Una pareja fue aprehendida luego de cometer un ilícito
La rápida reacción de la damnificada y la solidaria actitud de un cliente de un negocio ubicado a doscientos metros del lugar del ilícito, permitió que personal de la seccional Segunda aprehendiera ayer, poco después del mediodía, a una pareja que minutos antes había sustraído dinero en efectivo del local dedicado a la venta de prendas de vestir, denominado Oxis, que está ubicado en Estomba 444.
Los aprehendidos resultaron ser Melisa María Moreira (18), domiciliada en Matheu 1750, y Cristian Ariel Valdes (27), oriundo de Capital Federal.
El episodio se registró aproximadamente a las 13, en momentos que en el negocio de Estomba al 400 se encontraba su propietaria, identificada como Betiana Pereyra (23), acompañada por una amiga, Vanesa Kuhn, quien al cabo resultó ser la damnificada del hurto.
"Cuando entraron me di cuenta que estaban drogados. Sobre todo el chico. Y como advertí que podía tener problemas le dije a la chica que fuera al probador de atrás", explicó la propietaria.
El local cuenta con dos pequeños probadores, pero desde uno de ellos se puede acceder fácilmente a algunas prendas, y como la joven especuló que podría ser robada decidió que se utilizara un sector más alejado.
"El chico la acompañó hasta el probador, pero cuando yo me acerqué vi que salía del sector que utilizamos como cocinita. Y cuando le dije que ahí no era el probador, el me dijo `me confundí', comentó Pereyra.
A partir de ahí se fue desencadenando la pequeña aventura.
"Ellos se fueron enseguida y le comenté lo ocurrido a mi amiga, porque ella había dejado un bolso en la cocina. Y cuando lo revisó comprobó que le faltaba el monedero", relató.
Inmediatamente Vanesa Kuhn salió del local y comenzó la persecución, advirtiendo que ingresaban al ciber Bay.net, ubicado en Estomba 279, es decir a poco más de 150 metros del otro local.
Ya en el ciber Valdes habría solicitado que le cambiaran dinero. Pero al parecer la empleada entendió que le entregara dinero por lo que, asustada, llamó al dueño del ciber.
Mientras que desarrollaba esa confusa situación, Kuhn hizo su aparición en el ciber reclamando la devolución de su dinero e imputando a la pareja de la sustracción.
"Fue ahí cuando la chica pidió pasar al baño. Evidentemente en ese ínterin dejó el monedero", relató más tarde un empleado del ciber que prefirió el anonimato y que se enteró de lo ocurrido por comentarios de su compañera.
En ese momento, un cliente del ciber forcejeó con Valdes, hasta reducirlo ya que el malviviente pretendió darse a la fuga al verse descubierto.
"Me comentó mi amiga que cuando decidieron llamar a la policía, el chico no sólo quiso devolverle los 40 pesos que le había sustraído sino que le ofreció 20 más, que era todo lo que tenía", comentó Betiana.
"El chico decía que tenía Sida y no quería pasarse los últimos años en la cárcel, pero mi amiga decidió que debía aclararse la situación", concluyó la joven.
Moreira --a quien se le habría secuestrado una bolsita con pegamento-- y Valdes, alojados respectivamente, en dependencias de las seccionales Cuarta y Segunda, serán trasladados mañana, a las 7.30, a la sede de la Fiscalía, para cumplimentar el acto indagatorio.
Vehículos incautados
Cuatro automóviles fueron secuestrados en las últimas horas por la policía de Investigaciones local, durante procedimientos que se llevaron a cabo en nuestra ciudad y Tres Arroyos, se informó oficialmente ayer.
En este medio, fue arrestado Alejandro Hernán Cantero, de 35 años, soltero, remisero, domiciliado en Quilmes, en poder de quien habría sido hallado un Fiat Duna, con chapas de dominio y documentación apócrifas.
La fuente dijo que, sobre el coche, pesaba un pedido de secuestro por hurto de automotor librado por la comisaría Novena de Quilmes, hecho en el que resultó damnificado Daniel Juan.
En tanto, efectivos de la Unidad Investigativa afectada a delitos del rubro Automotores, estuvo en Tres Arroyos para, junto con personal del mismo área que presta servicio en esa ciudad, secuestrarle a Juan Gino (45), vendedor ambulatorio de automotores con domicilio en Neuquén, una pick-up Volkswagen Saveiro, patente colocada SUS-194.
De la inspección realizada se habría comprobado que la unidad tiene sus numeraciones de carrocería y planta motriz adulteradas, señaló el informe policial.
En la misma población se concretó el decomiso de un Renault 9, chapa TSY 064, sobre el que pesaba un pedido en tal sentido por estafa.
El coche --encontrado en poder de Mario Adolfo Rodríguez, de 63 años, mecánico, domiciliado en Tres Arroyos-- quedó a disposición del juez de Instrucción Flavio Igoldi, de Choele Choel. María Figueroa resultó perjudicada en el ilícito.
También se incautó por el delito de estafa, en poder de Rubén Oscar Monterrosa (44), remisero tresarroyense, una pick-up Chevrolet LUV, dominio BIV-103, cuyo secuestro había sido requerido por el juez de Instrucción Nº 5 de Puerto Madryn, doctor Néstor Lorenzetti, a instancias de lo denunciado por Justo Jaramillo.