basura y a entrar la camioneta. Me dijo que iba él", comenzó relatando la mujer.
"Me puse a lavar los platos... escucho que entra la camioneta y después empiezo a escuchar gritos", continuó.
La mujer fue a ver qué pasaba y vio a un hombre encapuchado que quería meterse en su cocina. Según relató, intentó salir corriendo, pero el delincuente le pegó un culatazo en la espalda y la tiró al piso.
"Me entra a la cocina de los pelos y me pega mucho [...] Veo a Víctor maniatado, tirado en el piso, con un joven al lado que tenía pasamontaña", detalló la abogada.
Y agregó: "El otro era mayor, mucho más grandote. Y había un tercero, alto, vestido con pasamontaña, que tosía todo el tiempo [...] Mientras uno, el más joven, se quedó con nosotros en la cocina y me amenazó con el arma, los otros dos revolvieron todo, hasta levantaron pisos".
"Los llevé adonde estaba el oro. Les decía 'prendan fuego la casa, no hay plata acá, lo único que les pido es que no nos hagan nada'", dijo la abogada.
Y añadió: "No me importa la plata, se las doy, pero no la tenía. Solo tenía lo que había sacado del cajero para pagar unos pasajes de mi hija. Se llevaron los televisores, pero ellos querían dólares".
Los desconocidos se fueron con la camioneta de la víctima, que luego apareció en el barrio Maldonado. Según pudo averiguar La Nueva., las autoridades hallaron huellas en el vehículo.
La abogada contó que "tenían un handy, se escuchaba la voz de la oficial de policía, por lo que sabían que no estaba viniendo ningún móvil".
Por otro lado, agradeció que sus perros estaban en la parte trasera y no vieron las agresiones: "Si estaban acá, los mataban".
E indicó que el problema es del sistema que no está preparado: "No puedo decir que es culpa de la policía ni de la Justicia, creo que aprovecharon la oportunidad. No es un problema de la gente vs los funcionarios, es un tema que nos supera. [Los delincuentes] Nos superan en número y tecnología", dijo entre lágrimas.