Sirenas en el bosque: una novela que enfrenta monstruos modernos
Teresa Prost presenta su nueva obra literaria, un llamado a reflexionar sobre los peligros que acechan a adolescentes en el mundo digital y una invitación a usar la literatura como herramienta de cambio.
En su más reciente novela, "Sirenas en el bosque" -editado por MB- Teresa Prost presenta una serie de personajes que crecen y se enfrentan a nuevos retos en la transición hacia la adolescencia. La obra es una continuación de "Un bosque oscuro y peligroso", su novela anterior sobre grooming, que utilizaba el cuento de Caperucita como base para reflejar el peligro del mundo digital.
La autora también valora el poder transformador de la literatura y comenta: “El cuento abre la puerta para decir y sentir lo verdadero sin morirnos de espanto. La literatura atraviesa los miedos, frustraciones y esperanzas humanas. En ‘Sirenas en el bosque’, busco que los jóvenes puedan identificarse, opinar y, sobre todo, estar preparados para enfrentar estos peligros sin ser sorprendidos”. En este sentido, Prost utiliza el simbolismo de las sirenas de la mitología griega para conectar con los adolescentes y abordar un tema contemporáneo.
“Estoy convencida de que se escribe sobre eso que nos inquieta, nos preocupa, nos zumba alrededor como un insecto. 'El conflicto es el tábano del pensamiento', dijo un conocido pensador y pedagogo. Y a mí me alarma la incidencia del mundo Internet en la cotidianeidad de nuestros pequeños y adolescentes".
Teresa recuerda también que en tiempos de su adolescencia, la preocupación de los adultos "era dónde estábamos, hasta qué hora y con quién volvíamos".
"Hoy, el pibe puede estar en la habitación de al lado, o sentado en el sillón del living, seguro dentro de las paredes de un hogar confortable y, sin embargo, recluido, aislado en un laberinto paralelo, inaccesible para quienes lo rodean. Y a veces ese laberinto puede ser peligroso, como en el caso de la ludopatía, que es nociva para todas las edades, pero sucede que los pibes y las pibas no están emocionalmente maduros como para ingresar a ese mundo, ni conocen las consecuencias. Y es un mundo que se les presenta como fabuloso. Me sucedió que, cuando comencé a investigar sobre apuestas online, se me dio por hurgar en las plataformas y el bombardeo publicitario fue inmediato y feroz".
Contadora de historias y narradora oral, la autora está convencida de que el cuento "abre la puerta para decir y sentir lo verdadero sin morirnos de espanto".
"De la misma manera que el espejo que usó Perseo para enfrentar a la Medusa sin mirarla a los ojos, porque eso lo hubiera petrificado. Suelo recurrir a los cuentos para contar cosas que quiero decir. En la literatura está todo. La literatura anda el camino del hombre. Atraviesa sus miedos, sus frustraciones, sus esperanzas, sus sueños, sus miserias más hondas y sus virtudes más sublimes".
Prost no solo busca contar historias sino generar un cambio real: “Mi objetivo es abrir el tema antes de que los chicos vengan a contarnos. Quiero que el libro sea como el espejo de Perseo, que permita enfrentar al monstruo sin mirarlo directamente a los ojos”. De esta forma, Sirenas en el bosque no es solo un relato, sino una herramienta para docentes, estudiantes y familias, un puente entre la ficción y la cruda realidad.
La génesis de esta obra - que le llevó alrededor de seis meses escribir, también surge de su contacto cercano con las problemáticas actuales. Como narradora oral, Prost recorre escuelas y observa las dificultades que enfrentan docentes y jóvenes.
“Hay chicos que se aíslan, que están conectados todo el tiempo, y docentes que hacen muchísimo para ayudarlos. Estas problemáticas son urgentes y necesitan visibilización”, relata y nos recuerda a la vez, que la literatura puede ser la herramienta más poderosa para enfrentar los desafíos modernos con valentía y empatía.
Sus comienzos
"Fui maestra y bibliotecaria. Siempre me gustaron los cuentos. Leerlos, escribirlos, contarlos. Seguro por eso, también soy narradora oral. Mi actividad como escritora comenzó a partir de la participación en concursos literarios. Escribo desde muy chica; sin embargo, que una editorial decida invertir para publicar tu texto, es otra cosa. Participar en concursos me daba algunas satisfacciones especiales, entre ellas, atravesar el filtro de un jurado, la mayoría de las veces, de excelencia. Así es como comencé a tener acceso al mundo editorial. A partir de la publicación de 'Algo para contar' (2008) premiado en el Concurso 'Palabra de Maestro' (Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires), se sucedieron varios títulos más".
Recuerda que cierto día le envió a Maryta Berenguer, de MB Editora, un texto.
"Y ella me dijo 'Acá hay una novela. ¿Y si la escribís?'. Así nació mi primera novela: 'Un bosque oscuro y peligroso', que transita el tema grooming, pensada para chicas y chicos de diez años en adelante. La historia propone cierta analogía con el cuento de Caperucita. Ese libro me trajo muchísimas gratificaciones: no solo porque se leyó (y se continúa leyendo) en muchos colegios, de varias localidades; sino porque alumnos, padres y docentes permanentemente me escriben o me mandan audios para contarme y agradecerme lo que les sucede con esa lectura. Incluso he recibido, además de fotos y dibujos, videos de actividades realizadas a partir de esa historia".
En este caso, la ilustración de tapa de "Sirenas en el bosque" fue realizada por Myrian Bahntje, quien logró sintetizar en una imagen la esencia del libro. Y el diseño, atractivo y accesible al mundo adolescente, estuvo a cargo de Diego Berenguer.