Bahía Blanca | Sabado, 04 de mayo

Bahía Blanca | Sabado, 04 de mayo

Bahía Blanca | Sabado, 04 de mayo

Olimpo tendrá una lectura más tranquila de la serie tras ganarle a Sarmiento

El aurinegro metió el primero -juegan al mejor de cinco- ante los juninenses, por 78 a 68. Mañana, irá el segundo, nuevamente en el Norberto Tomás.

Por Fernando Rodríguez / ferodriguez@lanueva.com

Ganar siempre ayuda y más si se trata de una serie de playoffs que se empieza como local. Es poco menos que una obligación para después sí hacer un análisis más tranquilo de lo siguiente. Olimpo pudo cumplir con ese objetivo, venciendo a Sarmiento (Junín), por 78 a 68, en el inicio de los cuartos de final regional del Torneo Federal.

El aurinegro se topó con un rival con características juninenses: un equipo corto en centímetros, intenso y con tendencia bien ofensiva. La visita logró hacer daño, al punto que el trámite recién lo destrabó en los últimos cinco minutos.

Sarmiento siguió a Morán y congestionó cada vez que Piuma intentó dominar en la pintura. A la vez, con una media cancha picante, que rompió seguido, dejó expuesta en varias oportunidades a la defensa aurinegra, que le costó hacer pie.

El verde escapó 24-18 iniciado el segundo cuarto. Olimpo, con un juego más colectivo que lo habitual, no lograba sacar ventajas. Le costaba anotar. Naturalmente, Piuma fue cobrando protagonismo, volvió a las fuentes y el aurinegro metió un parcial de 19 a 6, para irse al descanso largo 41-34.

Mucho le siguió costando al equipo de Maceratesi dominar el juego. Es más, se jugaba al ritmo que proponía la visita. Y eso le impedía a Olimpo ganar en tranquilidad. Con 2m15 por jugar del tercer cuarto, estaba al frente 50-48.

Si bien intentó con paciencia respetar las ofensivas, poco resultado le dio porque estuvo errático.

Acaso con el lógico desgaste físico de un equipo corto, sumado al beneficio de un rival que poco lastimaba desde lejos, Sarmiento se metió en zona.

Olimpo la atacó con pases, pero le costó romperla por los bajos porcentajes. Hasta que, claro, en algún momento tenía que cambiar.

Un par de triples que entraron, el pibe Giménez que se prendió en los rebotes para generar segundos tiros, Capponi que hizo caso omiso al ampuloso reclamo de Piuma después de haber errado dos triples e insistió hasta que la metió y el resurgir de Marín en una noche negra para él, fueron consolidando el trámite a favor del aurinegro.

Sarmiento, como último recurso, salió a presionar en todo el campo, pero a esta altura tenía dos rivales: Olimpo y el reloj. No tuvo tiempo. Intentó, de eso no hay dudas. Y probablemente, repetirá. Olimpo, ahora, podrá hacer una lectura más tranquila de los sucedido.