Se llama Diego Armando, entrenaba con botellas y le dio a Unión un triunfo histórico
En el debut en la Copa Sudamericana, el delantero chaqueño de 23 años convirtió el gol del Tatengue ante Cruzeiro al minuto 94.
Diego Armando Díaz es un jugador que no solo lleva un homenaje a Maradona en su nombre, sino que tiene una historia única que lo distingue en el fútbol.
Con 47 goles en 43 partidos en una liga regional durante 2024, llamó la atención de varios equipos, pero fue Unión de Santa Fe el que lo fichó y, sin hacer inferiores en un club de AFA, hizo su debut en primera división a los 23 años.
Ayer hizo historia una vez más al darle el triunfo agónico al Tatengue ante Cruzeiro en el debut en la Copa Sudamericana.
A principios de año, tras el inesperado anuncio de que sería incluido en el plantel que dirige Cristian “Kily” González, en las redes sociales se habían vuelto virales los videos en los que se ve a Diego Armando usando botellas de fernet o de cerveza y baldosas de cemento en sus entrenamientos personales.
Una casa de barro y un trabajo en una carbonería
Diego Armando nació el 10 de enero de 2002, a las 11.15 de la mañana y con 50 grados de calor, en Los Frentones, un pueblo ubicado en el departamento de Almirante Brown, en la provincia de Chaco.
Criado en una casa de barro junto a sus ocho hermanos (seis varones y dos mujeres), trabajó en una carbonería para ayudar a su mamá y desde muy joven la pasión por el fútbol marcó su vida.
Diego no tuvo una formación como la de otros colegas: nunca hizo inferiores en AFA. Con enorme sacrificio pasó por distinto clubes regionales y eventualmente dejó la provincia de Chaco para jugar en Santa Fe. Allí se dio su gran explosión.
“A Diego lo conocí este año. Me lo recomendaron, me dijeron: ‘Hay un pibe que es una animal’”, comenzó Andrés Fernández, actual representante del delantero.
“Fui a verlo a su club en María Susana (Santa Fe) y me recordó a (Gabriel) Batistuta. Pateó siete veces al arco y seis fueron dentro de los tres palos”, reveló.
El cuerpo técnico del Tatengue se mostró impresionado por su capacidad delante del arco y decidieron ofrecerle una pretemporada a prueba, la cual empezó en enero de este año.
El agente, que también es profesor de educación física, ayudó al chaqueño para que pudiera llegar en las mejores condiciones posibles.
“Le dije a Diego: ‘Vamos a hacer un trabajo de adaptación desde lo físico y nutricional para que no te cueste tanto’”, detalló.
El delantero se tomó la iniciativa con total seriedad: a lo largo de unos 15 días, le mandó videos a Andrés para mostrarle cómo se preparaba.
“Me enviaba videos entrenando con tres botellas de Fernet como conos o haciendo abdominales con una baldosa de cemento”, contó Andrés, que también se encargó de supervisar la parte nutricional, sabiendo que la situación económica del jugador no era la mejor.
Finalmente, Diego Armando quedó en Unión, firmó su contrato y por primera vez en su carrera es parte de un plantel de la primera división del fútbol argentino. (Fuente: TN).